El presidente de Irán, Mahmud Ahmadinejad, que había cancelado su asistencia a la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS) por las masivas protestas de la oposición política en Teherán contra un supuesto fraude en las elecciones, apareció este martes en Yekaterimburgo, justo a tiempo para tomarse la fotografía de rigor con el […]
El presidente de Irán, Mahmud Ahmadinejad, que había cancelado su asistencia a la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS) por las masivas protestas de la oposición política en Teherán contra un supuesto fraude en las elecciones, apareció este martes en Yekaterimburgo, justo a tiempo para tomarse la fotografía de rigor con el anfitrión, el presidente de Rusia, Dimitri Medvediev, lo que puede interpretarse como una suerte de espaldarazo a su cuestionada relección el viernes anterior.
Un fuerte apretón de manos selló el encuentro de los presidentes, quienes no escatimaron sonrisas frente a las cámaras de televisión y de los reporteros gráficos, pero su conversación fue tan breve que, en palabras de la vocera del Kremlin, Natalia Timakova, ni siquiera se sentaron
.
Tampoco quiso Medvediev aprovechar la televisiva ocasión para felicitar a Ahmadinejad, aunque Timakova aseguró que los líderes de la OCS lo hicieron al comienzo de la sesión de hoy.
Con el mismo bajo perfil se manejó la entrevista de Ahmadinejad con el presidente de China, Hu Jintao. De acuerdo con un breve despacho de Xinhua, la agencia noticiosa oficial china, los mandatarios intercambiaron opiniones sobre la relación bilateral y cuestiones de interés mutuo
.
Durante su intervención en la sesión de la cumbre de la OCS transmitida por la televisión local, Ahmadinejad no hizo referencia alguna a la situación en su país.
En cambio, arremetió de nuevo contra Estados Unidos y señaló que el orden capitalista internacional se está replegando y que la era de los imperios se acabó y no volverá a renacer
.
Ahmadinejad resumió: Irak sigue ocupado, en Afganistán reina el desorden, continúa sin resolverse el problema palestino, mientras Estados Unidos está inmerso en crisis económicas y políticas, sin visos de solución, y sus aliados tampoco pueden superar la crisis
global.
La cancillería rusa, conforme con las reglas del ritual diplomático y por boca del viceministro Serguei Riabkov, comentó el fugaz viaje de Ahmadinejad en estos términos: Consideramos que esta visita refleja las relaciones de amistad, buena vecindad y cooperación que durante ya mucho tiempo definen los nexos entre Moscú y Teherán
.
Riabkov omitió hacer cualquier valoración de las cuestionadas elecciones presidenciales iraníes arguyendo que se trata de un asunto interno
del país asiático.
http://www.jornada.unam.mx/2009/06/17/index.php?section=mundo&article=026n1mun