Isabel Rauber, filosofa argentina presentó su último libro Sujetos Políticos, en la Universidad Nacional de La Plata
«Hoy los movimientos sociales se encuentran en la reconstrucción de una alternativa de sociedad para América Latina», dijo Isabel Rauber luego de explicar la caída de paradigmas de los años ’70 y ’80 y las nuevas formas de construcción de poder que generó el proyecto neoliberal.
Días atrás, la Cátedra Libre Germán Abdala de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) organizó una charla debate con la filosofa argentina Isabel Rauber que desde 1978 reside en Cuba donde se desempeña como profesora de la Universidad Nacional de La Habana.
Desde hace más de dos décadas, Rauber adquirió un permanente compromiso con los diferentes movimientos sociales de Latinoamérica y sus construcciones de políticas alternativas.
«Sujetos Políticos», su último libro, resume un viejo debate de Latinoamérica sobre quienes son los sujetos políticos y el debate de la existencia de tantos proyectos como sujetos existen.
«No basta con unir los problemas sectoriales en un proyecto porque sólo serían una plataforma reivindicativa» explica Isabel Rauber.
Los proyectos reivindicativos y las propuestas políticas tienen una clara diferencia cualitativa. Para Isabel Rauber los sectores sociales deben unirse en un plan con dinámica diferente que les permita salir de lo gremial, de lo sectorial.
«Partir de lo cotidiano, de lo reivindicativo, para ir profundizando en lo político, son las claves metodológicas que arrojan pistas claras para construir una propuesta concreta», explica en su libro la filosofa.
«No podemos seguir pensando lo político desde la concepción de los partidos, hay que pensar la política como un elemento vital para la ciudadanía», sentenció Rauber.
«El problema es la atomización, la fragmentación de la mirada», continuó. Sin embargo, las diferentes organizaciones sociales que se multiplican cada día más saben para que existen y saben que sus luchas tienen sentido.
Varios ejemplos son citados en el libro como el Movimiento Sin Tierra (MST) y Vía Campesina de Brasil, la Coordinadora del agua de Bolivia y la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), como movimientos sociales que han sabido articular sus reivindicaciones sectoriales con la problematización de la dimensión sociopolítica, que sólo puede hacerse desde lo cotidiano.
Autora de otros libros como «Construyendo poder desde abajo» y «Claves para una nueva estrategia», Isabel Rauber entiende que la unión de los problemas sectoriales daría como resultado una buena plataforma reivindicativa. Pero existe una gran diferencia cualitativa con las propuestas políticas y es necesaria la unión de todos los sectores en un plan dinámico para la formación de una alternativa.
La humanización del capital es otro concepto que junto con el de articulación y la construcción de poder desde lo cotidiano son ejes en su nuevo libro.
Los recientes levantamientos en Francia en contra de la ley laboral que establece lo contratos cada dos años es sólo un ejemplo de lo que Rauber llama el encuentro del capital y el trabajo en el norte. «En el norte el neoliberalismo también existe», dijo.
Es necesario llegar a un equilibrio, explicaba, a la no exclusión. Las sociedades generadoras de grandes progresos son también fuentes de grandes pobrezas.
«Cuando nos levantamos y vemos el mundo que tenemos nos damos cuenta de la falta de humanismo del capital y pensamos que otro mundo es posible: sí, puede ser peor» sentencio irónicamente la filósofa.