El coordinador de la bancada del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), Edwin Castro, acusó este miércoles al embajador español en Managua, Jaime Lacadena, de asumir una conducta injerencista, debido a su padrinazgo en la búsqueda de la unidad electoral antisandinista. Según el legislador, el diplomático prestó su residencia para un encuentro entre el banquero […]
El coordinador de la bancada del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), Edwin Castro, acusó este miércoles al embajador español en Managua, Jaime Lacadena, de asumir una conducta injerencista, debido a su padrinazgo en la búsqueda de la unidad electoral antisandinista. Según el legislador, el diplomático prestó su residencia para un encuentro entre el banquero Eduardo Montealegre, candidato de la Alianza Liberal Nicaragüense y del Partido Conservador, y José Rizo, quien aspira a la presidencia por el Partido Liberal Constitucionalista.
En opinión del diputado Castro, Lacadena asumió una postura injerencista, por lo que hay que reclamarle por ese gesto, el cual, dijo, con toda seguridad no sería avalado por el presidente del gobierno español, José Luís Rodríguez Zapatero.
OEA dice que no es «aconsejable» injerencia en asuntos internos
En este sentido, el jefe de la misión de observadores electorales de la OEA en Nicaragua, Gustavo Fernández, dijo este miércoles que no es «aconsejable» que gobiernos extranjeros se inmiscuyan en las cuestiones internas de otro país. «La injerencia de otros países en los asuntos internos políticos de otras naciones americanas, no es el camino más aconsejable», declaró Fernández, ex canciller de Bolivia, a periodistas.
El diplomático aclaró que ese comentario no lo hace en particular por el caso de Nicaragua, donde partidos políticos y organismos han acusado a Estados Unidos, Venezuela y España de entrometerse en el proceso electoral. «La misión de la OEA en Lima, Perú, sacó ayer un documento que refleja este mismo punto de vista», agregó.
Sobre las elecciones en este país, el diplomático señaló que «el destino político de Nicaragua corresponde a los nicaragüenses» decidirlo el próximo 5 de noviembre. Indicó que los gobiernos extranjeros y organismos internacionales lo que deben de hacer es apoyar «a las instituciones nicaragüenses».
El ex canciller boliviano dio estas declaraciones tras sostener una reunión con el candidato presidencial liberal, José Rizo.
El jefe de la misión de la Organización de Estados Americanos (OEA) en Nicaragua no quiso referirse a la situación que existe en el Consejo Supremo Electoral (CSE), donde magistrados liberales y sandinistas, por diferencias entre ellos, no hacen quórum para reunirse desde hace varias semanas.
16 años de gobiernos de la derecha: un desastre nacional
En otro orden, el diputado sandinista fustigó también a los gobiernos neoliberales de los últimos 16 años, a quienes culpa de haber provocado un desastre social espantoso en Nicaragua. Han convertido a Nicaragua en un país en el que los ricos cada día son más ricos y los pobres cada día más pobres, aseveró el diputado, en declaraciones a la prensa local.
De acuerdo con Castro, si bien es cierto que la economía del país nominalmente creció desde 1990, también han aumentado la desnutrición, el hambre, el analfabetismo, los índices de mortalidad infantil y la pobreza. Afirmó que del lugar 62 que ocupaba Nicaragua en nivel de vida en el mundo, descendió ahora al 116.
Interrogado sobre las posibles alianzas electorales que se cocinan en el bando de la derecha, Castro aseveró que a su partido no le preocupa una eventual unificación de sus contendientes, de cara a los comicios generales del 5 de noviembre próximo.
«El pueblo nicaragüense ya está cansado de las políticas y de las promesas de los Montealegre, de los Rizo, de los Bolaños, de los Alemán», sentenció. Castro aseguró que el FSLN quiere un gobierno de unidad nacional, en el que todos los nicaragüenses trabajen por sacar al país de la pobreza.