Con la presencia de alrededor de 600 representantes de redes y campañas sociales de las Américas, se inauguró ayer el V Encuentro Hemisférico contra el ALCA y el libre comercio, que tendrá lugar hasta el 15 de abril, en el Palacio de las Convenciones de La Habana, Cuba. Convocado por la Alianza Social Continental, la […]
Con la presencia de alrededor de 600 representantes de redes y campañas sociales de las Américas, se inauguró ayer el V Encuentro Hemisférico contra el ALCA y el libre comercio, que tendrá lugar hasta el 15 de abril, en el Palacio de las Convenciones de La Habana, Cuba.
Convocado por la Alianza Social Continental, la reunión esta vez prioriza el debate y la construcción colectiva al interior de las redes y campañas -primero-, para luego pasar a un espacio compartido en el que estos movimientos confrontarán propuestas por regiones.
Redes y campañas como Jubileo Sur, CADA (Campaña para la desmilitarización de las Américas) y COMPA (Convergencia de Movimientos de los Pueblos de las Américas) construirán programas de acción para espacios concretos de lucha como Centroamérica, el Cono Sur, la región andina, etc.
En el discurso de apertura del encuentro, el economista cubano Osvaldo Martínez, director del Centro de Estudios de la Economía Mundial y presidente del comité organizador del evento, resaltó la resistencia y el empuje de los movimientos sociales del continente frente a las políticas neoliberales que hoy el imperialismo trata de imponer a nuestros pueblos.
No obstante, señaló, aunque presenciamos una evidente crisis del modelo neoliberal, aparecen para nosotros otras necesidades, como es enfrentar la capacidad del capitalismo para reajustarse constantemente.
«Los movimientos sociales tenemos que criticar y oponernos a aquel modelo, pero también tenemos una tarea de construcción de ese mundo mejor, que solo surgirá como creación colectiva y como esfuerzo concertado», agregó.
Al hacer un balance del tiempo transcurrido desde el encuentro del año anterior, Osvaldo resaltó la radicalización de las políticas norteamericanas, algo que atañe a todos los países del continente.
«La respuesta del gobierno de Bush a los problemas mundiales es la militarización y la represión. La militarización aparece crudamente en un gasto militar de unos 500 mil millones de dólares, más de la mitad del gasto militar mundial, aunque incapaz de evitar lo que ya es una evidente derrota en Irak. Y la represión se expresa de variadas formas, desde una ley patriota que mutila los derechos ciudadanos y fortalece la acción de un Estado policía, las restricciones contra los inmigrantes, hasta la escandalosa práctica de la tortura a prisioneros como sistema», señaló el economista.
El programa de este quinto encuentro, que además intenta promover políticas de comunicación y movilización de todos los sectores sociales que comparten la lucha contra el ALCA y el libre comercio, incluye paneles como «En defensa de la humanidad», «Intelectuales y movimientos sociales», y conferencias magistrales de pensadores como el boliviano Pablo Solón, el belga Francois Houtart y el venezolano Edgardo Lander.