La institución que gobierna el futbol mundial, Federación Internacional del Fútbol Asociado, conocida por sus siglas FIFA, se ha visto envuelta en uno de los mayores escándalos de corrupción desde su creación en el año de 1904. Entre las funciones de la FIFA, destaca la organización de la Copa Mundial de Fútbol, los los Torneos […]
La institución que gobierna el futbol mundial, Federación Internacional del Fútbol Asociado, conocida por sus siglas FIFA, se ha visto envuelta en uno de los mayores escándalos de corrupción desde su creación en el año de 1904. Entre las funciones de la FIFA, destaca la organización de la Copa Mundial de Fútbol, los los Torneos Olímpicos, entre otros. Agrupa 209 asociaciones o federaciones de fútbol de distintos países: Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL o CSF); Unión Europea de Asociaciones de Fútbol (UEFA); Confederación Asiática de Fútbol (AFC); Confederación Africana de Fútbol (CAF); Confederación de Fútbol de Norte, Centroamérica y el Caribe (CONCACAF); Confederación de Fútbol de Oceanía (OFC).
El escándalo de corrupción que involucra a funcionarios de la FIFA, fue develado el día miércoles 27 de mayo del presente año por la justicia estadounidense, quienes anunciaron públicamente la imputación de nueve directivos de la FIFA y cinco empleados del organismo por conspiración y corrupción. En Zúrich, Suiza, sede de esta institución, fueron detenidos siete de los involucrados en este caso, atendiendo una petición del Departamento de Justicia de EE.UU. Entre los cargos imputados destacan: haber recibido o pactado sobornos por unos US$150 millones a cambio de derechos de transmisión, publicidad y patrocinio de torneos de fútbol y adjudicar sedes de campeonatos, en los últimos 20 años.
Los nombres de las personas involucradas son los siguientes: Jeffrey Webb (Islas Caimán); Eduardo Li (Costa Rica); Julio Rocha (Nicaragua); Costas Takkas – (Reino Unido); Jack Warner (Trinidad y Tobago); Eugenio Figueredo (Uruguay/EE.UU); Rafael Esquivel (Venezuela); José María Marín (Brasil); Nicolás Leoz (Paraguay); Alejandro Burzaco (Argentina); Aaron Davidson (EE.UU); Hugo Jinkins (Argentina); Mariano Jinkins (Argentina).
Sorprende que sin ser el fútbol un deporte relevante en los Estados Unidos, este país pretenda convertirse en juez de la corrupción del futbol mundial, alegando para ello el combate al crimen organizado internacional y la Ley de Prácticas de Corrupción en el Extranjero (FCPA), de su país del año 1977. Según las autoridades norteamericanas, los supuestos delitos se concertaron en territorio estadounidense y usando los sistemas financieros del país. Sobre esta actuación de la justicia estadounidense, el Ministerio de Exteriores de Rusia, emitió un comunicado donde advirtió «sobre la existencia de un nuevo caso de aplicación ilegal y extraterritorial de la legislación estadounidense».
En el marco de este penoso escándalo que rodea a la FIFA, fueron celebradas el día viernes 29 de mayo, las elecciones presidenciales de esta institución, en las que el suizo Joseph Blatter Blatter, resulto reelecto para su quinto mandato al frente de la organización, ello a pesar de las críticas recibidas por el escándalo de corrupción y de las solicitudes de posponer esta elección y habérsele solicitado incluso la renuncia a ésta aspiración. También presentaron candidatura, el príncipe jordano Alí Bin Al Hussein, de 39 años, el exfutbolista portugués Luis Figo y el presidente de la Federación Holandesa de Fútbol, Michael van Praag, estos dos últimos declinaron antes de las elecciones.
La situación que rodea a la FIFA, llamó la atención de las empresas patrocinadoras, organismos internacionales y presidentes de países latinoamericanos. Las empresas patrocinadores Coca-Cola, Visa, Adidas, McDonald’s, Hyundai Motor y Budweiser, mostraron preocupación por la situación y demandaron la adopción de medidas rápidas e inmediatas. De la misma manera la Organización de Naciones Unidas (ONU), que desde el año 1999 ha impulsado iniciativas conjuntas para aliviar la pobreza, respetar los derechos humanos y abordar problemas ambientales, anunció que evaluará las actuales asociaciones que sostiene con la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA).
Con relación a los pronunciamientos de los jefes de Estados, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, calificó como terrible y extremadamente penoso para América Latina el escándalo de corrupción en la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA). Explicó que la posible investigación a las asociaciones de fútbol de Ecuador corresponde a la Fiscalía y destacó su apoyo para que todo se haga con transparencia. El presidente de Bolivia, Evo Morales, solicito a la Comunidad de Estados de Latinoamérica y el Caribe (CELAC) y a la Unión Europea que incluyan como tema de la próxima cumbre a celebrarse los días 10 y 11 de junio en Bélgica, el caso de las acusaciones de corrupción en la FIFA. El presidente Nicolás Maduro, en su programa resaltó que son bien extrañas las circunstancias y opinó que el presidente de esa institución debería ser un futbolista. «Debería ser Diego Armando Maradona o alguien como él». Asimismo, ratificó la investigación ejecutada por el Ministerio Público sobre la Federación Venezolana de Fútbol (FVF). «Que se haga una investigación completa».
La situación que rodea a la FIFA, no es clara, sorprende que el recién electo presidente de esta institución ahora presente sorpresivamente su renuncia al cargo, cuando le fue solicitada la renuncia a su candidatura y aplazamiento de las elecciones. Más aún resulta curioso el interés de los Estados Unidos en convertirse en juez de la corrupción del futbol mundial, su interés ya no sólo son los recursos y controlar los gobiernos de los países, sino que en su arrogancia imperial interviene y pretende controlar una institución que cuenta con mucho más miembros que las Naciones Unidas. Lo cierto es que este escándalo que ensombrece al futbol mundial debe llamar a la reflexión a todos los países miembros de la FIFA, para que esta institución se maneje con mayor transparencia en todos sus ámbitos, no sólo en el financiero.