Tras dos meses de enconado conflicto, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación declaró hoy por unanimidad válidas las elecciones del 2 de julio en México y a Felipe Calderón presidente de la República. El dictamen de los siete magistrados señala que Calderón, candidato del oficialista Partido Acción Nacional, obtuvo 14 millones 916 […]
Tras dos meses de enconado conflicto, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación declaró hoy por unanimidad válidas las elecciones del 2 de julio en México y a Felipe Calderón presidente de la República. El dictamen de los siete magistrados señala que Calderón, candidato del oficialista Partido Acción Nacional, obtuvo 14 millones 916 mil 927 votos, Andrés Manuel López Obrador, de la coalición Por el Bien de Todos (14 millones 683 mil 96) y Roberto Madrazo, de Alianza por México, (nueve millones 237 mil). Reconoce además que en el proceso hubo irregularidades, algunas no comprobadas y otras que no pusieron en peligro la validez de los comicios ni respaldaron la nulidad de los mismos. Sobre esa base, la resolución declaró improcedentes los argumentos de la coalición Por el Bien de Todos, en los que señaló que otros candidatos realizaron actos de campaña anticipados. Al dar a conocer el texto, el TEPJF aseguró que resulta inadmisible la afirmación de una campaña negra en contra del candidato López Obrador y dijo que esa alianza electoral empleó el mismo tipo de promoción. Enfatizó que no hay expediente alguno de que Calderón se encuentre en hipótesis de ilegibilidad para ser Presidente y consideró que este reúne los requisitos de legitimidad y puede conducir al país en el periodo entre 1 de diciembre de 2006 hasta el 30 noviembre de 2012. Aseguraron los magistrados que prevaleció el sentido de certeza en el recuento de las 11 mil 839 casillas electorales, del total de 130 mil 477 que funcionaron el día de los sufragios, así como en el recuento y resultado final de los cómputos. Negaron irregularidades en las casillas distritales, las que fueron comprobadas por más de 11 mil observadores nacionales de los distintos partidos políticos y coaliciones junto con otros 693 extranjeros. El expediente resaltó el orden y paciencia mostrado por los 41 millones 557 mil 530 mexicanos que participaron en los comicios, así como el cumplimiento de la legalidad y del derecho de expresión para todos los contricantes y de los principios electorales, los cuales negó que fueran vulnerados. Las casi 300 páginas del documento establecen que ninguna conducta fue determinante en el resultado de las votaciones. Sin embargo, hizo llamados de atención al presidente Vicente Fox Quesada y al Consejo Coordinador Empresaria (CCE) por apoyar al aspirante oficialista. Al respecto se indicó que Fox puso en riesgo con sus declaraciones la validez del referéndum presidencial, las cuales hubieran sido un elemento a considerar de presentarse más irregularidades en el proceso electoral. Similar actitud asumió el CCE con los spots de radio y televisión difundidos entre marzo y mayo de 2006 a favor del candidato del PAN, lo que violó los principios de igualdad en las contiendas electorales. Las elecciones no fueron un ejercicio fácil, sino por el contrario bastante reñido, dada la conciencia política alcanzada por los mexicanos y reflejada en su elevada participación, significó el dictamen. La resolución del Tribunal, de acuerdo con lo que señala la Constitución, será definitiva e inatacable, por lo que con esta sesión del TEPJF quedó concluido el proceso electoral mexicano. Mientras, en las afueras de la sede del TEPJF miles de simpatizantes de López Obrador protestaron contra la decisión, que ratificó el triunfo en las urnas de Calderón. Por su parte, el líder izquierdista mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ha rechazado el fallo del Tribunal Electoral que validó las elecciones del 2 de julio y designó al conservador Felipe Calderón presidente electo y ha ratificado su decisión de crear un gobierno alterno. Mientras, Calderón ha llamado a la unidad en su primer discurso. «Desconozco a quien pretende ostentar como titular del Poder Ejecutivo Federal sin tener una representación legítima ni democrática», ha dicho Andrés Manuel López Obrador en su asamblea informativa en el Zócalo (plaza central) de la capital. El líder de la coalición Por el Bien de Todos en el fallo del Tribunal Electoral «se violó la voluntad popular y se fracturó el orden constitucional». López Obrador, además, ha acusado a Felipe Calderón de «presidente ilegítimo, espurio y pelele». Además, ha reiterado que en la Convención Nacional Democrática, convocada para el 16 de setiembre, se constituirá un gobierno «que cuente con la legitimidad para refundar la República y el orden constitucional». Después de poco más de dos meses de los comicios del pasado 2 de julio, las autoridades electorales designaron ayer al conservador Felipe Calderón, de 43 años, como presidente electo del país, en un informe en el que admitieron la existencia de irregularidades en la votación, aunque las consideraron insuficientes para alterar el resultado. El Tribunal Electoral dictaminó por unanimidad que el candidato del Partido Acción Nacional (PAN) es «elegible» como nuevo mandatario por haber triunfado en una votación que declaró «válida», con una ventaja de 233.381 votos (0,56 puntos porcentuales) sobre López Obrador, del Partido de la Revolución Democrática (PRD). Ocho horas después del fallo, Calderón ha pronunciado su primer discurso como presidente electo en la sede de su agrupación política para llamar a la unidad del país y convocar al diálogo a sus adversarios. Según Calderón, el proceso electoral fue «libre, equitativo y democrático, vigilado por la ciudadanía» y, en él, el Tribunal Electoral ha demostrado un «desempeño imparcial y profesional», además de «su eficacia como órgano garante de la democracia».
Esta es la cronología de la crisis: 2 de julio: 42 millones de mexicanos van a las urnas. El órgano electoral declina anunciar un ganador por empate técnico.
3 de julio: López Obrador denuncia la «desaparición» de tres millones de votos en el programa electrónico de cómputo. Calderón queda con una ventaja provisional de 1,04 puntos.
4 de julio: La ventaja de Calder½n se acorta a 0,65 por ciento en sistema electrónico de escrutinio.
5 de julio: Calderón queda con una ventaja de 0,58 por ciento frente a López Obrador al finalizar el cómputo oficial en las 300 juntas de distrito.
8 de julio: Un primer mitin de protesta de López Obrador reúne 300.000 personas en Ciudad de México. Comienzan acciones de «resistencia civil» como la toma de peajes carreteros y bloqueo de bancos.
16 de julio: López Obrador encabeza una marcha y un mitin con más de un millón de personas con la exigencia del «voto por voto».
30 de julio: Marcha multitudinaria de López Obrador culmina con la instalación de 47 campamentos de protesta que bloquean el centro de la capital.
2 de agosto: Se cumple un mes desde las elecciones presidenciales sin que haya un presidente electo.
5 de agosto: El Tribunal Electoral rechaza hacer un recuento global de votos y ordena revisar sólo el 9,07 por ciento de las mesas.
15 de agosto: López Obrador convoca a sus simpatizantes a una Convención Nacional Democrática para proclamar un gobierno en rebelda.
28 de agosto: El Tribunal Electoral rechaza el alegato de fraude y resuelve las impugnaciones sin alterar la ventaja de Calderón.
29 de agosto: Asume la nueva Legislatura y por primera vez la izquierda es la segunda fuerza en la Cámara Baja.
1 de septiembre: La izquierda toma la tribuna del Congreso e impide al presidente Vicente Fox dar su último informe de gobierno en protesta por un «fraude».