Refundación Comunista Puerto Rico No es necesario abundar sobre quién es el destacado luchador revolucionario, responsable general del Ejército Popular Boricua -Macheteros- Filiberto Ojeda Ríos. Es suficiente decir que llegó a representar toda la rebeldía que siente nuestro pueblo en contra del sistema que nos mantiene subordinados a los intereses del capitalismo de Estados Unidos. […]
Refundación Comunista
Puerto Rico
No es necesario abundar sobre quién es el destacado luchador revolucionario, responsable general del Ejército Popular Boricua -Macheteros- Filiberto Ojeda Ríos. Es suficiente decir que llegó a representar toda la rebeldía que siente nuestro pueblo en contra del sistema que nos mantiene subordinados a los intereses del capitalismo de Estados Unidos. Esa rebeldía es la que piensa el FBI que puede sofocar asesinando a la persona que lo encarna, y luego lanzarle al país la odiosa y cobarde infamia de que Filiberto se suicidó el día del Grito de Lares, lo que nuestra propia prensa le rechazó como una burda mentira.
Refundación Comunista de Puerto Rico no es ni nunca será una organización adicta a las interpretaciones conspiratorias de los eventos. No obstante, a nadie se le escapa la conclusión de que las autoridades federales en Puerto Rico están ensayando un operativo con el que pretenden imponer el fascita «Patriot Act» como medida de represión a las ebullantes corrientes de liberación, y a la intensificación de las luchas de clases, que auguran el comienzo de una nueva etapa revolucionaria en la colonia.
Indudablemente, se trata de un reto dirigido a todo el país. Se nos quiere recordar que somos un pueblo en el que domina el poderío armado del invasor, en representación de sus intereses de Wall Street. Mas, es un operativo destinado a fracasar. Les saldrá el disparo por la culata. Con su torpe arrogancia, y sus tácticas asesinas, lo único que nos han recordado es que el camino de nuestro progreso y nuestro bienestar es la organización revolucionaria del pueblo, y el más inteligente y audaz plan de lucha popular.
Llamamos al pueblo trabajador puertorriqueño a organizarse políticamente en un partido independiente de los partidos coloniales, y prepararse para las luchas que se avecinan. El asesinato del compañero Filiberto Ojeda Ríos es el primer cañonazo en una guerra en la que nuestro enemigo pretenderá desmantelar las pocas conquistas sociales que hemos ganado en nuestras luchas a través de las décadas. Los partidos coloniales no son otra cosa que los agentes represivos en esta escalada de violencia contra el pueblo.
Ellos han comenzado una guerra que no pueden ganar. Tenemos que estar dispuestos a pagar el precio, pero no queda duda de que la victoria será del pueblo que trabaja.