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La Cumbre de los Pueblos en Mar del Plata y el ascenso de las luchas obreras en América Latina

Fuentes: Aballarde Rojo

Las grandes jornadas de protesta y Paro Nacional en Argentina contra la presencia de George Bush y contra la Cumbre misma (4 – 6 de noviembre), dejaron un saldo muy halagador para las luchas obreras y democráticas en el continente. Paralela a la Cumbre de los poderosos con el repudiado y despreciable magnate petrolero que […]

Las grandes jornadas de protesta y Paro Nacional en Argentina contra la presencia de George Bush y contra la Cumbre misma (4 – 6 de noviembre), dejaron un saldo muy halagador para las luchas obreras y democráticas en el continente. Paralela a la Cumbre de los poderosos con el repudiado y despreciable magnate petrolero que funge de inquilino de Casa Blanca, se realizó también en Mar del Plata la Cumbre de los Pueblos, antecedida por el Foro Sindical de Las Américas. Para orgullo de todos los trabajadores del mundo, es incuestionable la participación decisiva de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), tanto en la convocatoria como en la organización de las jornadas de combate proletario en Mar del Plata y en toda la extensa geografía argentina.

El magno evento del sindicalismo clasista, solidario y democrático convocado por la combativa CTA contó con la participación activa de más de 400 delegados de todo el continente.

En la clausura del Foro, el veterano dirigente sindical argentino Víctor de Gennaro, Secretario General de la CTA, recibía una gran ovación mientras expresaba sentirse «con emoción, con alegría, y también con responsabilidad por tener a tantos compatriotas americanos con nosotros, y de la clase trabajadora». Se refirió además a la gran importancia de este Foro, ya que «estamos discutiendo alternativas [porque] la comunicación imperialista y oligárquica machaca todos los días sobre nuestras cabezas, sobre nuestros corazones y sobre nuestras tripas. Acerca de los logros del encuentro, declaró: «Hay ya un núcleo central de la construcción de alternativas: la disputa por el sentido. Por eso, yo quiero recuperar, una y otra vez, que si podemos discutir alternativas es porque pudimos frenar la consolidación del proyecto imperial. Otra humanidad es posible, otro modelo es posible, otro sistema es posible, otra Latinoamérica es posible, otra sociedad es posible, y empezamos un tránsito diferente que hizo estallar por los aires a esos que querían firmar el ALCA (Acuerdo de Libre Comercio de Las Américas), en el 2003. Y hoy tenemos que reivindicar que no existe el ALCA -que iba a empezar a funcionar el 1 de enero de 2005- producto de esa lucha de los pueblos. Y eso hay que recuperarlo, porque partimos de nuestra capacidad de poder y resistencia». Al cerrar el discurso, los delegados sindicales le gritaban a De Gennaro: «Unidad de los trabajadores, y al que no le gusta, se jode, se jode».

Al explicar el repudio del pueblo trabajador argentino a la visita de George Bush a la Argentina, De Gennaro puntualizó: «El señor que viene el 4 de noviembre nos humilla; el ser que viene el 4 de noviembre es la representación del genocidio de la humanidad, y nos humilla que esté acá… Lo que hizo que hubiera vallado, zona de exclusión, es el señor que trae la muerte. Nosotros tenemos que construir la vida, porque esa es la contradicción hoy». Y ustedes -continuó- nos van a permitir compartir, por su presencia y compromiso, porque el 4 de noviembre, además de gozar los miles y miles que vamos a marchar en Mar del Plata, vamos a ser millones los argentinos que vamos a embanderarnos, a parar y a movilizarnos en el país. Porque cuando estemos caminando por acá, va a haber un grupo de habitantes de La Quiaca (Jujuy, Argentina), que van a ir a cortar el puente internacional para abrazarse con los compañeros de Villazón (Bolivia)». Sin duda, con ese abrazo de representantes de la CTA y la Central Obrera Boliviana, destacado en la voz de De Gennaro, se reaviva como nunca la solidaridad de clase entre los trabajadores del mundo. En las cumbres andinas, nuestros hermanos de clase argentinos y bolivianos nos dicen: Entre los trabajadores no hay fronteras. ¡Proletarios de todos los países, uníos!

Aballarde Rojo es un periódico obrero de Puerto Rico.
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