Un grado de radiactividad «fatal para los seres humanos» se detectó cerca del sistema de ventilación entre dos reactores de la central nuclear japonesa de Fukushima, según la empresa que la opera. A más de cuatro meses del accidente nuclear que se produjo en esa planta tras el terremoto y posterior tsunami del 11 de […]
Un grado de radiactividad «fatal para los seres humanos» se detectó cerca del sistema de ventilación entre dos reactores de la central nuclear japonesa de Fukushima, según la empresa que la opera.
A más de cuatro meses del accidente nuclear que se produjo en esa planta tras el terremoto y posterior tsunami del 11 de marzo se registran niveles récord de radiactividad.
La Compañía de Energía Eléctrica Tokio (TEPCO) informó de que los contadores Geiger -aparatos manuales que se usan para medir la radiación- registraron el lunes la lectura más alta posible en el lugar.
La radiación excede los 10 sieverts por hora en el fondo de una columna de ventilación ubicada entre dos reactores, señaló TEPCO.
Aela Callan, de Al Jazeera, informó desde la japonesa prefectura de Ibaraki de que la radiación registrada era «fatal para los seres humanos», pero que se restringía al sitio de la central. Sin embargo este martes los científicos llevarán a cabo más pruebas.
«Las autoridades trabajan en la teoría de que (la radiactividad) procede de aquellas explosiones iniciales de hidrógeno que vimos en la planta en los días posteriores al terremoto y el tsunami», dijo.
«Ahora parece más probable que esta área haya tenido este grado de radiactividad desde el terremoto y el tsunami pero que nadie se haya dado cuenta hasta ahora», agregó.
TEPCO señaló este martes que encontró otro punto en el propio sistema de ventilación donde la radiación superaba los 10 sieverts por hora, un registro que podría causar discapacidad o muerte luego de apenas segundos de exposición.
La empresa usó equipos para medir la radiación a distancia y no logró asegurar el nivel exacto, porque la lectura máxima que permite el aparato es de 10 sieverts.
Aunque TEPCO dijo que las lecturas no dificultarían su objetivo de estabilizar los reactores de Fukushima para enero, los expertos plantearon que la seguridad de los trabajadores estaría en peligro si la operadora priorizaba el cumplimiento de los plazos por sobre los riesgos de radiación.
«La filtración de radiación en la planta puede haberse contenido o ralentizado, pero no se selló completamente», declaró Kenji Sumita, profesor de la Universidad de Osaka especializado en ingeniería nuclear.
Es probable que se sigan hallando más puntos de alta radiación, sostuvo.
«Considerando esto, no habría que apresurarse a realizar las tareas de recuperación en la planta para cumplir los calendarios y objetivos», dado que eso pondría en peligro a los trabajadores, dijo Sumita.
«Pasamos la fase inmediata de la crisis y deberían ser permisibles algunas demoras», agregó.
A los trabajadores de la central de Fukushima solamente se les permite exponerse a 250 milisieverts de radiación al año.
TEPCO, que abastece de electricidad a Tokio y a las áreas vecinas, dijo no haber detectado un agudo aumento en la radiación general del complejo.
«La elevada dosis se descubrió en un área que no obstaculiza los esfuerzos de recuperación en la planta», dijo este martes Junichi Matsumoto, un portavoz de TEPCO.
Aunque todavía investiga el asunto, TEPCO dijo que los puntos de alta radiación pueden haberse originado en los escombros que quedaron tras las acciones de emergencia realizadas días después del terremoto y tsunami del 11 de marzo.
Fuente: http://ipsnoticias.net/nota.asp?idnews=98785
rCR