La OMS pide justicia y no caridad para los enfermos pobres
La rebaja en el precio de los fármacos antisida dirigidos a los países pobres, anunciada por varias compañías farmacéuticas, ha sido más aparente y «mediática» que real, aseguró ayer en el Fòrum el doctor Germán Velásquez, coordinador del programa de medicamentos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). «De los 30 millones de infectados por el virus del sida que viven en el África subsahariana, apenas 27.000 personas están en tratamiento –aseguró Velásquez–. En todos los países en desarrollo, sólo 300.000 enfermos los reciben».
El representante de la OMS cuestionó la irrupción de fundaciones y fondos privados, presididos por personajes públicos, que intentan abanderar la lucha contra el sida en los países pobres. «Esos estados necesitan justicia, fármacos de bajo coste, y no caridad –dijo Velásquez–. No hay que ser ingenuos, la industria invierte en fundaciones para proteger su imagen porque se ha abierto un debate ético sobre el coste de sus fármacos, pero el objetivo es proteger el mercado».
POCOS TRATAMIENTOS
En la República Surafricana, donde un 12% de la población está infectada por el VIH, sólo 5.000 personas reciben fármacos antisida, explicó ayer su ministra de Salud, Manto Tshabalala-Msimang, que participó en el diálogo Salud y desarrollo.
Suráfrica, que está organizando un sistema sanitario público y gratuito, no dispone de industria local que elabore fármacos antisida genéricos, de bajo coste, por lo que debe importarlos de Brasil, India o Tailandia, donde sí se ha instalado.
La producción de fármacos antisida genéricos fue autorizada por la Organización Mundial del Comercio para los países en que existan razones de emergencia sanitaria que lo justifiquen. Las grandes multinacionales farmacéuticas de EEUU, aseguró el representante de la OMS, están presionando a muchos de esos países para que «renuncien» a producir medicamentos de bajo coste. «Ya lo han conseguido en Costa Rica, Chile, Jordania, Singapur, Marruecos y Colombia», dijo Velásquez.