Serge Sarkisian, quien aspiraba ayer a un nuevo mandato como presidente de Armenia, es oriundo de Nagorno Karabaj, enclave armenio situado en Azerbaiyán y que defendió con las armas antes de entrar en política y llegar a la cima del poder de la exrepública soviética. Sarkisian llegó a la presidencia del país del Cáucaso Sur […]
Serge Sarkisian, quien aspiraba ayer a un nuevo mandato como presidente de Armenia, es oriundo de Nagorno Karabaj, enclave armenio situado en Azerbaiyán y que defendió con las armas antes de entrar en política y llegar a la cima del poder de la exrepública soviética.
Sarkisian llegó a la presidencia del país del Cáucaso Sur en 2008 en el marco de unas elecciones controvertidas y marcadas por sangrientos enfrentamientos. Enfrentado a una importante contestación popular, Sarkisian logró calmar la situación apelando a la oposición un marco de colaboración y autorizando a partir de 2011 las manifestaciones, que desde entonces pierden vigor.
Paralelamente, indultó a decenas de opositores condenados por atentados al orden público tras las manifestaciones convocadas para denunciar su victoria en 2008 y que se saldaron con una decena de muertos.
En mayo del año pasado, Sarkisian reforzó su posición tras una victoria aplastante en las legislativas de su Partido Republicano, que logró 69 de los 131 escaños del Parlamento.
Otrora jefe de las fuerzas armadas de su región natal, el presidente se ha mostrado dispuesto a volver a combatir de nuevo contra Azerbaiyán si fuera necesario para defender a la población armenia de Nagorno Karabaj, aunque insiste ante todo en privilegiar las negociaciones con Bakú para intentar alcanzar una solución política.
Nacido en Stepanakert, capital de Nagorno Karabaj -un enclave de mayoría armenia en la ex república soviética de Azerbaiyán- se integró en la guerra que estalló en los años ochenta. Fue encumbrado a la jefatura de las fuerzas armadas, lo que le valió el apelativo de «halcón» en las relaciones con Azerbaiyán.
Nagorno-Karabaj se autoproclamó independiente en 1991, en el marco de un conflicto que dejó más de 30.000 muertos.
Fue durante la guerra, suspendida por un alto el fuego en 1994, cuando Sarkisian hizo piña con Robert Kotcharian, también un dirigente de las milicias armenias y futuro presidente.
La ascensión de Sarkisian comenzó en 1993, cuando Levon Ter-Petrosian, entonces presidente, le nombró ministro de Defensa. Irónicamente, Ter-Petrosian será derrotado por Sarkisian en las presidenciales de 2008.
Mientras tanto, Sarkisian prosiguió con su ascensión a las más altas cotas de poder ocupando puestos clave en el Gobierno armenio, incluido el de ministro de Interior.
En 2000, asume las riendas del Ministerio de Defensa y en 2007, a la muerte del primer ministro Andranik Markarian, le sucede en el cargo.
Poco después, su antiguo camarada de lucha Robert Kotcharian, convertido en presidente, designará a Sarkisian como su delfín y la población armenia avalará esa decisión al votar mayoritariamente por él en las presidenciales de hace cinco años.
Un lustro después, las encuestas le auguraban un 69% de votos. Las tres principales formaciones de oposición, Armenia Próspera, Congreso Nacional Armenio (del Ter-Petrosian y la Federación Revolucionaria Armenia (Dachnaktsutun) boicoteaban los comicios.
Un pequeño país bloqueado económicamente
Armenia sufre desde hace 20 años un bloqueo económico impuesto por sus potentes vecinos, Azerbaiyán y Turquía, en torno al conflicto de Nagorno-Karabaj.
Periódicamente tienen lugar enfrentamientos armados entre los soldados armenios y azeríes en torno a la disputa por el enclave. Turquía, aliado tradicional de Bakú, cerró su frontera con Armenia en 1993 después de que Erevan tomara el control de Nagorno-Karabaj.
Turquía y Armenia siguen divididos por la cuestión del genocidio armenio en el imperio otomano, que dejó cientos de miles de muertos.
En este contexto, Georgia es la única puerta al mundo para Armenia y más del 90% de sus exportaciones transitan por territorio del país vecino, preferentemente hacia Rusia, aliado estratégico para Erevan.
Transportadas en camiones por las montañas, los productos armenios dependen de las condiciones meteorológicas, sobre todo en invierno.
Armenia, que no es precisamente rica en recursos naturales, está intentando diversificar su economía reforzando sus lazos con Irán, su vecino del sur. A Teherán le interesa igualmente superar el aislamiento internacional.
Fuente original: http://gara.naiz.info/paperezkoa/20130219/388677/es/Sarkisian-maquis-Nagorno-Karabaj-presidencia-Armenia