La inminente visita de Estado del presidente chino, Xi Jinping, a Estados Unidos y su encuentro con el mandatario del país norteamericano, Barack Obama, son «muy significativos» para los dos países y el mundo en general, ha dicho Ezra Vogel, profesor emérito de la Universidad de Harvard. «Las relaciones China-Estados Unidos están relacionadas con el […]
La inminente visita de Estado del presidente chino, Xi Jinping, a Estados Unidos y su encuentro con el mandatario del país norteamericano, Barack Obama, son «muy significativos» para los dos países y el mundo en general, ha dicho Ezra Vogel, profesor emérito de la Universidad de Harvard.
«Las relaciones China-Estados Unidos están relacionadas con el futuro del mundo entero, así que ambos países necesitan trabajar juntos y hacerlo bien», dijo Vogel a Xinhua en una reciente entrevista en su residencia cerca del campus de Harvard.
«Desde la visita de (Henry) Kissinger a China (en 1971), Beijing y Washington han establecido una relación cada vez más estrecha. Como China está ganando cada vez mayor influencia en el escenario mundial, y Estados Unidos también desea ver un mundo sano y seguro, las dos grandes economías han unido sus esfuerzos en muchas ocasiones para abordar los principales desafíos globales», agregó el profesor de 85 años de edad.
Durante una conversación telefónica el 11 de febrero, Xi aceptó una invitación por parte de Obama para realizar una visita de Estado a EEUU en septiembre, la primera de este tipo al país norteamericano desde que asumiera el puesto en marzo de 2013.
En rueda de prensa el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Hong Lei, afirmó que se publicará una agenda detallada de la visita en los próximos días.
Vogel indicó que aunque se trata de la primera visita de Estado de Xi a Washington, él y Obama se reunieron y sostuvieron conversaciones anteriormente en Sunnylands, California, y en Beijing, intercambiando puntos de vista de una manera sincera y franca. Por lo tanto, se espera que sus previstas conversaciones en Washington D.C. a finales de septiembre mejoren la comunicación de forma más amplia y profundicen la comprensión mutua, lo que será positivo para los lazos bilaterales.
Detallando que las relaciones entre EEUU y China se ven a veces empañadas por algunas tensiones y disputas, el profesor dijo que la visita de Xi puede desempeñar un papel importante en la ampliación de confianza mutua, la resolución de problemas existentes y la gestión de diferencias entre los dos países.
Durante un viaje a finales de agosto a Beijing en preparación para la visita de Xi, la asesora de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Susan Rice, dijo que su país tiene voluntad de trabajar con China para hacer de la visita no solo un éxito completo, sino también «un hito» en las relaciones bilaterales.
Estas declaraciones demuestran que Obama «acoge con mucha satisfacción» la visita de su huésped chino, y «entiende completamente» la importancia de las relaciones bilaterales, comentó Vogel.
Según el profesor, los temas que los dos líderes discutirán en sus conversaciones incluyen la futura cooperación en el cambio climático y el medio ambiente, medidas potenciales para estabilizar la economía global y defender la seguridad del mundo, la seguridad cibernética y los intercambios militares bilaterales.
El experto añadió que cree que los dos líderes podrían sorprender con algunos temas, «podrían anunciar algunas cosas buenas como políticas resultantes», dijo. «Considero que los dos líderes quieren conseguir este progreso».
Como autor de «Deng Xiaoping y la Transformación de China», un libro ampliamente considerado como fiel al objetivo de relatar la vida del difunto líder chino y las tres décadas de reforma y apertura del país asiático, Vogel cree que incluso hoy en día, muchos estadounidenses no saben mucho sobre China, y China no está haciendo suficiente para ayudar al mundo exterior a entenderla.
Con informes mediáticos afirmando que Xi tienen programado pronunciar varios discursos durante su visita, Vogel ha expresado su esperanza de que las palabras del presidente puedan demostrar un espíritu abierto y sincero para producir «efectos positivos» en el pueblo estadounidense.
Los planes de Xi de interactuar con gente de todos los ámbitos de la sociedad en EEUU también «es muy significativo para los círculos económicos, académicos y mediáticos, así como para los estadounidenses de a pie», añadió.
El profesor, un reconocido experto sobre China en EEUU, también espera que durante su visita Xi explique y profundice sobre algunas políticas e iniciativas chinas, como el Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (BAII), las iniciativas de la Franja y la Ruta, y la construcción de las relaciones entre potencias principales y la comunidad global de futuro compartido.
«Estos son todos buenas ideas y conceptos, pero China todavía necesita clarificar sus intenciones y probarlas con acciones concretas»,dijo.
En base al entendimiento y la confianza mutuas, dijo, «yo y muchos otros estadounidenses creemos que el gobierno de EEUU debería aceptar e involucrarse gradualmente en algunas de las iniciativas propuestas por China, como el BAII, y que así lo hará».
La visita de Xi también ayudará a promover los intercambios entre personas y la amistad, que sirve como una importante base para los lazos bilaterales, dijo el profesor.
Vogel destacó la temprana visita de Xi a EEUU en 1985 como funcionario a nivel de distrito en una gira de investigación agrícola en Iowa, y su emocional reunión con sus «viejos amigos estadounidenses» en 2012 cuando visitó el país norteamericano como vicepresidente de China.
«Los estadounidenses también aprecian la amistad y los buenos sentimientos. Si el presidente puede aprovechar esto en su próxima visita, creo que generará una influencia política y mediática bastante favorable», explicó el experto.
«Hace como una semana, enfermé en China y me sometí a una exitosa cirugía menor en (la municipalidad suroccidental de) Chongqing», dijo, detallando que desde su primera visita a China en la década de los 70 del siglo pasado, tanto el sistema sanitario como el equipamiento disponible han mejorado enormemente hasta igualarse a los de naciones desarrolladas, inlcuido EEUU.
«Esto se puede atribuir en parte a los intercambios y la cooperación de China con el mundo exterior, incluyendo EEUU, que a su vez ha beneficiado a un visitante extranjero como yo», dijo. «No hay motivo por el cual no deberíamos continuar con esto».