Traducido del inglés para Rebelión por Germán Leyens
Ex agentes de la CIA han confirmado rumores de que la agencia torturó a presuntos terroristas en un centro de detención en Polonia. Un agente acercó supuestamente un taladro a la cabeza de un prisionero mientras éste estaba desnudo y encapuchado.
Ex agentes de la CIA han confirmado por primera vez que la agencia torturó a prisioneros en un centro de detención «oculto» en el noreste de Polonia en plena guerra contra el terror. Según Associated Press, un ex agente de la CIA identificado sólo como «Albert» torturó numerosas veces al presunto terrorista Abd al-Rahim al-Nashiri con un taladro eléctrico en la remodelada base militar Stare Kiejkuty cerca de Szymany en la región Masuria de Polonia.
Al-Nashiri es el presunto cerebro detrás de uno de los primeros grandes ataques de al-Qaida, que tuvo como objeto al destructor estadounidense USS Cole en el Golfo de Adén en octubre de 2000. Según ex agentes de la CIA que prefirieron guardar el anonimato, Albert torturó al sospechoso durante dos semanas en diciembre de 2002. La afirmación es respaldada por un estudio del inspector general de la CIA, que dice: «El interrogador entró a la celda del detenido e hizo funcionar el taladro mientras el detenido estaba de pie desnudo y encapuchado».
Se dice que Albert sostuvo repetidamente el taladro y una pistola junto a la cabeza de al-Nashiri y lo amenazó de muerte. El agente fue posteriormente amonestado y abandonó la CIA. Un intento de iniciar procedimientos legales contra él se abandonó, sin embargo. Albert volvió posteriormente a trabajar para la CIA como contratista de la inteligencia, informó AP.
El ex presidente niega las acusaciones
El ex presidente polaco Aleksander Kwasniewski ha negado firmemente la existencia de prisiones secretas en territorio polaco y se mantiene firme ante estas nuevas acusaciones. «No puedo decir si cosas semejantes tuvieron lugar o podrían haber tenido lugar, todo eso hay que verificarlo», dijo a AP.
Adam Bodnar de la Fundación Helsinki por los Derechos Humanos (HFHR) ha exigido una investigación de si agentes polacos estuvieron también directamente involucrados y si políticos polacos deberían aparecer ante un tribunal estatal por contravenir la constitución polaca, que prohíbe la tortura.
Testigos dicen que la base Stare Kiejkuty se utilizó como una instalación de detención a corto plazo durante la entrega de «detenidos de alto valor» -los más destacados presuntos terroristas- a partir de finales del año 2002. Aparentemente el lugar se eligió debido a su ubicación remota y por su proximidad al pequeño aeropuerto Szczytno-Szymany, sospechoso durante mucho tiempo de ser un destino de vuelos de «entregas extraordinarias».
Fuente: http://www.informationclearinghouse.info/article26358.htm
rCR