Unos 15 consultores liberados y miembros del Frente Democrático Nacional de Filipinas (NDFP, por sus siglas en inglés) participarán en una huelga de solidaridad y huelga de hambre a partir de mañana para conscientizar y llamar a la liberación de todos los presos políticos. Se turnarán para unir a los presos políticos en los centros […]
Unos 15 consultores liberados y miembros del Frente Democrático Nacional de Filipinas (NDFP, por sus siglas en inglés) participarán en una huelga de solidaridad y huelga de hambre a partir de mañana para conscientizar y llamar a la liberación de todos los presos políticos.
Se turnarán para unir a los presos políticos en los centros de detención de todo el país, así como a los familiares y simpatizantes de los detenidos que estarán ayunando durante los primeros cuatro días y seguirán una huelga de hambre por otros cuatro días hasta el 10 de diciembre. Se establecerán centros de huelga de hambre en Mendiola, Manila y otras zonas de todo el país con este fin.
La protesta nacional se lanza tras la muerte de un preso político, de un ACV hace cuatro días. Bernabe Ocasla, quien fue encarcelado por 9 años, por falsos cargos de asesinato, figura en la lista de 130 presos políticos enfermos y ancianos, proporcionada por grupos de derechos humanos al Panel de Paz del Gobierno de la República de Filipinas. Este último dijo que les daría prioridad para su liberación. El gobierno, sin embargo, más tarde solo redujo el número a 70 presos.
La respuesta del presidente del Panel de Paz, Silvestre Bello III, a las noticias sobre la muerte de Ocasla, fue a expresar simpatía a su familia y anunciar que el GRP podría reducir aún más el número de presos políticos para la liberación humanitaria a tan sólo 50 y que su plazo autoimpuesto para la las liberaciones finales se pasan de fines de noviembre, para el 10 de diciembre.
El GRP pierde sus propios plazos y mantiene una cantidad variable de detenidos que pretende liberar desde que el presidente electo, Rodrigo Duterte, prometió en primer lugar liberar a los más de 400 presos políticos de la nación en mayo pasado por amnistía general.
A pesar de los numerosos pronunciamientos del GRP, no se ha liberado a ningún prisionero político por el proceso de paz desde que 19 consultores y personal de NDFP fueron liberados bajo fianza en agosto pasado.
En un comunicado, el NDFP subrayó que la liberación de los presos políticos no es sólo una medida de buena voluntad, sino una cuestión de justicia y cumplimiento del Acuerdo General sobre el Respeto de los Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario que ambas partes firmaron en 1998.
Traducido por Pulso. Clic aquí para consultar la nota original.