El relator especial de la ONU contra la Tortura, Juan Méndez, dijo ayer que ha vuelto a pedir a las autoridades de EE.UU. visitar la cárcel en la base naval de Guantánamo y otras prisiones en los estados de California, Nueva York, Colorado y Pensilvania. «Llevo más de un año hablando con el Departamento de […]
El relator especial de la ONU contra la Tortura, Juan Méndez, dijo ayer que ha vuelto a pedir a las autoridades de EE.UU. visitar la cárcel en la base naval de Guantánamo y otras prisiones en los estados de California, Nueva York, Colorado y Pensilvania.
«Llevo más de un año hablando con el Departamento de Estado para poder visitar la prisión federal Florence ADX , en Colorado, y varias cárceles estatales de California, Nueva York y Pensilvania», dijo Méndez en una conferencia de prensa en la sede de Naciones Unidas.
El relator especial, que ha expresado en varias oportunidades su preocupación por la situación del sistema de prisiones en varios estados de EE.UU., detalló que su última petición oficial se presentó el pasado 18 de mayo pero todavía sigue «en trámite».
«En el caso de California y Nueva York, mi principal preocupación sigue siendo el uso del confinamiento solitario», reconoció Méndez, de nacionalidad argentina, quien cifró entre 4.000 y 12.000 los presos sometidos a este tipo de castigo, aunque recordó que son números que «nadie puede confirmar».
En el caso concreto de Colorado, dijo que quiere ver ese centro penitenciario para hablar con algunos de los presos que están en régimen de aislamiento y saber «cuántos son y por qué», y si reciben atención médica, entre otras garantías mínimas.
El relator especial aseguró que en caso de obtener los permisos quiere ver «todos los aspectos del sistema de prisiones», incluido el impacto de las medidas aprobadas recientemente en California para afrontar el problema de la superpoblación de sus cárceles.
El Tribunal Supremo ordenó al estado de California reducir su exceso de población reclusa en cerca de 10.000 personas antes de fin de año para evitar el hacinamiento, lo que podría provocar la puesta en libertad de presos condenados por graves crímenes.
En todo caso, el experto de Naciones Unidas reiteró nuevamente su «especial preocupación» por la huelga de hambre protagonizada en agosto pasado por unos 30.000 presos de California en contra de las condiciones del régimen de aislamiento.
Méndez recordó también que hace varios años que pide visitar la cárcel de la base naval en Guantánamo (Cuba) y añadió que, aunque obtuvo autorización del Pentágono, fue con una serie de condiciones que le impidieron aceptar la invitación.
«Me propusieron un tour guiado y sin permiso para hablar con los presos, así que no pude aceptar», dijo el relator, quien añadió que ha reiterado su petición tanto al Pentágono como al Departamento de Estado para ir a Guantánamo.
El relator de la ONU afirmó en 2011 que el aislamiento prolongado en una celda durante más de 15 días constituye una tortura porque los trastornos físicos, emocionales y mentales que causa en los presos pueden ser irreversibles.