Candidatos presidenciales de la oposición advierten de una gran cantidad de irregularidades de cara a las elecciones del próximo 3 de diciembre, incluyendo manipulación de medios nacionales, aumento de tensiones y muestras de otra guerra civil étnica tras unas elecciones injustas. Madagascar va a elegir a su nuevo presidente en solamente tres semanas, y ninguna […]
Ravelomanantsoa -la única mujer candidata a la presidencia y bien posicionada entre los muchos contrincantes al actual presidente Marc Ravalomanana- ha escrito una serie de cartas al presidente francés Jacques Chirac, al presidente de turno de la Unión Africana (UA) y presidente de Congo Brazzaville, Dénis Sassou-Nguesso y al presidente de la Francofonía y anterior presidente de Senegal, Abdou Diouf.
En las cartas, Ravelomanantsoa advierte sobre lo que ella denuncia ser una gran cantidad de irregularidades de cara a las elecciones del próximo 3 de diciembre, incluyendo manipulación de medios nacionales, aumento de tensiones y muestras de otra guerra civil étnica tras unas elecciones injustas. Esto, según la candidata, no se debe permitir que ocurra y Francia, la Unión Africana y la Francofonía han tenido suficiente confianza en Madagascar.
Éste no es el primer candidato presidencial que advierte a la comunidad internacional de la posible injusticia que espera al país en las próximas elecciones. Pierrot Rajaonarivelo, el líder exiliado del anterior partido predominante de Madagascar, AREMA, y que fue expulsado por la polémica ascensión al poder de Ravalomanana en 2002, ha hecho varios esfuerzos por regresar a Madagascar como candidato, pero se le ha denegado la entrada. El pasado, mes, Rajaonarivelo acusaba a Occidente de no hacer nada contra la «tiranía y los malos tratos» en Madagascar.
Otro popular candidato de la oposición, el alcalde de Antananarivo, Roland Ratsiraka, invitó el mes pasado a la Comunidad de Desarrollo de África Austral (SADC), de la que Madagascar ahora es un miembro, a enviar una delegación de observadores electorales. En un viaje a Isla Mauricio – país miembro de SADC que ayudó a Madagascar a entrar en el grupo regional – Ratsiraka dijo que la isla vecina tenía un «deber moral de apoyar esta demanda de elecciones libres, justas y transparentes».
SADC, sin embargo, no ha anunciado hasta ahora ninguna decisión sobre si va a enviar a un equipo de observadores a las elecciones en Madagascar, aunque el cuerpo regional supervisa generalmente las elecciones en todos los países miembros. De hecho, como Ravelomanantsoa precisa en sus cartas, las delegaciones de observadores deberían haber llegado ya a suelo malgache, pues las campañas electorales comienzan oficialmente hoy.
Según Ravelomanantsoa, los observadores extranjeros son más necesarios que nunca, pues el actual gobierno del presidente Ravalomanana está adquiriendo «métodos autoritarios» y «represivos». Ella destaca, particularmente, el dramático rechazo a la candidatura de Rajaonarivelo. El presidente incluso «cerró los aeropuertos de la nación para evitar que un candidato de la oposición vuelva a casa, y llegó a decretar el cierre del espacio aéreo de Madagascar para la aviación civil».
La candidata lamenta «una gran cantidad de irregularidades», que en su opinión impedirán que las elecciones sean libres y justas. Incluso denuncia que la celebración de tales elecciones anticipadas era «inconstitucional», ya que sólo se permiten en caso de fallecimiento o dimisión de un presidente. Lo más importante, sin embargo, es que los medios nacionales no dan cobertura alguna a los candidatos de la oposición. Solamente el presidente Ravalomanana aparece en los medios.
Ravelomanantsoa advierte que la tensión está aumentando en Madagascar, que ya vivió meses de violencia tras las elecciones de 2002. «Las tensiones étnicas entre la población costera y de la meseta» son más fuertes que nunca, describe. La candidata dice que solamente pide una intervención internacional para «evitar una importante crisis que conllevará un verdadero riesgo de una guerra civil».