La farandulera criolla Sheyla Rojas está haciendo una publicidad fenomenal para las criptomonedas. Se calcula que para el 2035, mil millones de personas estarían integradas a esta dinámica.
El bitcoin es una criptomoneda digital libre y descentralizada que se usa como medio de pago directo sin ningún tipo de administrador de por medio. A diferencia de una divisa, las criptomonedas no son dinero testamentario, es decir que no están respaldadas por la confianza de un Estado, BCR o por otra mercancía –como el oro-.
Según el economista Pablo Heller, “para dar consistencia y seguridad a su operatoria se utiliza un sistema que establece un registro público de todas las operaciones, que todos están en condiciones de conocer y permite un consenso entre todas las fuentes de acceso a la red (nodos), lo que se conoce como block chain (cadena de bloques). El Bitcoin, que ha sido pionero en la materia, se crea a través de un proceso conocido como “minería”, que habilita la generación de nuevas monedas a partir de la resolución de problemas matemáticos de alta complejidad gracias a procesadores informáticos que insumen grandes cantidades de energía”, (09/09/21).
Por este motivo, su desarrollo en el mercado mundial ha sido muy volátil. A pesar de caídas del 80% de su valor en 2018, y del 50% en 2021, su crecimiento es de aproximadamente 20000%. Elon Musk aceptó el pago de sus autos con Bitcoins para luego rechazarlas. Y es que, en la disparidad de los billetes comunes, los Bitcoin no tienen una numeración de serie para poder rastrear a los compradores y vendedores que utilizan esa moneda virtual.
Obviamente que este factor sería seductor para los que buscan el anonimato; y por tanto el tráfico, la especulación y la estafa, etc.
¿Reemplazará al dinero?
No obstante, políticos como el presidente Bukele o Milei (incluso algunos de izquierda), acaban de declarar legal su uso, así como su carácter disruptivo, respectivamente, señalando que han llegado para transformar la vida y superar la crisis mundial. No obstante, a la vez que algunos están haciendo multimillonarios negocios, pues, “solo 4% de las direcciones de Bitcoins posee 96% de todos ellos, mientras que las 1.000 personas más ricas poseen 40% y el 70% más pobres posee menos del 1,7% de todos los Bitcoins”, (Criptomonedas y anarco capitalismo, 06/2018)
Y es que las bitcoins no serían dinero ya que compiten con los bancos y además no son “independientes” de la dinámica de las relaciones de producción capitalista. Se ubicarían en un lugar dependiente, cuyo valor estaría expresado en las divisas tradicionales, “y en esa medida -y sólo partir de esa mediación- están en condiciones de intervenir como medio de intercambio de otras mercancías”.
Esto es lo que explica porque después de que China haya planteado la creación de su propia criptomoneda (para restarle peso al dólar), pues haya tenido que recular, lo cual podría expresar que las bitcoin también intervienen como un factor de desestabilización y campo de disputa entre las potencias económicas.
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