El ex candidato a la Presidencia del Perú y líder del Partido Nacionalista Peruano, Ollanta Humala, denunció este jueves en entrevista con TeleSUR la injerencia política de ciertos sectores del Gobierno de Alan garcía en el Poder Judicial y reiteró las denuncias de muerte en su contra que hizo esta semana. Tras la petición de […]
El ex candidato a la Presidencia del Perú y líder del Partido Nacionalista Peruano, Ollanta Humala, denunció este jueves en entrevista con TeleSUR la injerencia política de ciertos sectores del Gobierno de Alan garcía en el Poder Judicial y reiteró las denuncias de muerte en su contra que hizo esta semana.
Tras la petición de la Fiscalía General de su país de condenarlo a 15 años de cárcel y a la expatriación, Humala aseguró que el Ejecutivo «tiene un problema de credibilidad» y «no representa a la mayoría nacional».
El líder opositor peruano expresó que en los 2 años y medio que lleva en la política ha acumulado dos juicios penales y seis investigaciones fiscales. «No sé si eso es normal, me parece que no lo es. Hasta antes de entrar en política yo no tenía ningún tipo de relación con la justicia», lamentó.
La semana pasada, la Fiscalía peruana pidió 15 años de cárcel y la expatriación de Humala, tras acusarlo de ser el autor intelectual de una rebelión militar contra el Gobierno del derechista ex presidente Alejandro Toledo (2001-2006).
El hecho ocurrió hace tres años, cuando el general retirado Antauro Humala, hermano de Ollanta, decidió tomar junto con otros 160 ex militares una comisaría policial.
El miércoles pasado, los nacionalistas organizaron una movilización en apoyo a su líder por las calles del centro de Lima. En esta concentración, Humala agradeció la solidaridad del pueblo peruano ante la decisión de la Corte y denunció que la postura de la Fiscalía General es una persecución política.
Humala señaló que, en el caso concreto de la toma de la comisaría de Andahuaylas en 2005, empezó como testigo y terminó siendo acusado. Además, en más de un año que ha durado este proceso, aseguró que no se le ha permitido defenderse.
«Me parece que en cualquier sitio del mundo, todo ciudadano tiene el derecho a defenderse, a opinar, a descargar las imputaciones que le han hecho. Y en mi caso no me han permitido hacer eso», explicó.
«Gobierno está a la defensiva»
Humala y rechazó las declaraciones del presidente del Consejo de Ministros, Jorge Del Castillo, quien dijo a la prensa que su denuncia de persecución política era «un show» para librarse de responsabilidades, y consideró que la insistencia del Ejecutivo en acusarlo evidencia la intención de perjudicarlo políticamente.
«Creo que el señor Del Castillo está actuando a la defensiva en la medida que la injerencia política de ciertos sectores del Gobierno en el Poder Judicial se va desenmascarando».
Recordó que muchos analistas políticos del Perú dicen que, «dentro del APRA (Alianza Popular Revolucionaria Americana, Partido Aprista Peruano), el potencial candidato a una elección presidencial probablemente sería el señor Del Castillo».
«Y el señor Del Castillo se lo ha tomado muy a pecho y está tratando de allanar el terreno de la competencia, en este caso tratando de neutralizar a los representantes del proyecto nacionalista en mi país», abundó.
El ex candidato presidencial nacionalista enfatizó que «no se trata de un show» sino que se le han violado sus derechos procesales. «En estos dos años y medio he acumulado todo un rosario de procesos judiciales y eso no es un show», dijo, y llamó a que se investigue quién está presionando al Ministerio Público y al Poder Judicial en el Perú.
Nuevas amenazas de muerte
Ollanta Humala reiteró las denuncias de muerte en su contra que hizo el miércoles pasado, durante la concentración que organizaron fuerzas sociales y políticas del país para expresarle su apoyo.
«He venido sistemáticamente recibiendo llamadas, amenazas de muerte, sobre todo en la época de campaña (presidencial). De allí envainaron estas amenazas. Y ahora en esta etapa en la cual me están empujando a que ingrese a un juicio oral, recibo estas llamadas telefónicas, mensajes de texto y llamadas anónimas», advirtió.
Señaló que es el momento de alertar a la población de lo que pasa y enfatizar que su movimiento no quiere violencia. «No queremos que esta situación política devenga una situación que todos lamentaríamos».
«No creo que sea normal que en cualquier país que se diga democrático, al líder de la oposición lo vayan a tratar de la manera en que se me está tratando, de lo que se trata acá es una lucha de ideas».
Revertir el problema en oportunidad
Sobre el futuro de sus expedientes judiciales, dijo que de las seis investigaciones fiscales que pesan en su contra «en cualquier momento pueden brotar en procesos penales».
Explicó que existen actualmente dos caminos para resolver su caso: «Uno es el tema legal donde hemos formado un equipo de abogados, que están viendo la estrategia».
«El otro camino es el tema político. En este sentido, los nacionalistas, humildemente, estamos logrando revertir un problema en una oportunidad. Y hemos invitado a las diferentes fuerzas de izquierda, a los movimientos sindicales, gremiales, a la sociedad civil, a sumarse en este campaña de que no es un delito pensar diferente».
Humala observó que «la ciudadanía ha venido respondiendo bien en más del 50 por ciento de las regiones del país, el día de ayer (miércoles) ha habido movilizaciones de protesta por este abuso del Poder Judicial, por esta aberración jurídica de no permitirle a un ciudadano poder defenderse».
Gracias a los vecinos amigos
El líder opositor peruano agradeció también la solidaridad recibida por algunos mandatarios latinoamericanos, como los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y de Nicaragua, Daniel Ortega.
Ratificó su agradecimiento «al Comandante Hugo Chávez, por esa muestra de solidaridad,.al Comandante Daniel Ortega, mi agradecimiento al PT (Partido de los Trabajadores) de Brasil y al presidente Lula. Mi agradecimiento a las diferentes organizaciones como la fundación Daniel Mitterand que nos ha hecho llegar también su muestra de solidaridad».
Enfatizó además que estas muestras de solidaridad no constituyen en ningún caso una injerencia en los asuntos internos del país, sino una muestra de que los ojos de la comunidad internacional están atentos a lo que está pasando en el Perú.
«Nosotros no creemos que es una injerencia (sino) una muestra de solidaridad, una muestra de respeto y cariño por el pueblo peruano y porque se respeten las leyes», expresó.
«Los que están tratando de presionar para que yo, a través de un proceso judicial raro, pueda ingresar a la cárcel, son los que andan diciendo que eso es una injerencia».
Mayorías tendrán voz en Cumbre de los Pueblos
El líder nacionalista se mostró convencido de que la solidaridad que recibió su movimiento por parte de las fuerzas de izquierda latinoamericanas, así como de los movimientos sociales e indígenas de distintos países de la región será un motivo más para que esas fuerzas participen activamente en la Cumbre Social de los Pueblos 2008, que se celebrará en Lima del 12 al 15 de mayo.
«Hemos lanzado la propuesta de trabajar todos de la mano para llevar a cabo una cumbre de los pueblos andinos, una cumbre de los pueblos del Perú, e invitar a todas las organizaciones sociales de los diferentes países hermanos a que participen en esta cumbre paralela», expresó Humala.
La Cumbre se realizará en paralelo a la V Cumbre de América Latina, el Caribe y la Unión Europea.
Hizo un llamado a los presidentes de Bolivia, Nicaragua y Venezuela, que participarán en la cita alternativa «para que no sólo conozcan la versión del Gobierno peruano, sino que también conozcan la versión de lo que está pasando en el país, de las mayorías nacionales, la mayoría social».
Recordó que «en Perú está democracia entre comillas representativa no representa a las mayorías nacionales, representa a los poderes económicos, a sectores que han privatizado y ocupado el Estado peruano, y que a través de mecanismos legales se erigen como interlocutores con los diferentes jefes de Estado que vendrán a Lima».
Ollanta Humala estimó imperativo «que las grandes mayorías sean escuchadas y por eso hemos planteado trabajar juntos en esta cumbre paralela».