El año pasado en un conversatorio con algunos compañeros científicos, estos señalaron que debido al largo silencio sísmico en la costa peruana, se esperaba un terremoto de gran intensidad, e incluso señalaron que este se podía producir entre el 2007 y el 2008, y lo lamentable para ellos era que no se hubiese ningún tipo […]
El año pasado en un conversatorio con algunos compañeros científicos, estos señalaron que debido al largo silencio sísmico en la costa peruana, se esperaba un terremoto de gran intensidad, e incluso señalaron que este se podía producir entre el 2007 y el 2008, y lo lamentable para ellos era que no se hubiese ningún tipo de preparación. Incluso en esa reunión se hizo la pregunta, qué pasaría si el epicentro fuese a unos cuantos kilómetros en el mar del Callao, se calculó que podría haber más de 200 mil víctimas y que una gran parte de la ciudad, especialmente sus zonas mas pobres y antiguas, que se encuentran totalmente tugurizadas se vendría abajo y que ni los hospitales, ni el sistema de seguridad social estaban en condiciones de afrontar una catástrofe de gran magnitud, debido a que el presupuesto en salud y educación representaban cada uno el 3% del PBI siendo después de Haití, el más bajo de América Latina y porque en el país se había liquidado en la práctica el sistema de defensa civil por la corrupción imperante en tal institución.
El terremoto
El día miércoles 15, como nunca, después de días fríos y lluviosos, salió un sol pálido y mortecino, nadie podía imaginar que ese día al morir la tarde se daría uno de los terremotos más fuertes ocurridos en los últimos 50 años en nuestra nación, y de acuerdo investigadores norteamericanos y es europeos, este llegó 8, en la escala de intensidad.
Teniendo como epicentro el mar de Pisco, el terremoto arrasó con las ciudades de Chincha, Ica, Paracas, Palpa, Cañete Castrovirreina y Huaytara en Huancavelica, en Lima afectó a los barrios más pobres y tugurizados como los Barrios Altos, el Rimac y el Callao, e incluso la onda sísmica llegó a Huancayo, y al Ecuador y Chile. Hasta el momento se señala que hay más de 450 personas fallecidas y más de 1,000 heridos, el número de damnificados se acerca a 20 mil personas, además más de 16 mil casas se han caído. Conforme pasan los días siguen apareciendo más víctimas.
Actualmente en la provincia de Pisco se vive un espeluznante drama, los cadáveres se encuentran cubiertos con bolsas negras de plástico en la plaza de Armas de la ciudad, para que sus familiares los reconozcan y por las falta de sistemas de refrigeración, hay el peligro de brotes de epidemias. La ciudad de Chincha se halla en ruinas, casi toda esta destruida. En Ica, la situación es casi igual, en el santuario del Señor de Luren, han muerto mas de 100 personas.
En Huancavelica, han sido afectados 10 distritos de la provincia de Catrovirreina y 3 de Huaytara, sólo en Tantará existen más de 2500 víctimas. La gente está durmiendo en la calle a temperaturas bajo cero. Este departamento es rico en minerales pero debido al saqueo de las empresas transnacionales posee niveles de pobreza sólo comparada a Biafra y Ruanda. Se calcula que en la zona afectada por la onda sísmica hay más de 6 mil casas destruidas, aparte que comunidades como San Juan Bautista, se encuentran desconectados de la Costa por la destrucción de un sector de la vía Los Libertadores y se han venido abajo nueve centros de salud.
Acabando con los mitos neoliberales
Durante el gobierno asesino de Fujimori, la prensa neoliberal, aquella que defiende hoy en día a Alan García, lanzó toda una ofensiva mediática, tratando de convencer al pueblo que las privatizaciones iban a traer prosperidad y modernidad. Hoy en día el pueblo puede ver en toda su magnitud el carácter de la venta de los activos del Estado. El día del terremoto y hasta el momento que escribimos este artículo las comunicaciones telefónicas han colapsado en su totalidad en las ciudades que han sufrido en mayor embate del terremoto y en Lima todavía no se ha reestablecido en su totalidad. El día del sismo el Perú se quedó incomunicado y son inexistentes en las zonas afectadas por la catástrofe. Pero lo más indignante ha sido la defensa que hizo el presidente de la República y la viceministra de transportes y comunicaciones, de la empresa española telefónica, como si fueran sus relacionistas públicos, debido a la critica realizada por organizaciones de ciudadanos como la Asociación Peruana de Consumidores (ASPEC), por su inoperancia y por transgredir el contrato de concesión.
Igualmente, en muchos lugares de Lima todavía no se ha reestablecido el fluido eléctrico, el cual es inexistente en las ciudades afectadas por el desastre. Sale hoy a la luz no sólo la inoperancia del gobierno, sino que también su total deshumanidad. Alan García se ha jactado en los últimos meses que las reservas internacionales se encuentran en niveles nunca alcanzados, en la actualidad existen en bancos norteamericanos y europeos más de 22 mil millones de dólares. Sin embargo el presidente de las transnacionales y de la oligarquía peruana, no es capaz de sacar 5 mil millones de dólares de estas reservas para reconstruir las ciudades destruidas y crear una red de salud y educación en desastres naturales. El terremoto ha mostrado la mediocridad del régimen aprista, el día del desastre salió García Pérez agradeciéndole a Dios que no había ni muertos ni damnificados por el terremoto, cuando en la zona afectada la gente se moría, la «ayuda» demoró más de 12 horas y hasta el momento esta, es totalmente inexistente en Huancavelica y Tambo de Mora.
También salieron los más altos representantes del gobierno, por figuretismo ganando cámaras, pidiendo la solidaridad económica al pueblo, sin embargo no tienen el coraje de presionar a sus jefes para declarar al Perú en emergencia nacional y como consecuencia de ellos poner sobre impuestos a las ganancias monopólicas de las compañías petroleras, mineras, gasíferas y financieras. Hoy, más que nunca se ha visto a quienes representa el partido gobernante en el Perú.
Por eso es que sólo ha destinado 500 millones de soles para la reconstrucción de las ciudades afectadas, la cual representa la irrisoria suma de 165 millones de dólares, por qué, porque al igual que su socio Fujimori, pretende que sea la gran banca, entre ellos el de su financista de campañas Dionisio Romero, el que lidere mediante su banco el proceso de reconstrucción, o sea , no les interesa el dolor humano, sino que los usureros se enriquezcan más
Actualmente en las zonas afectadas por el sismo no existe ningún tipo de plan de reconstrucción y de organización de la población, que diferente a la época del gobierno revolucionario presidido por Juan Velasco Alvarado, en el que se formaron brigadas de solidaridad en todo el país, y se administró adecuadamente la ayuda internacional.
En Ica, Pisco, Chincha, zonas altamente golpeadas por este cataclismo la gente ante el desgobierno ha empezado a manifestarse críticamente al gobierno, porque no puede poner coto al vandalismo producido por delincuentes o por personas hambrientas. Y esto se debe a que en los ultimas dos décadas el estado se ha dedicado a destruir a las organizaciones populares, a perseguir y hostigar a los activistas sociales, por eso es que en estas zonas cunde el caos, cosa que no sucedió en el terremoto del 70, en que organizaciones populares, estudiantes universitarios y el ejercito se movilizaron al instante para socorrer a las víctimas de aquel sismo. Pero, también los dirigentes neoliberales, como el Apra y «solidaridad nacional» no quieren perder el rol protágonico, de allí que no coordinan con los alcaldes, ni presidentes de regiones y organizaciones de mujeres, con el fin de crear clientelaje politico. En estos momentos en que se ve la fibra solidaria del pueblo peruano, es necesario que las organizaciones patrióticas y populares emplacen al gobierno de las grandes empresas, para que les cobre todo el dinero que le adeudan al país, todo el peso de la ayuda no debe recaer en los pobres, a los que se les explota, a los que se les niega el derecho al trabajo. NO. Hoy, más que nunca es imprescindible que los que saquean nuestra patria, paguen todas sus deudas y que los fondos nacionales que existen en los bancos europeos y norteamericanos sirvan para el desarrollo del país y no para que vayan a los bolsillos de los oligarcas y de partidos corruptos como el APRA.