
El derecho al aborto como reparación histórica hacia las mujeres
El derecho al aborto como reparación histórica hacia las mujeres
Claves para pensar el repoblamiento del país con producción y arraigo. El impacto del ferrocidio y la sojización. La necesidad de revertir el hacinamiento en grandes ciudades y pensar otras ruralidades.
En 1998 Carlos Saúl Menem decretó el 25 de marzo como el “Día del niño por nacer”. Incluso intentó sacar las excepciones legales que permiten desde 1921 la interrupción del embarazo. La sanción de la nueva ley no sólo significa el fin de la cruzada antiabortista. También es el símbolo de un cambio cultural en el que los residuos del menemismo ya no tienen espacio a pesar de que muchos políticos actuales como Daniel Scioli lo añoran en silencio. En PostPeriodismo repasamos esa década para que no pasen nuevamente sus versiones remixadas.
La Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi) presenta su informe anual.
Como solían decir las abuelas, en muestra de su sabiduría: “Las desgracias nunca vienen solas”. Economía y pandemia vinieron tomadas de la mano. Eso pasó en el mundo y mucho más en la Argentina, que venía de cuatro años de pandemia macrista: la economía destruida, con salarios depreciados y trabajo hundido, la esperanza deshecha y la deuda impagable.
Las usinas de fake-news y la oposición macrista al gobierno de Alberto Fernández insinúan que las relaciones entre Pfizer y el gobierno argentino no son transparentes, que hay sospechas de corrupción. No hay pruebas pero no importa, igual el tema queda instalado.
Cuando el 31 de diciembre den las doce de la noche habrá concluido uno de los peores años en términos económicos y sociales.
La interrupción involuntaria del embarazo fue aprobada con 38 votos a favor, 29 en contra y una abstención