Traducido para Rebelión y Tlaxcala por Gorka Larrabeiti
Del frente afgano llegan a Internet decenas de grabaciones, realizadas por reporteros de guerra o rodadas por los propios soldados. Grabaciones que muestran el verdadero rostro de la guerra, el mismo que hemos conocido a través de las películas sobre Vietnam: el odio por el enemigo al que hay que exterminar, el desprecio por los civiles, la macabra ironía guerrera, el estruendo de las batallas, el miedo de los soldados que gritan e imprecan, los aviones supersónicos que bombardean a saco los pueblos, el humo negro de los incendios, las trincheras y los sacos de arena, los bazookas y las granadas. Ésta es la guerra en Afganistán. Una guerra que aún hay quien sigue llamando «misión de paz».
Como en Vietnam. La «banda sonora» rock’n’roll de la guerra de Vietnam tiene su equivalente en la música rap y metal que hoy escuchan los jóvenes soldados que combaten en Afganistán: música que, curiosamente se utiliza como fondo en algunos de estos vídeos colgados en la red. Uno de éstos, con música de Eminem de fondo, enseña otro paralelismo con el Vietnam: igual que entonces se usaba el nombre en clave «Charlie» para referirse al enemigo, el vietcong, hoy en Afganistán se usa «Terry» (quizá de «terrorista») para referirse al enemigo talibán. A Terry le dedican la rima que abre el vídeo, escrita por los soldados del «3 Para», tercer regimiento de paracaidistas del ejército británico, que el verano pasado combatió una sangrienta batalla en Sangin, en la provincia meridional de Helmand. «Estate atento, Terry, te vamos a dar caza, no hay escondite para ti en Sangin. Te vas a cagar cuando te disparemos con calibre 50: escapar te servirá sólo para morir cansado. Los A-10 están listos para forrarte de plomo. Qué coño nos importa que no tengas ni agua ni comida. Tiembla Terry: los paracas han llegado y ahora atacaremos la ciudad».
Parecen escenas de la película «Hamburguer Hill»; otros vídeos como éste y éste, que recogen furiosos combates durante el largo asedio que los talibanes han tendido alrededor del fuerte de los paracaidistas británicos en Sangin. Sólo la intervención de la aviación llegará a quebrar el sitio talibán: en esta grabación las descompuestas carcajadas de soldados que, desde una trinchera asisten a un bombardeo aéreo («¡A joderse! ¡Chúpate esa! ¡Magnífico!», y suma y sigue).
Vikingos. En esta otra grabación, tropas ISAF danesas, «los vikingos» de ISAF, sospechan que en la aldea de Dahaneh, distrito de Now Zad, provincia de Helmand, se esconden talibanes. Rodean la aldea y hacen saltar con dinamita un muro de protección para irrumpir en las casas. En ese momento, alguien dentro abre fuego. Las tropas danesas responden desencadenando sobre la aldea una lluvia de fuego que cesa sólo al oscurecer. Durante la noche, del núcleo de casas acribillado no se reciben señales de vida. Pero los daneses, para mayor seguridad, antes del alba solicitan un bombardeo aéreo sobre la aldea. Tras la incursión -según lo contado por el periodista danés que ha realizado el vídeo- los soldados no se dignan ni siquiera a efectuar la inspección de rutina para comprobar los efectos de la acción.
Vale la pena subrayar un detalle emblemático: el ametrallador que dispara en dirección de la aldea lleva en el brazo el distintivo verde de la misión «de paz» ISAF, la misma que llevan en el uniforme los soldados italianos. Nuestros soldados,, aun sin disparar contra los afganos, forman parte de una misión de guerra.
En este otro vídeo, tropas ISAF danesas irrumpen en otra aldea, esta vez en la provincia central de Uruzgan: derriban puertas y hacen irrupción en las casas, donde encuentran sólo mujeres asustadas. Buscan material para la fabricación de bombas artesanales, pero no encuentran «nada relevante». Nada más irse, su columna cae en una emboscada de los talibanes, a la que sucede una furiosa batalla, en la que algunos soldados daneses resultan gravemente heridos.
El pasado verano, la aldea de Musa Qala, en la provincia meridional de Helmand, fue escenario de una de las más feroces batallas entre talibanes y fuerzas ISAF británicas y danesas apoyadas por la aviación de EE.UU. En los combates, que duraron semanas, murieron muchos soldados OTAN y decenas de talibanes. Sin embargo, muchos más fueron los civiles que murieron bajo las bombas que soltaban los B-1 y los A-10 estadounidenses, que redujeron a escombros las casas de Musa Qala. Aviones que se ven pasar zumbando en este vídeo rodado por soldados daneses del 7º y 9º regimiento de paracaidistas destinado en Musa Qala. Las violentas imágenes de guerra van acompañadas de la tétrica música death metal de un grupo alemán.
A la batalla de Musa Qala se refiere también este vídeo, también rodado por soldados daneses: aquí la música que se oye por debajo de las explosiones y las ráfagas de metralleta es la canción «The Unforgiven» de Metallica.
Diablos rojos. Volvemos a Sangin, provincia de Helmand. Aquí, el pasado verano estaban ocupadas también las tropas canadienses. En esta grabación del 13 de julio, los soldados de la Compañía Alpha, 2º pelotón de los «Diablos Rojos» de Edmonton, atacan con las primeras luces del alba una aldea Hyderabad, en la zona de Sangin. Dos días después, el 15 de julio, están allí de regreso para rastrear la zona de batalla y, como se puede ver en este otro vídeo, caen en una emboscada de los talibanes. Sólo pocos días antes, el 8 y 9 de julio, los mismos soldados canadienses de la misma Compañía Alpha estaban ocupados en otro frente muy caliente: el de Panjway, a unas decenas de kilómetros al oeste de Kandahar. A los violentos combates de esos días hace referencia este vídeo, acompañado de las notas de una canción de Audioslave que dice: «No sé decirte por qué la gente enloquece», y también esta otra grabación.
Royal Marines. Este vídeo se grabó en Now Zad (Helmand el pasado octubre durante una batalla entre talibanes y soldados británicos de la Compañía K del 42º comando de los marines, utilizados en la operación «Silica», cuya función era salvar la Compañía A del 2º batallón de fusileros rodeada desde hacía días por los talibanes.
Los Royal Marines son protagonistas también de este otro vídeo, en el que se recogen una batalla encarnizada entablada con los talibanes en el área de Grishk, siempre en la provincia de Helmand.
Violencia pura. En este vídeo (visible sólo previa inscripción a YouTube) se ve a soldados de EE.UU y a militares afganos que, tras haber inspeccionado una casa de civiles en busca de armas -sin haber encontrado nada- «interrogan» al dueño de la casa sometiéndolo a una salvaje paliza de grupo.
Fuente: http://www.peacereporter.net/dettaglio_articolo.php?idc=&idart=7306
Gorka Larrabeiti es miembro de los colectivos de Rebelión y Tlaxcala (www.tlaxcala.es), la red de traductores por la diversidad lingüística. Esta traducción es copyleft.