Un informe publicado el lunes por la Agencia de la ONU para los Refugiados, ACNUR, muestra que el 2011 ha sido un año récord en cuanto a desplazamiento forzoso entre fronteras, registrando la mayor cifra de personas que se han convertido en refugiados desde 2000. El informe de ACNUR titulado «Tendencias Globales 2011», detalla por […]
Un informe publicado el lunes por la Agencia de la ONU para los Refugiados, ACNUR, muestra que el 2011 ha sido un año récord en cuanto a desplazamiento forzoso entre fronteras, registrando la mayor cifra de personas que se han convertido en refugiados desde 2000.
El informe de ACNUR titulado «Tendencias Globales 2011», detalla por primera vez el alcance del desplazamiento forzoso que han provocado una serie de crisis humanitarias encadenadas, comenzando a finales de 2010 en Costa de Marfil y que fue rápidamente seguida de la crisis en Libia, Somalia, Sudán y otros lugares. La cifra de nuevos desplazamientos forzados en 2011 fue de 4,3 millones de personas, de las cuales 800.000 huyeron de sus países cruzando fronteras y convirtiéndose en refugiadas.
«El año 2011 ha sido testigo de un sufrimiento a escala épica. Ha sido tan elevado el número de personas que se han visto envueltas en situaciones de conflicto en tan poco tiempo, que ha tenido un coste personal enorme para todos los afectados» dijo António Guterres, Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados. «De lo que sí podemos estar agradecidos es de que el sistema internacional de protección para estas personas se haya mantenido firme en su mayor parte, y que las fronteras hayan permanecido abiertas. Han sido momentos de ponerse a prueba».
En todo el mundo hay 42,5 millones de personas que en 2011 se encontraban como refugiados (15,2 millones), desplazados internos (26,4 millones) o como solicitantes de asilo (895.000). A pesar del alto número de nuevos refugiados, la cifra total de desplazados por conflictos fue menor que en 2010, en que hubo 43,7 millones. Esto se debe principalmente al efecto compensador que ha supuesto el retorno a gran escala de personas desplazadas internas que han regresado a sus hogares en 2011, y que se eleva a 3,2 millones, la cifra más alta de retornos de desplazados de la última década. En relación a los refugiados y aunque se haya producido un incremento en la repatriación respecto al 2010, el año 2011 ha sido el tercer año más bajo en retornos (532.000) de la última década.
Desde una perspectiva a 10 años vista, el informe nos muestra algunas tendencias preocupantes: una de ellas es que el desplazamiento forzado está afectando a un número cada vez mayor de personas a nivel global, con la media anual sobrepasando los 42 millones en los últimos cinco años. Otra sería que una persona que se convierte en refugiado, tiene muchas más posibilidades de permanecer en esa situación por muchos años, a menudo en un campo de refugiados o viviendo en situación de precariedad en algún barrio urbano. De los 10,4 millones de refugiados bajo el amparo de ACNUR, casi tres cuartas partes (7,1 millones) llevan viviendo en el exilio durante más de cinco años, a la espera de una solución a su situación.
En conjunto, Afganistán sigue siendo el mayor productor de refugiados (2,7 millones), seguido de Irak (1,4) Somalia (1,1), Sudán (500.000) y la República Democrática del Congo (491.000).
Unas cuatro quintas partes de la población mundial de refugiados han huido hacia sus países vecinos y esto se refleja en las importantes bolsas de refugiados que hay, por ejemplo, en Pakistán (1,7 millones), Irán (886.000), Kenia (566.500) y Chad (366.500).
En cuanto a los países industrializados, Alemania encabeza la lista como el país que más refugiados acoge con 571.700. Sudáfrica fue el país con mayor número de solicitantes de asilo (107.000), una situación que se ha venido manteniendo así desde hace cuatro años.
El mandato original de ACNUR era ayudar a los refugiados, pero en las seis décadas que la Agencia viene trabajando desde su creación por la Asamblea General de la ONU, su trabajo ha ido creciendo para ampliar la asistencia a muchas personas desplazadas en el mundo y a los apátridas, personas que carecen de una nacionalidad reconocida y de los derechos humanos que lleva aparejados. El informe de Tendencias Globales 2011 señala que tan sólo 64 países proporcionaron datos sobre personas apátridas, lo que supone que ACNUR sólo pudo registrar cifras sobre un cuarto de la población mundial de apátridas, que se estima en unos 12 millones.
De los 42,5 millones de personas en situación de desplazamiento forzado a finales de 2011, no todas se encuentran bajo la atención de ACNUR: unos 4,8 millones de refugiados, por ejemplo, están registrados con nuestra agencia hermana, la UNRWA, encargada de los refugiados palestinos. De los 26,4 millones de desplazados internos, 15,5 reciben protección y asistencia de ACNUR. En su conjunto, los refugiados y desplazados internos de los que se ocupa ACNUR -unos 25,9 millones de personas- crecieron en 700.000 personas en 2011.
El informe sobre Tendencias Globales es el principal informe anual de ACNUR sobre la situación de desplazamiento forzoso. Se pueden ver más datos anualmente publicados en nuestro anuario estadístico (Statistical Yearbooks) y en los informes bianuales sobre solicitudes de asilo en países industrializados (asylum applications in industrialized nations).