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¿Fue Serbia un ensayo para Iraq?

La destrucción de Milosevic

Fuentes: CounterPunch

Traducido del inglés al castellano por Germán Leyens, miembro del colectivo de traductores de Rebelión y asimismo de Tlaxcala, la red de traductores por la diversidad lingüística (www.tlaxcala.es). Esta traducción es copyleft.

El 11de marzo, el antiguo líder serbio y presidente de Yugoslavia, Slobodan Milosevic, falleció en su celda en la prisión en La Haya, donde había sido procesado durante cuatro años y un mes por crímenes de guerra y genocidio. El líder del Partido Socialista Serbio, Zoran Andelkovic reaccionó ante la noticia de la muerte de Milosevic con la siguiente declaración:

«Slobodan Milosevic, presidente del Partido Socialista de Serbia y ex presidente de Serbia y Yugoslavia fue asesinado hoy en el Tribunal en La Haya. La decisión del Tribunal de denegar el tratamiento médico de Milosevic en el Instituto Bakunin en Moscú representa una prescripción de sentencia de muerte contra Milosevic. La verdad y la justicia estaban de su parte y por eso han utilizado una estrategia de asesinato gradual de Slobodan Milsosevic. La responsabilidad por su muerte recae evidentemente sobre el Tribunal de La Haya.
¿Una acusación partidista o la verdad? Se sabía que Milosevic estaba seriamente enfermo. El gobierno ruso prometió devolver a Milosevic al Tribunal después del tratamiento. El Tribunal se negó. Es fácil concluir que el caso contra Milosevic se había derrumbado y que, embarazados, el gobierno de USA, las autoridades de la OTAN, y el Tribunal de La Haya hayan decidido dejarlo morir en su celda en lugar de admitir que no se podía probar su culpa incluso después de un juicio de cuatro años y un mes de duración.
Milosevic se vio involucrado en el destrozo de Yugoslavia posterior a la era soviética. Fuerzas nacionalistas despedazaron la federación yugoslava. Durante 1991-92 Croacia, Eslovenia, Macedonia y Bosnia-Herzegovina se separaron de Yugoslavia. Grandes minorías serbias en Croacia y en Bosnia objetaron, y reclamaron el mismo derecho de autodeterminación para permanecer en la federación que los croatas y musulmanes reivindicaban para abandonarla. Los serbios croatas y bosnios se organizaron y comenzó una guerra contra la secesión.
Difícilmente podía Milosevic seguir siendo un líder serbio y no apoyar a los serbios. Abraham Lincoln fue canonizado por invadir el Sur e impedir su secesión, pero Milosevic fue condenado por tratar de proteger la integridad territorial de Yugoslavia. Al final, Milosevic aceptó la secesión. En 1995 Milosevic negoció el Acuerdo de Dayton que terminó la guerra en Bosnia. Según Wikipedia, «En Occidente reconocieron que Milosevic fue uno de los pilares de la paz en los países balcánicos.»
En 1998, Milosevic se vio enfrentado por un problema más severo. Acciones armadas del separatista Ejército de Liberación de Kosovo, incluido en la lista de organizaciones terroristas por el Departamento de Estado de USA, en la antigua provincia serbia de Kosovo estallaron en guerra abierta. Milosevic ahora trataba de conservar una provincia no de Yugoslavia sino de la propia Serbia, una provincia que había sido colonizada por albanos étnicos. La población serbia de Kosovo se veía superada en número de nueve a uno y sufrió considerablemente a manos del ELK.
Milosevic, dañado por las guerras de secesión que destruyeron Yugoslavia, perdió la campaña mediática realizada por firmas de relaciones públicas contratadas por las facciones en conflicto que amañaban las noticias recibidas por los usamericanos. Satanizaron a Milosevic, y la administración Clinton hizo que Serbia fuera bombardeada durante 78 días por fuerzas de la OTAN en la primavera de 1999. Numerosos civiles serbios fueron muertos por los ataques aéreos que alcanzaron a trenes de pasajeros y destruyeron la embajada china. En efecto, USA intervino en los asuntos serbios a favor de la secesión, con el resultado de que Kosovo fue esencialmente limpiado étnicamente de serbios. Kosovo sigue siendo considerado en apariencia como parte de Serbia, pero es administrado por Naciones Unidas. De alguna manera, esto ha sido presentado como una gran victoria moral para la humanidad.
Si la masiva campaña de propaganda contra Milosevic hubiera sido respaldada por muchos hechos, habría sido condenado en La Haya. ¿De qué trata todo el episodio?
Creo que se trataba de establecer un precedente, a ser empleado posteriormente en Medio Oriente, de que el gobierno de USA podía satanizar a un jefe de estado geográficamente distante de toda «esfera de influencia» legítima y utilizar la fuerza militar para derrocarlo. Es precisamente la suerte de Sadam Husein, y el régimen de Bush sigue esperando que pueda repetir la estrategia en Irán y Siria.
La pregunta que no ha sido respondida es por qué la «comunidad internacional» lo secunda. Los numerosos civiles asesinados por las intervenciones de USA están tan muertos como los asesinados por los jefes de estado que tratan de conservar sus países. ¿Por qué estos últimos constituyen crímenes de guerra y no los primeros?
Como candidato presidencial, George W. Bush criticó la intervención del presidente Clinton en Serbia y renegó del papel de policía internacional de USA. Pero en cuanto Bush llegó al poder, conspiró para invadir Iraq. ¿Por qué?
Los usamericanos deberían sentirse muy preocupados porque Bush todavía no ha aclarado por qué invadió Iraq. Los usamericanos deberían sentirse muy afectados porque a pesar de los desastrosos resultados en Iraq, Bush insiste en imponer un «cambio de régimen»· en Irán y Siria.
Paul Craig Roberts fue Secretario Adjunto del Tesoro en la administración Reagan. Fue Editor Asociado de la página editorial del Wall Street Journal y Editor Colaborador de National Review. Es coautor de «The Tyranny of Good Intentions». Para contactos: [email protected]
http://www.counterpunch.org/roberts03132006.html