El pasado 17 de septiembre concluyó el Foro Internacional de los Pueblos (FIP) contra el FMI y el Banco Mundial, que fue convocado en Batam del 15 al 17 de Septiembre. Más de 500 indonesios y alrededor de 200 personas de 25 países representando al menos a 100 organizaciones participaron del mismo. El FPI, como […]
El pasado 17 de septiembre concluyó el Foro Internacional de los Pueblos (FIP) contra el FMI y el Banco Mundial, que fue convocado en Batam del 15 al 17 de Septiembre. Más de 500 indonesios y alrededor de 200 personas de 25 países representando al menos a 100 organizaciones participaron del mismo.
El FPI, como otros foros similares ha demostrado exitosamente al mundo que muchas y variadas organizaciones de la sociedad civil y movimientos sociales pueden reunirse en paz y unidad, y sostener debates significativos, profundos e informados sobre las políticas y prácticas de las Instituciones Financieras Internacionales (IFIs).
A pesar de los muchos obstáculos sufridos por los convocantes y participantes del FIP para organizar y viajar al Foro, nos reunimos en un espíritu de solidaridad y cooperación para compartir información y desarrollar estrategias sobre aspectos críticos que viven las comunidades y pueblos afectados por las operaciones del Banco Mundial y el FMI.
Encontramos al Banco Mundial y al FMI responsables de políticas y acciones que llevan a la intensificación de la pobreza y las privaciones, la violación de los derechos humanos, el recorte de libertades políticas y sociales básicas, el debilitamiento de las soberanías nacionales y la gobernancia democrática, y la subversión del derecho al desarrollo.
Instamos a prestar atención a los numerosos obstáculos que encontramos en la preparación del Foro, que, entre otras cosas, nos obligaron a cancelar las actividades en la vía pública y fueron la causa de que por lo menos 100 representantes internacionales tuvieran que suspender su participación. Nuestros informes indican que al menos a 54 individuos de 17 organizaciones les fue prohibida la entrada a Singapur, o fueron detenidos en el aeropuerto de Singapur, sujetos a interrogatorios bajo custodia y desafortunadamente muchos de ellos, deportados. Peor todavía, muchos continúan teniendo problemas al pasar en tránsito por Singapur para viajar a sus casas.Todavía estamos esperando alguna explicación del gobierno de Singapur y/o del Banco Mundial y el FMI del motivo de estos acontecimientos.
Reprochamos al Banco Mundial y al FMI por no cumplir sus promesas de comprometerse respetuosa y abiertamente con las organizaciones de la sociedad civil. La credibilidad de estas promesas ha sido severamente dañada desde que el BM y el FMI se enteraron de las restricciones que el gobierno de Singapur pondría a la libertad de reunión de la sociedad civil durante las Reuniones Anuales. Al resultar obvio que Singapur no permitiría el Foro dentro de sus fronteras, mudamos el FIP a Batam en Indonesia. Nos comprometemos solidariamente con aquellos que luchan para construir una sociedad civil vibrante en países que restringen derechos esenciales tales como la libertad de expresión y apreciamos al gobierno de Indonesia por permitirnos realizar nuestro Foro en Batam.
Respondiendo a la prohibición y maltratos recibidos por nuestros compañeros, lanzamos un boicot al convenio oficial entre el Banco Mundial y el FMI con la sociedad civil durante las Reuniones Anuales. Después que se levantara la prohibición sobre los individuos, reafirmamos el llamado al boicot y definimos como «muy pequeñas y muy tarde» las acciones del gobierno de Singapur. Todas y cada una de las organizaciones participantes, re-examinarán su relación con el Banco Mundial y el FMI y nuestros futuros compromisos con ellos, sin olvidar hacerlos responsables por los impactos negativos de sus operaciones.
Como resultado de nuestros análisis del Banco Mundial y el FMI, y dadas nuestras experiencias de la semana pasada, exigimos lo siguiente:
Primero: Con respecto a las políticas y prácticas del Banco Mundial y el FMI, reafirmamos nuestro Llamado a la Acción Global Contra las IFIs. Recalcamos en particular la necesidad urgente de:
– Anulación del 100% de la Deuda Multilateral;
– Auditorias externas abiertas, transparentes y participativas de las políticas y préstamos de las IFIs;
– Detener la imposición de políticas condicionantes que socavan la soberanía económica y exacerban las crisis de salud y educación;
– No continuar con la privatización de los servicios públicos, y
– Poner fin al involucramiento de las IFIs en proyectos destructivos del medioambiente.
Segundo: Respondiendo a las restricciones impuestas a la iniciativa del FIP:
– Exigimos una explicación de porqué el Banco Mundial y el FMI siguieron con Singapur como sede de sus Reuniones Anuales cuando las restricciones sobre la participación de la sociedad civil se hicieron evidentes con antelación.
– Exigimos una revelación completa de la información pertinente a la participación de la sociedad civil, incluyendo el Memorrándum de Entendimiento entre el Banco Mundial y el gobierno de Singapur y las listas oficiales y extraoficiales de los «individuos prohibidos».
Tercero: Para asegurar la completa transparencia y responsabilidad de las IFIs con los pueblos y comunidades afectados por sus operaciones:
– Hacemos un llamado a todos los gobiernos miembros del Directorio del Banco Mundial y del FMI a hacer responsables a estos organismos por las consecuencias de sus políticas y proyectos sobre los derechos humanos, la igualdad, y la sustentabilidad del desarrollo.