Mahmoud Ahmadinejad era una figura poca conocida cuando fue designado para cumplir el cargo de alcalde de Teherán en 2003 y dos años después no se lo conocía mucho más al convertirse en candidato a la presidencia de Irán.
Sin embargo, los resultados iniciales de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Irán sorprendieron a muchos observadores, otorgándole una victoria al candidato ultraconservador.
Según Sadeq Saba, analista de la BBC especializado en Irán, Ahmadinejad no gastó dinero en su campaña, pero sí tuvo el apoyo de poderosos conservadores, quienes ejercieron influencia sobre una red de mezquitas para movilizar a la gente en su favor.
Al asumir el cargo de alcalde de Teherán el ex guardia revolucionario descartó muchas de las reformas que habían sido puestas en práctica por las previas autoridades de ideologías más moderadas.
Surgió de la nada
Mohammad Jatamí, reformista y actual presidente, prohibió durante su gestión el ingreso de Ahmadenijad a las reuniones del gabinete, un privilegio que normalmente se extiende a los alcaldes de la capital.
Como alcalde clausuró restaurantes de comida rápida y obligó que los hombres empleados por la alcaldía usen barbas y camisas de manga larga.
Además desmanteló la primera campaña publicitaria desde la revolución de 1979 que mostraba la imagen de una persona de occidente, la del astro del fútbol inglés, David Beckham.
Sin embargo, tiene un lado populista reflejado en el nombre de su sitio de Internet, Mardomyar, o «el amigo del pueblo».
Su reputación es la de un hombre que lleva una vida sencilla y lucha contra la corrupción.
Es defensor del programa nuclear que tanto preocupa a Estados Unidos y la Unión Europea.
Su sitio en la red proclama, «No nos permiten progresar fácilmente, pero no debemos rendirnos a sus voluntades…».
Ha sido muy cauteloso con el tema de restablecer relaciones con Estados Unidos.
«La decisión unilateral de Estados Unidos al cortar relaciones con la República Islámica fue dirigida para destruir la revolución islámica…Estados Unidos tuvo la libertad de cortar relaciones con Irán, pero le cabe a Irán decidir si va restablecer relaciones con Estados Unidos.»
Credenciales revolucionarios
Es apoyado por un grupo de revolucionarios jóvenes y de segunda generación, los Abadgaran, o «desarrolladores», quienes disfrutan de mucho poder en el parlamento iraní, el Majlis.
Su sitio de Internet dice que se alistó en la Guardia Revolucionaria como voluntario luego de haber sido uno de los fundadores de la junta estudiantil que tomó la embajada de Estados Unidos en 1979.
Algunos informes sostienen que participó en operaciones encubiertas dentro de Irak.
Hijo de un herrero, nació en Garmsar, cerca de Teherán, en 1956.
Tiene un doctorado en ingeniería de transporte de la Facultad de Ciencia y Tecnología de la Universidad de Teherán, donde además fue catedrático.