Distribuyen películas sobre movimientos sociales mundiales, organizan proyecciones y publicaciones, traducen películas de otros colectivos y, además, producen sus propias obras.
Cine Rebelde es un joven colectivo de medios independientes cuyo trabajo no está orientado hacia una lógica de beneficio. Sus miembros tienen experiencia previa en actividades políticas, organización de eventos internacionales, movilizaciones y publicaciones y ahora se aventuran a la difusión del activismo en el cine porque han detectado un fuerte interés tras todas estas experiencias.
«La Cuarta Guerra Mundial», filme que narra un levantamiento global de los oprimidos, es la película estrella que ahora mismo distribuyen. Una película que en América del Norte llenó salas de cien ciudades diferentes. Según el representante del colectivo, Ariel Vergara, el objetivo de esta organización es «documentar» su propia actividad dentro de las luchas sociales por un mundo sin opresión: «no nos sentimos como observadores ajenos a las luchas, sino que trabajamos dentro de ellas».
La organización tiene sede en Freiburg, una ciudad al suroeste de Alemania, pero su trabajo se caracteriza por «una dimensión tanto local como global». De hecho, las películas se distribuyen por todo el planeta y tienen previstas giras en Europa y América Latina para los próximos meses. Ariel Vergara define ese sentido de alcanzar otro tipo globalización de este modo: «así podemos contribuir a que imágenes, voces, palabras, sueños, análisis, estrategias e ideas que vienen de un contexto social particular en una parte del planeta lleguen a otra parte del mundo».
Un método coherente con sus fines El videoactivismo que practican en el colectivo tiene una característica especial en cuanto al precio, en el que aplican lo que en Francia se llama «prix libre» o en Alemania «nach Selbsteinschätzung» y que se podría traducir por algo así como «estimación propia del precio».
Esta práctica consiste en tener diferentes precios para un mismo producto, considerando la diferencia de nivel económico de las personas y confiando totalmente en la honradez de quien elige un precio. Así, la película «La cuarta guerra mundial» está disponible en tres precios diferentes: uno para personas con pocos recursos, otro que considera a las personas con mejores ingresos y un precio solidario, dirigido a instituciones, ONGs y otras organizaciones con recursos.
Esto, aunque pueda parecer inocente, funciona «muy bien» según la organización. Ariel Vergara explica que «no queremos que la gente sólo vea el DVD como un producto de consumo, sino que vean también las ideas que transporta, las iniciativas políticas que hay detrás y las condiciones en que fue producido».
En los últimos años, el mediactivismo -el activismo realizado a través de los medios de comunicación- ha contribuido «a crear una conciencia global de las luchas y crear contactos que van mas allá de los océanos y de las barreras culturales».