El radio de acción de las fuerzas armadas de EEUU no conoce límites. En nombre de a guerra «global» al terrorismo, los EEUU atacan por todos los rincones del mundo: de Iraq a Afganistán, de Siria a Somalia, de las Filipinas a Pakistán. Iraq, Afganistán, Filipinas y Somalia. Pese a que nuestros periódicos y telediarios […]
El radio de acción de las fuerzas armadas de EEUU no conoce límites. En nombre de a guerra «global» al terrorismo, los EEUU atacan por todos los rincones del mundo: de Iraq a Afganistán, de Siria a Somalia, de las Filipinas a Pakistán.
Iraq, Afganistán, Filipinas y Somalia. Pese a que nuestros periódicos y telediarios ya no hablen de ello, en Iraq y Afganistán los cazas estadounidenses F-15 y F-16 así como los bombarderos B-1 lanzan toneladas de bombas: una media diaria de 40 ataques aéreos en Iraq y 60 en Afganistán. Tampoco habla nadie de que las fuerzas especiales de EEUU estén empeñadas cotidianamente en el sur de Filipinas contra los grupos rebeldes islámicos locales relacionados con Al-Qaeda, ni de las operaciones de patrulla aéreo-navales en Somalia, que suelen incluir a menudo ataques aéreos selectivos (el último el pasado 1 de mayo).
Siria, pero sobre todo, Pakistán. Si bien es cierto que el ataque que llevó a cabo el domingo en Siria un comando de tropas EEUU aereotransportadas ha suscitado cierto clamor mediático (tampoco mucho a decir verdad), también lo es que nadie se escandaliza por la serie increíble de bombardeos estadounidenses en Pakistán: 32 ataques aéreos desde enero, 16 en los dos últimos meses. Bombardeos con misiles en su mayoría (además de una acción de comandos realizada el pasado 3 de setiembre) que sólo este año han provocado la muerte de 301 civiles, 36 terroristas y 18 militares pakistaníes. Islamabad protesta, lo cual no servirá para cambiar la desfachatez de los planes militares estadounidenses
Fuente: http://www.peacereporter.net/dettaglio_articolo.php?idc=&idart=12536