El director de MBHR, Aleksandr Brod, expresó que testigos osetanos reportaron que muchos de los georgianos capturados tenían numerosas marcas de inyecciones en sus brazos.
El lunes, la Oficina de Moscú para los Derechos Humanos (MBHR) presentó en Nueva York un libro de fotos y testimonios del ataque a Osetia del Sur. El director de MBHR, Aleksandr Brod, expresó que testigos osetanos reportaron que muchos de los georgianos capturados tenían numerosas marcas de inyecciones en sus brazos.
Él sugirió que ellos «no se atreverían quemar a mujeres y niños vivos encerrados en iglesias o lanzar granadas dentro de los sótanos donde personas se escondían, a menos que ellos estuvieran drogados.» Brod citó informes de tropas georgianas que atacaron a caravanas de civiles que huían del lugar y el bombardeo deliberado al hospital de Tskhinvali, escuelas y áreas residenciales.
Desde el comienzo del conflicto, tanto osetanos como rusos acusaron a Georgia de planear el genocidio de ciudadanos de Osetia. Según el MBHR, por lo menos 1.690 personas fueron asesinadas y alrededor de 1.500 resultaron heridas durante la guerra de cinco días. Georgia niega las acusaciones de crímenes de guerra, mientras que Human Rights Watch cree que el número de víctimas ha sido exagerado.
Brod dijo que un tribunal internacional debería ser establecido para investigar los eventos del ataque a Osetia del Sur. MBHR es una organización de derechos humanos con base en Moscú que ha estado monitoreando y publicando casos de racismo, xenofobia e intolerancia religiosa en Rusia.
Traducido al castellano por Ivana Cardinale