Como muchos uruguayos, soy un redotáo, un exilado. Vivo en Brasil, en Porto Alegre. Durante el V Foro Social Mundial, hice produccion para los compañeros de Recosur, sin realizar cualquier nota para publicacion. Participé, observé, consegui algunas fotos, alguna grabacion. Como muchos uruguayos en el exterior, me ligo a algun site de orientales, amigos, en […]
Como muchos uruguayos, soy un redotáo, un exilado. Vivo en Brasil, en Porto Alegre. Durante el V Foro Social Mundial, hice produccion para los compañeros de Recosur, sin realizar cualquier nota para publicacion. Participé, observé, consegui algunas fotos, alguna grabacion. Como muchos uruguayos en el exterior, me ligo a algun site de orientales, amigos, en la égira. Uno de ellos, (el Compañero Ovni, desde Austrália) de un site muy querido, mi más querido site, me pregunta sobre el chaleco a prueba de balas de Lula. Parece que no cree en la noticia leida por ahí. Me pide confirmacion de ese hecho. Lamentablemente, al corroborar la informacion que tenia, le doy otras y tejo algun paralelo.
Si, Ovni, si. Lula, lamentablemente, usó un chaleco a prueba de balas. Tristemente celebre, pues notado por debajo de su fina ropa, del mejor lino, que usaba. Creo que en eso, nomas, se parecia al Comandante Chávez. Hugo lució un chaleco también. Pero, en su caso, los yankis lo quieren coser a balas o metralla, corre riesgo. Ya, Lula, nada teme de sus neo-amigos!. A no ser que quisiera librarse de algún prosaico huevo duro de los que esperaba que le fuese arremesado por algun popular… cosa que no aconteció.
Los abucheos si existieron. Muchos… y con silbatina… pero eso ya no es novedad para él, hace tiempo, que los abucheos vienen creciendo. Para ver la diferencia, abajo de la costosa ropa de Lula, habia un chaleco blindado. No sé la marca del chaleco del Comandante Chavez, pero, ese si tenia motivos para usarlo. Y, por ser diferente de Lula, usaba por arriba del chaleco, una simple camisa colorada roja rojísima, del mismo tono de la camiseta que era ensanguichada entre chaleco y camisa. Nada más… ni precisaba. Los que esperaban horas para ver al Comandante Chavez en el acto del Gigantinho, desde las dos de la tarde, al rayo del sol, no se uniformizaban.
Tampoco hubo en el acto de Chavez la consagrada maniobra petista en el acto de Lula de llenar los espacios con sus huestes, para despues dejar entrar los populares. Rojas, eso sí, rojísimas, eran las camisetas que lucian los miembros de la tropa de choque, la elite patovicana, las S.A. petistas que usaron de despliegues geniales de orden unida, marcha disciplinada, coreando consignas al ilustre tribuno elevado al mayor grado de senatorial consulato magistral: LVLA PRIMVS PRAESIDENTVM.
Y, como su mejor y unica arma gobernamental es la publicidad, -de hecho, lo que mejor funciona de ese gobierno de pura propaganda y retórica – esgrimida con cruel eficiencia goebbeliana, nada mejor que lo consumado: defender lo indefensable, al poner una consigna ridícula como la lucida en las camisetas… el cruel dístico LULA 100%. Sabemos todos que quien hace bien las cosas no precisa publicidad mejor que el hecho consumado.
Ya, para llamar la atencion de incautos, nada mejor que dorarles la píldora. El Movimiento de los Sin Tierra y la Via Campesina, por otro lado, hicieron alarde de su simplicidad aliada al buen gusto, utilidad y participacion ciudadana, entregó a los casi dos mil personas -de un grupo selecto de personas que despues de un gran esfuerzo de la seguridad se hizo de credenciales para participar del acto en campo abierto, en un asentamiento de tierras en la laguna del junco, a orillas de la laguna de los patos- un prosaico sombrero de paja, de aquellos, simples,que los campesinos usan para protejerse de las inclemencias solares.
No lucian nada, ninguna inscripcion, ninguna propaganda, ninguna cinta roja, o verde… eran solamente color paja levemente amarillenta. Tengo dos de ellos. Cambié el uso de un panamá previsor que llevaba por uno de esos. Todos iguales. Y, ya que estamos, te cuento otra ignomínia.Esta fue presenciada por muchos compañeros que hicieron la cobertura periodistica de la Marcha de Abertura del Foro. Al pasar la claque ululante de rojísimos camisetistas al 100% transportadas y pagadas, se vio desfilar junto al tristemente celebre y dudoso presidente nacional del PT, José Genoino, luciendo su sonrisa entre servil y cinica. No vi si usaba chaleco a prueba de balas. Pero sí noté que cobardemente cargaba en sus brazos a un inocente niño, escudo humano.
Triste, muy triste. A los poquisimos dias, despues, se realizó una desfiliacion en masa de antiguos cuadros del PT, pensadores/pensativos, fundadores desfraudados, lideranzas traicionadas. Izquierdistas. Lamento, Ovni, lamento esas verdades. Recibí vos, la compa Nubia y todos los fogoneros orientales mi abraçzo. Triste abrazço, acongojado, pero fraternalmente presente entre compañeros.