Martín, integrante de Alavío, nos recibió en La Toma de Lomas de Zamora, donde también participa desde hace tiempo en actividades culturales y educativas, siempre desde una perspectiva popular. Mientras un grupo de mujeres discutían allí sobre cuestiones de su barrio, Martín nos contó la historia del grupo de video, pasando por las distintas experiencias […]
Martín, integrante de Alavío, nos recibió en La Toma de Lomas de Zamora, donde también participa desde hace tiempo en actividades culturales y educativas, siempre desde una perspectiva popular. Mientras un grupo de mujeres discutían allí sobre cuestiones de su barrio, Martín nos contó la historia del grupo de video, pasando por las distintas experiencias de televisión alternativa en el mundo y contando de qué se trata este proyecto. También dejó entrever las distintas discusiones que se vienen dando dentro de los medios alternativos de comunicación.
ANRed: ¿Qué es ÁgoraTV?
Martín: Es un proyecto que nació hace mucho tiempo, de armar un medio masivo de comunicación… Y bueno, como nosotros trabajamos con el medio audiovisual, pensamos en una televisión alternativa, además porque para nosotros la televisión es el medio más masivo. Y lo quisimos hacer con organizaciones, en especial con empresas recuperadas, en conjunto con organizaciones políticas, sociales, gremiales, como algo más amplio. Y pensando en los intereses también de los trabajadores. Una idea que es parte de la identidad del grupo, es dar la batalla al imaginario que viene de arriba, no? Que está todo el tiempo, en todos lados, desde un programa hasta la publicidad de lo que sea. Intentar construir este nuevo imaginario donde los trabajadores puedan tomar la palabra, contar sus ideas, sus luchas y también meter en la agenda de debate temas que sean propios. Verlos reflejados, y empezar a elaborar cosas en torno a esos temas y no a los que vienen de arriba, que no son en definitiva los que los moviliza. Básicamente es eso, un medio masivo en manos de los trabajadores.
¿Cómo surge Ágora, cuál es su origen?
La experiencia de Ágora viene de una tradición larga, de la idea de una radio o televisión clandestina, de una televisión por fuera de lo que es un espacio en el cable, o un espacio en un lugar público como canal 7. Y viene de otras experiencias en las que también participamos como grupo, en otra época, de lo que fue Utopía a mediados de los 90. Y desde entonces hasta ahora con experiencias muy chiquitas de trasmisiones de televisión, en los barrios que por ahí duraban un día o unas horas y para algo muy específico, no siendo un canal propiamente dicho. El contexto del cual fue parte Utopía es distinto al de Ágora hoy, que por lo que contaban los que participaron era una experiencia de militantes. Dedicaban muchas horas y mucho esfuerzo a poner en funcionamiento el canal. Ahora es un contexto diferente, hay mas movilización, mayor organización, y si bien hay un aporte de la militancia hoy se puede combinar con todo esto que se está dando, con las corrientes internas de los sindicatos o las empresas recuperadas o movimientos de desocupados, como para apuntar a algo mas grande. O también experiencias barriales de televisión de baja potencia, y bueno ir por un poco más pensando en ese sostén político que se puede llegar a lograr. Una de las posibilidades era trabajarlo dentro de esos espacios. Pero más allá del lugar la idea es que sea sostenido por varias organizaciones.
¿Y hasta ahora qué se hizo?
El objetivo es el canal de baja potencia, un equipo de producción que elabore los materiales, un equipo de trabajo que no es fácil de conseguir, pero tampoco inalcanzable. Lo empezamos a desarrollar haciendo trasmisiones de prueba, yendo a hablar con las organizaciones donde podía existir apoyo. Después hubo una segunda etapa de armado de los talleres de formación donde poder sumar al trabajo, no gente que supiera de cine, sino acompañar a los que ya estén insertos en alguna lucha, porque nos parece mejor tener saldada la cuestión ideológica y después aprender el oficio que se va resolviendo con la práctica. Hay un montón de gente que se dedica a esto y no está tan formado profesionalmente. Como cosa fundamental pensamos en sumar gente al proyecto, llegar a poner una canal de televisión en el aire, así sea en fracciones horarias de 3 o 4 horas por día. En diciembre del 2005 hicimos unas trasmisiones de prueba en el Bauen para probar los equipos y ver qué alcance se puede tener. Lo que hicimos fue probar con un trasmisor más chiquito para ver hasta dónde llegaba la señal y mostrarlo funcionando a las organizaciones. El arreglo fue hacer el canal en el Bauen, pero ahora está trabado.
¿Y hoy qué se está haciendo?
Cuando se fue frenando el proyecto del canal uno de los puntos que teníamos anotado para instalar el tema era trabajar por Internet, entonces surgió la idea de armar una página donde subir las programaciones y empezamos a armar lo que hoy es www.agoratv.org, que era algo complementario del proyecto pero está teniendo más repercusión de la que esperábamos.
¿Igual la idea es seguir insistiendo para que salga el canal?
Sí, el tema de la página es un medio. Por más que en estos últimos tres años tuvo acceso mucha mas gente a Internet, la banda ancha es muy exclusiva, todavía no es muy popular y tampoco sé si lo va a ser, entonces lo del canal supera eso porque cualquiera puede tener acceso a un televisor. El objetivo es llegar a eso, armar una primera experiencia que se estuvo trabajando mucho en otras partes del país y que pudimos visitar. También plantear el tema de armar corresponsalías del canal, o equipos de producción en distintas regiones que puedan producir material propio para mandar a donde se centre el canal y que entonces esta primera experiencia sea un punto de partida, que esto se reproduzca a otras regiones.
¿Quiénes son hoy los que están llevando adelante Ágora?
Se sumaron compañeros del Bauen, Chilavert, del FOL, docentes de La Matanza y de Ezeiza, de ATENTO (Telefónicos), gente de empresas recuperadas, del Movimiento Intersindical Clasista, desocupados, universitarios, etc., aparte el apoyo que fue votado en algunas asambleas como en Zanón, plenario del MIC, y en otras fábricas. Por otro lado, a la página también está llegando apoyo de organizaciones de otros países, que es importante para darnos a conocer y que sea un proyecto autogestionado. Que vaya generando por sí mismo recursos, trabajo para sostenerse.
¿Cómo van a financiar el proyecto?
Pensamos que el canal brinde algún servicio, por ejemplo producir un institucional de la maderera de Almagro o la imprenta Chilavert y que den a conocer su producto por el canal y que se dé un intercambio. La circulación del material sobre todo al exterior puede generar un ingreso.
¿Con los subsidios no están de acuerdo?
No como forma institucional. Si se produce algún tipo de intercambio, que sea por afinidad, que compañeros quieran o puedan aportar, u organizaciones que puedan bancar algún canal de cable en EEUU, canales dependientes del Estado en Venezuela o Francia que por ahí tienen la posibilidad de adquirir el material y aportar algo. Con campañas financieras dentro de las mismas organizaciones, sectores de trabajo y de la comunidad. Siempre eso va a tener que ver con la llegada que tenga el canal. Y que los propios compañeros, la gente del propio barrio, vaya entendiendo y diciendo «voy a aportar a esto, porque esto me sirve». Después de eso, miles de ideas que se nos puedan ocurrir y no tengan que ver con transformar ni el espacio ni lo que uno produce en una mercancía. El canal Utopía se sostenía con mucho aporte personal de los compañeros que sostenían la experiencia casi full time y el aporte de los vecinos que por ahí lo hacían llegar a través de alguna alcancía puesta en algún negocio o por alguna publicidad de los negocios. Pero en esa experiencia no hubo aportes de organizaciones políticas. En este contexto es diferente. En Chile por ejemplo, hay un canal en un barrio que se llama La Victoria, donde además de los aportes personales, fabrican antenas y con eso financian parte del trabajo. También dejan alcancías o buzones en algunos lugares en el barrio. En Venezuela conocimos televisoras que nacieron comunitarias pero que hoy reciben un subsidio fuerte del Estado. En el intento de bajar a Chávez en el 2002, se le dio mucha trascendencia al rol que tuvieron las emisoras, las radios, las tv comunitarias y hoy reciben un apoyo grande.
De ahora en más ¿Cómo sigue Ágora?
La idea hoy es que se puedan seguir acercando compañeros a aprender todo lo que es el oficio y la producción. Seguir instalando el tema, no solo de Ágora, sino de construir medios propios, que permita a los trabajadores romper con esa hegemonía por acumulación de medios en poquitas empresas y que manejan también todo un discurso. Para romper con eso hay que crear algo nuevo y que tenga este sentido de combatirlo, no solo contra el discurso sino contra las formas. La televisión te manda un mensaje todo el tiempo fragmentado, pasa de una cosa a otra y a otra y a otra sin dejar mucho lugar para alguna reflexión o alguna apreciación de ideas, de lo limitado del discurso o lo manipulado que pueda ser. La idea es también pensar qué es un canal público, qué es un medio público, qué sentido se le puede dar a un medio masivo. Romper con esa idea emisor-receptor como única posibilidad que te da la televisión, cosa que muchas veces también te la enseñan en la escuela, la televisora te manda y uno recibe y ya está, sino que haya siempre un ida y vuelta. Que la TV instale otros temas, no solo para el debate, sino frente a la necesidad. Poder salir a convocar o a dar respuesta de manera inmediata y masiva.
Este miércoles sale a la luz ÁgoraTV, con películas sobre experiencias alternativas e invitados de otros medios alternativos para debatir cómo construir medios propios de los trabajadores. Por supuesto que ANRed no va a estar ausente. También van a montar en vivo la página y mostrar cómo funciona. «Va a ser la primera actividad pública del canal, que ya es una cosa abierta».
La transmisión se puede disfrutar ya en agoratv. Por ahora cuenta con los videos (entre otros): Recital de Rafael Amor y Gabriel Sequiera por la libertad de los 5 presos cubanos en EEUU Presentación de Bakunin, crítica y acción (entrevista a Frank Mintz). Hijos del pueblo, nuevo periódico de Red Libertaria
Grupo Alavío Video y acción directa [email protected] agoratv