Nadie conoce hasta dónde puede crecer la maldad, parecería que sin fin y que cada día los malvados se levantan con el ánimo de ver cómo y dónde realizar alguna, que supere las de anteriores jornada s . Tiempo atrás, el Presidente Obama confiscó e invadió las propiedades diplomáticas del Estado ruso en EEUU, rompió […]
Nadie conoce hasta dónde puede crecer la maldad, parecería que sin fin y que cada día los malvados se levantan con el ánimo de ver cómo y dónde realizar alguna, que supere las de anteriores jornada s . Tiempo atrás, el Presidente Obama confiscó e invadió las propiedades diplomáticas del Estado ruso en EEUU, rompió para ello la Constitución de su propio país, cuya IV enmienda garantiza la inviolabilidad de domicilios que «se hayan ha salvo de pesquisas y aprehensiones arbitrarias…», ahora despedazan la tan cacareada libertad de prensa, de la que se jactan ser sus paladines, también consagrada en su Constitución, cuya primera enmienda «prohíbe la creación de cualquier ley… que vulnere la libertad de prensa.»
A los que nunca creyeron que la prensa libre reinara en algún lugar del mundo y aseguraban que respondía a los intereses del sistema, que defendía disimuladamente, no les llama la atención lo que EEUU hace con Russia Today (RT), aunque sí les repugna lo taimado del procedimiento. Primero crean la tramoya de que el presidente Trump habría ganado la elección presidencial con ayuda de Rusia, país del cual sería su agente; después, el FBI y el Congreso nombran una comisión para investigar los supuestos lazos de Trump con Rusia y la intervención rusa en las elecciones estadounidenses ; luego acusan a RT de haber perturbado este proceso, sin lo cual la Sra. Clinton, que gustosamente se ha prestado para la farsa, habría ganado dicha elección ; por último, el Departamento de Estado amordaza a RT con la exigencia de que se inscriba como agente de una potencia extranjera, algo inaceptable e inaplicable para los medios de comunicación y que fue aplicado por última vez a la Alemania Nazi durante la Segunda Guerra Mundial.
A pesar de que tanto Putin como Trump saben que culpar a Rusia de intervenir en las elecciones de EEUU es un infundio jalado por los cabellos y como la mayoría de los estadounidenses cree en la veracidad de esta absurda acusación, ambos mandatarios no tuvieron otra opción de reunirse, durante la cumbre del Foro de la APEC realizada en la ciudad vietnamita de Da Nang, casi clandestinamente, cuando se dirigían al lugar donde les tomarían la foto oficial y mientras los fotografiaban, para tratar importantes e inaplazables asuntos mundiales, porque de no hacerlo así la oposición, tanto demócrata como republicana, hubiera acusado a Trump de ser un pelele del mandatario Ruso.
Ambos gobernantes son políticos de muy alto nivel porque según palabras de Putin: «Conversamos durante la sesión de hoy, en general hemos discutido todo lo que pretendíamos discutir… Hay mucho por discutir, en el ámbito de seguridad y también sobre la colaboración económica que hoy en día es casi nula… porque se debe mirar al futuro y resolver los problemas importantes tanto para el pueblo de EEUU como para el pueblo ruso, para dar sustancia concreta a nuestros vínculos económicos»; mientras que Trump se preguntaba: «¿Cuándo se van a dar cuenta los que odian y los tontos de que tener buenas relaciones con Rusia es algo bueno, y no malo? Estos son siempre juegos políticos, malos para nuestros países… deberíamos trabajar juntos para resolver los problemas de Siria, Corea del Norte, Ucrania y el terrorismo» y afirmó que está seguro de que «Putin está convencido de que ni él ni Rusia se entrometieron en los comicios». Estos estadistas no se dejan vencer por la profunda crisis política que separa a sus países ni por las circunstancias.
Regresando al asunto de RT, ¿qué se oculta detrás de esta tragicómica escenografía? Frustración y nada más que frustración. Frustrados por la no desintegración de Rusia y su renacer vigoroso, que reta su hegemonía; frustrados por las pérdidas en las inversiones en tanta guerra al borde del fracaso; frustrados por la fortaleza de China y sus billonarios proyectos, a los que se suma todo el mundo; frustrados por no poder derrotar a los movimientos democráticos, que se oponen a los gobiernos vasallos impuestos por ellos; frustrados por la derrota de los terroristas en Siria y otros lugares del mundo, que desnuda su política del caos controlable; frustrados porque China creó del Banco Asiático de Inversión en Infraestructuras, que desafía a su propio Banco Mundial; frustrados porque China puso en marcha la Nueva Ruta de la Seda, que inutiliza sus gigantescas inversiones marítimas, terrestres y espaciales; frustrados por no poder controlar la agitación social que, aunque incipiente y desorientada, nace en el seno de su sociedad; en fin, frustrados de que sus gigantescos medios masivos de comunicación no pudiesen rivalizar, usando argumentos e ideas, con las emisiones alternativas de RT, que expone una visión de los hechos apegada a la realidad y da cabida a los que carecen de voz en los medios occidentales, descargan su fracaso con la antedicha medida, que sólo les traerá nuevas frustraciones.
A cualquiera decepciona la falta de libertad de expresión en EEUU y el acoso a RT, no se diga al mandatario ruso, Putin, que al comentar este acto sostuvo que todo medio de comunicación tiene derecho a expresar su opinión. «Uno puede discutir con ellos, pero no mediante el cierre o creando las condiciones que imposibiliten sus actividades profesionales, sino ofreciendo su propio punto de vista, llevando esa información a la audiencia… la ofensiva contra nuestros medios de información masiva en EEUU es un ataque contra la libertad de expresión… conducido por las mismas personas que siempre afirman ser los epítomes de la democracia», por lo que «habrá una respuesta adecuada y simétrica», además subrayó que «no existe ni puede existir ninguna prueba de que nuestros medios de prensa se entrometieran en la campaña electoral estadounidense de 2016.»
Lo peor de este sinsentido por parte de EEUU, sinsentido que responde a la lucha para derrocar o eliminar a un presidente legítimamente electo, le guste o no al resto del genero humano, es que para responder a una medida tan estúpida, Rusia se verá obligada a castigar a medios de EEUU como CNN, la Voz de América, Radio Libertad, el canal de TV Current Time y otros más, que gozan de buena audiencia en Rusia, lo que contradice los principios de democracia y libertad de expresión que actualmente practican las autoridades de Moscú en todos los niveles.
Es que no sólo el Departamento de Estado de EEUU, todavía controlado por los partidarios de Obama, lleva a cabo esta política sucia, sino que cierto sector de la sociedad estadounidense juega el juego de perder-perder, que debería ser cambiado por el de ganar-ganar, debido a que no acepta que Trump ha sido electo porque la mayoría de su pueblo se encuentra decepcionado de la élite que los gobierna, por lo que está interesado en empeorar las relaciones con Rusia, ceguera que les puede conducir a una definitiva derrota.
Tanto va el cántaro al agua, que al fin se rompe, algo que todos esperan pase con el totalitarismo cínico, que impera en EEUU.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.