La OTAN no cumplirá con su objetivo de transferir la responsabilidad de la seguridad a las fuerzas afganas a menos que provea cientos de instructores especializados adicionales, dijo el martes el jefe de la misión de entrenamiento. Llevar el número de policías y soldados afganos a 305.000 el próximo año es fundamental para el plan […]
La OTAN no cumplirá con su objetivo de transferir la responsabilidad de la seguridad a las fuerzas afganas a menos que provea cientos de instructores especializados adicionales, dijo el martes el jefe de la misión de entrenamiento.
Llevar el número de policías y soldados afganos a 305.000 el próximo año es fundamental para el plan de Estados Unidos y la OTAN de pasar el control a las fuerzas locales con el fin de que las tropas occidentales finalmente puedan emprender la retirada.
El teniente general William Caldwell dijo que el desgaste en el Ejército y la policía afganos debido, entre otras cosas, a la deserción y las bajas, implica que se necesitan 133.000 nuevos reclutas para incrementar el número total de fuerzas en 50.000 hombres.
Caldwell señaló que las carencias entre el cuerpo policial, sobre todo las fuerzas paramilitares, eran agudas.
«Necesitan desesperadamente más especialistas en entrenamiento», dijo en una rueda informativa en Bruselas. «Si nuestros requerimientos no son cumplidos a tiempo (…) la transición se va a demorar», agregó.
Caldwell sostuvo que desde que la OTAN asumió la responsabilidad de entrenar a las fuerzas armadas el año pasado, se había logrado un progreso significativo y que alrededor de 70.000 reclutas se agregarán en el 2010.
El oficial señaló que también hay una fuerte necesidad de instructores para el personal de la fuerza aérea y médicos.
El desgaste en dos cuerpos del Ejército en el sur del país, que se enfrentaron duramente con grupos insurgentes, fue mucho peor del que debería haber sido, debido a la cantidad de víctimas y a la deserción.
«No se puede sostener una fuerza con ese nivel de desgaste por un largo período», dijo.
Caldwell indicó que se estaban aumentando los salarios de los policías y pagando asignaciones por el servicio en zonas particularmente peligrosas.
Con las víctimas occidentales en su mayor nivel desde que Estados Unidos inició la campaña para derrocar a los talibanes en el 2001, los estados de la OTAN están bajo presión doméstica para llevar de vuelta a sus soldados.
Fuente: http://lta.reuters.com/article/worldNews/idLTASIE68R13320100928