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El presidente de Ecuador denuncia que la partitocracia del Congreso conspira para derrocarle

Fuentes: Altercom

 En una clara alusión a los intentos de destituirle por parte de la partidocracia neoliberal apoderada del congreso y otros organismos públicos, el Presidente ecuatoriano Rafael Correa denunció que «están muy desesperados y son capaces de cualquier tontería». El mandatario habló en su programa radial sabatino y advirtió de lo cruciales que son los dos […]

 En una clara alusión a los intentos de destituirle por parte de la partidocracia neoliberal apoderada del congreso y otros organismos públicos, el Presidente ecuatoriano Rafael Correa denunció que «están muy desesperados y son capaces de cualquier tontería». El mandatario habló en su programa radial sabatino y advirtió de lo cruciales que son los dos próxinos meses para las «conspiraciones» en las que estarían involucrados los grupos de poder económico con Álvaro Noboa, León Febres Cordero y Jaime Nebot a la cabeza y el destituido Lucio Gutiérrez.

Estas aseveraciones de Correa se repiten luego de su reunión con las Fuerzas Armadas en las que señaló que hay que mantener una alerta ante la conspiración .

«Ya están sembrando el escenario para que, si corre suficiente dinero, haya una mayoría de 67 votos en el Congreso para destituirme en el Congreso», advirtió el mandatario, que añadió que no hay que excluir esta posibilidad como la de que surja una denuncia.

«Ya hay conspiraciones», manifestó el Presidente, quien mencionó a Lucio Gutiérrez, Álvaro Noboa, el grupo de León Febres Cordero y de Jaime Nebot. «Está unida la partidocracia. Están desesperados. Si creen que van a ser arrados el 30 de septiembre, tratarán de destituirme en los dos próximos meses. Si no, esperarán a la Asamblea Constituyente», explicó.

EL INFORME SOBRE EL ATRACO BANCARIO DE 1999 SE PRESENTA ESTE MIÉRCOLES Y NO HABRÁ IMPUNIDADM DIJO EL PRESIDENTE ECUATORIANO

El Presidente de la República, Rafael Correa, afirmó hoy que el atraco bancario de 1999 es una «historia tenebrosa» que «no quedará en la impunidad» y pidió a los ecuatorianos estar atentos al informe que la comisión de auditoria del salvataje bancario entregará el próximo miércoles 9 de agosto.

El Mandatario anticipó que los resultados «son estremecedores». Luego de la presentación del día miércoles, el Gobierno pedirá al Fiscal General de la Nación que investigue a los responsables y conformará una veeduría ciudadana para que estos delitos sean sancionados y no queden en la impunidad.

El Presidente, en el acto de posesión de la comisión que investiga el salvataje bancario, en marzo pasado.

«Todo fue un plan para quebrar al país y llenar el bolsillos de los banqueros», dijo el Presidente, quien afirmó que el «atraco» financiero de 1999 y 2000 tuvo como antecedentes la manipulación de las leyes.

BANCA CORRUPTA CONTROLÓ LA CONSTITUYENTE DE 1998

El Jefe del Estado indicó que están investigando las actas, pero adelantó que los banqueros controlaron la Asamblea Constituyente de 1998 y realizaron modificaciones legales para beneficiarse.

En concreto, el Mandatario expuso que, en 1998, se modificó la transitoria número 42 de la Constitución en relación con la gestión del Banco Central para incorporar el siguiente contenido: «Hasta que el Estado cuente con los instrumentos legales adecuados para enfrentar crisis financieras y por el plazo no mayor de dos años, contados a partir de la vigencia de esta Constitución, el Banco Central del Ecuador podrá otorgar créditos de estabilidad y de solvencia a las instituciones financieras, así como crédito para atender el derecho de preferencia a las personas naturales depositantes en las instituciones que entren en proceso de liquidación».

Ante este cambio legal, el Presidente aseguró que los banqueros «ya sabían que se venía la crisis e hicieron una Constitución a su medida para que todo el pueblo ecuatoriano pague su irresponsabilidad».

NO OLVIDAR A LA DEMOCRACIA CRISTIANA Y AL SOCIALCRISTIANISMO

En este sentido, pidió «no olvidar a quienes estuvieron en esa Constituyente», entre los que citó a la Democracia Cristiana que estaba «dominada» por el Partido Social Cristiano y los banqueros, que ahora -según declaró el Presidente- ya cuentan con un «nuevo títere» de sus intereses, como es el Partido Sociedad Patriótica de Lucio Gutiérrez.

Luego del primer paso para «atracar» al país, vino el segundo, en diciembre del 1998, con la aprobación de ley de la Agencia de Garantía de Depósitos (AGD), «cuyo lema parece haber sido ‘quiebren no más que todo el Ecuador paga'», dijo el Presidente.

El Jefe del Estado recordó que después, en marzo de 1999, se vino el congelamiento de depósitos, que se convirtió en el «mayor decomiso de nuestra plata». Además, se registró una devaluación del sucre, que pasó de un tipo de cambio de 5.000 sucres por dólar a 25.000 sucres por dólar, con lo que «se consumó el robo de las cuatro quintas partes de los depósitos del pueblo ecuatoriano».

LA HISTORIA TENEBROSA QUE LLEVÓ A UN PUEBLO A LA QUIEBRA Y AL ÉXODO

El salvataje es una «historia tenebrosa de atraco bancario en el que nos quebraron a todos, nos robaron los banqueros en contubernio con el Gobierno de Jamil Mahuad y ahora esta gente nos quiere dar clases de moral y buenas costumbres».

El Mandatario se preguntó si de esto fue responsable acaso un Gobierno de izquierda o socialista, y dijo que fue el Ejecutivo de la democracia cristiana, «uno de los más derechistas que ha tenido este país».

El miércoles 9 de agosto, la comisión que investigó el «atraco» bancario revelará con documentos y se entregarán datos; mientras que los nombres de los responsables, cuya lista existe, se entregará a la Fiscalía General para que investigue, ya que «esto no puede quedar en la impunidad, tiene que sancionarse el atraco deliberado que nos costó 6.000 millones de dólares» agregó.

El Presidente añadió que, por esta razón, los responsables de estos delitos «están desesperados por que temen que si les ganamos el 30 de septiembre tendrán que pagar su culpa. No quedará en la impunidad este atraco gigantesco al pueblo ecuatoriano», concluyó.