Paideia comenzó a funcionar en enero de 1.978 en Mérida (Badajoz-España). Sus orígenes se encuentran en Fregenal de la Sierra y en su intento de Escuela en Libertad abortado por la Administración franquista. Su iniciativa vino de la mano de tres mujeres profesionales de la educación: Concha Castaño Casaseca, Mª Jesús Checa Simó y la […]
Paideia comenzó a funcionar en enero de 1.978 en Mérida (Badajoz-España). Sus orígenes se encuentran en Fregenal de la Sierra y en su intento de Escuela en Libertad abortado por la Administración franquista.
Su iniciativa vino de la mano de tres mujeres profesionales de la educación: Concha Castaño Casaseca, Mª Jesús Checa Simó y la salmantina Josefa Martín Luengo (la portavoz que responde a esta entrevista).
Desde 1978 a la actualidad, son ya 30 años de esta escuela libre que sigue mantiendo la misma ideología y las mismas finalidades.
Ateneo «Argumentando»: ¿Cuándo surgió la idea de crear «Paideia»?
Escuela Libre «Paideia»: La idea de crear Paideia surgió después de 1975. Cuando abortó la administración una experiencia de escuela en libertad que estaba realizando en Fregenal de la Sierra. Ante la imposibilidad de llevar a la práctica ese proyecto educativo en la escuela estatal y dado que la administración impedía mi actividad en cualquier escuela que estuviese, la alternativa fue iniciar una escuela libre, autogestionaria y antiautoritaria. Se inició el 9 de enero de 1978.
A.A: ¿Por qué crear una escuela libre?
E.L.P: Porque el sistema educativo español durante la dictadura era ancestral. Educaba para el fascismo, el sometimiento, la discriminación en todos sus aspectos, etc; y la educación debe tener como finalidad potenciar personas libres, solidarias, justas, responsables y felices y únicamente un cambio educativo podría potenciar una sociedad diferente. Y después de 40 años de dictadura, iniciar una escuela libre era la mejor opción.
A.A: ¿Qué obstáculos y problemas tuvisteis?
E.L.P: Las dificultades fueron muchas y todavía lo son. Hay que considerar que si vamos contra el sistema establecido, es obvio que las críticas, difamaciones y actividades en contra de la escuela han sido muchas. Pero las hemos sabido sortear y aquí estamos. Lo cierto es que ha habido épocas muy difíciles con un número de alumnado muy bajo y muchas dificultades económicas, y aunque estas siempre existen en una escuela libertaria, que no es apoyada económicamente por el movimiento libertario, lo cierto es que nuestro colectivo sigue manteniendo la escuela y su ideología.
A.A: El término paideia procede de la antigua cultura griega. Según la cual el objetivo de la educación es la de dotar al individuo de conocimiento y control sobre sí mismo y sus expresiones. ¿Cómo se manifiesta esto en la actualidad?
E.LP: Efectivamente la paideia griega supone la educación integral de la persona de una manera plástica, armoniosa, creativa y completa. En la actualidad el objetivo es el mismo. Educar es facilitar los procesos de evolución y maduración de la infancia, adolescencia y juventud, para que la persona se construya de forma autónoma, libre, igualitaria y solidaria con el resto de la humanidad; lo cual haría cambiar la sociedad y la vida. Cierto es que para cambiar esta sociedad, la educación libertaria tendría que poder actuar sin influencias capitalistas, fascistas, religiosas, etc; y que en la actualidad como esas influencias existen, las personas que se construyen suponen un avance, un puente hacia una sociedad mejor.
A.A: ¿Qué es la pedagogía libertaria?
E.L.P: Pedagogía es una ciencia que se apoya en el arte de educar que tiene como todo proyecto educativo una ideología en la que se sustenta, ya que cuando se educa siempre se educa con una finalidad; y la finalidad de la pedagogía libertaria es facilitar la construcción de personas libres, responsables, autónomas, igualitarias, justas, no violentas y felices.
La pedagogía libertaria rompe con la escuela tradicional en todos sus aspectos. En primer lugar la asamblea general que se forma por todas las personas de la escuela es la encargada de autogestionar la actividad y la vida en la escuela; allí se neutraliza la autoridad adulta y se sustituye por el consenso entre todas las personas del colectivo. La autogestión supone distribuir el tiempo, las actividades, el trabajo, los talleres, el ocio y las relaciones interpersonales e intergrupales, las cuales se apoyan en los valores de la anarquía que van a potenciar una convivencia diferente a la establecida en nuestra sociedad. Las responsabilidades de la convivencia y la vida en la escuela son asumidas por todos sus componentes cada cual según sus posibilidades, ejerciendo la ayuda mutua y la solidaridad; resolviendo los conflictos de forma dialogada y no violenta, evitando la competitividad y facilitando la cooperación respetando las diferencias individuales y grupales y estableciendo una relación entre gente adulta y menor de igualdad y compañerismo. No existen los exámenes y por lo tanto no existe la discriminación. Intentando que la igualdad se dé al máximo y actuando sobre las influencias que el sistema ejerce constantemente. La responsabilidad de cada persona es tanto individual como colectiva, sin que ninguna de las dos opciones mutile o ahogue la otra. Y con todo la Pedagogía libertaria se somete constantemente a crítica y autocrítica, trata de mantener una actividad de investigación y formación constante para evolucionar y no quedarse estancada, ya que cada grupo de alumnado es distinto, cada edad que se inicia es diferente y por ello los cambios deben ser constantes para responder a las necesidades presentes tanto individuales como colectivas.
A.A: ¿Cómo organizar una escuela libre?
E.L.P: Para organizar una escuela libre se ha de contar con una serie de personas que tengan clara su ideología y que tengan una formación pedagógica acompañada del arte de educar; que estén dispuestas a trabajar mucho y a cobrar poco, a no aceptar el proteccionismo estatal en subvenciones y ayudas y que cuente con el colectivo solidario como base para poder realizar su actividad. Que se autoilusione constantemente porque cree que su lucha es la de facilitar la construcciones de unas mentes diferentes para que inciden en la sociedad cambiando las formas de relación y de lucha.
A.A: ¿Quiénes forman el Colectivo «Paideia»?
E.L.P: El Colectivo «Paideia» está formado por personas que trabajan en la escuela a tiempo completo y otras que trabajan en otros lugares y que se incorporan a la escuela para seguir la dinámica educativa, a la vez que apoyan económicamente a la escuela que siempre es deficitaria, porque las aportaciones de padres y madres no pueden ser altas para que puedan acceder a ella todas las clases sociales. Ya que la escuela cuanta con las aportaciones de las que hemos hablado, de compañeros y compañeras que trabajan en otro sitios y con las aportaciones de algun@s compañer@s que ayudan económicamente a la escuela en determinadas situaciones. Ya que en la actualidad el movimiento libertario no apoya las escuelas libertarias como hicieron en el pasado.
A.A: ¿Qué criterios se siguen para admitir a los alumn@s?
E.L.P: Cuando alguien va a pedir información sobre la escuela y siempre ya conocen algo de ella, se les explica ampliamente el proyecto, se aclaran las dudas y se les dice que las criaturas no pueden ir a actividades extraescolares fuera de la escuela porque ello iría contra la igualdad de clases. No deben recibir formación religiosa alguna ya que nuestra ideología es atea y la formación religiosa iría directamente en contra de la no autoridad y la libertad de las personas y deben respetar el proyecto que presentamos, colaborando mutuamente para facilitar la educación de las criaturas. No admitimos y generalmente no van, l@s hij@s de los cuerpos represivos y policiales o de quienes no acepten no dar formación religiosa a sus criaturas.
A.A: ¿Cómo es vuestra metodología de enseñanza?
E.L.P: Nuestra metodología es no autoritaria, tratando de que las criaturas aprendan a aprender, facilitando sus procesos de maduración personal e intelectual. El aprendizaje es personalizado y cada niñ@ satisface sus necesidades e intereses tanto individualmente como colectivamente. No existen exámenes, ni notas, por lo que la competición se anula y se respeta el ritmo de cada un@. Cuando las criaturas aprenden después de un tiempo de compromiso que se han marcado, exponen lo que han aprendido a sus compañer@s para que a su vez lo aprendan o susciten nuevos intereses. Los talleres son elegidos en la asamblea y el trabajo individual lo reclama cada persona según lo que desea aprender. El aprendizaje lo realizan de forma no memorística, desarrollando estrategias de aprendizaje diversas. Poniendo en práctica un aprendizaje autorregulado.
A.A: ¿Qué tipo de responsabilidad tienen las madres / padres?
E.L.P: Los padres-madres tienen la responsabilidad de aceptar el proyecto que presentamos y colaborar con él para que sus hij@s encuentren las menos incoherencias posibles, aprendiendo a ser no autoritarios y dialogantes con ell@s, tratando de comprenderl@s y ayudarlos a madurar y a ser personas libres y felices.
A.A: ¿Cómo resolvéis los conflictos?
E.L.P: Los conflictos se resuelven de forma dialogada entre las personas que los tienen apoyadas por otras que ayudan a objetivar la situación y darles soluciones. Generalmente hay un pacificador o pacificadora o una comisión de conflictos que ayuda en estas situaciones, pero generalmente son más personas las que se reúnen para ayudar a resolver el problema. Siempre en un clima de tolerancia, comprensión y aceptación, para evitar sentimientos de culpabilidad, ya que todas las personas cometemos errores. Un error se subsana reconociéndolo y cambiando la actitud que lo ha generado.
A.A: ¿Cómo veis el tema de la enseñanza de idiomas?
E.L.P: Pensamos que es un tema conflictivo, porque, por ejemplo nosotr@s estamos en contra de potenciar un idioma imperialista como el inglés, pero por otro lado las criaturas demanda este taller por las presiones que reciben del exterior y porque al continuar después el sistema educativo estatal, lo van a necesitar. Pero los talleres de inglés los suelen demandar a partir de los 11- 12 años, antes ese interés no existe, pero no es una actividad que se demande y trabaje como otros, por ejemplo la historia, la lengua o las matemáticas.
A.A: ¿Tenéis y qué opináis de las actividades extraescolares?
E.L.P: Como ya hemos indicado antes, estamos en contra de ellas. Primero porque pensamos que las criaturas ya tienen una jornada escolar suficientemente amplia y deben pasar cierto tiempo con sus progenitores y en nuestro caso porque las actividades extraescolares potencian una forma de enseñar-aprender contraria a la nuestra. Suelen ser competitivas, autoritarias o violentas, justo aquello que pretendemos erradicar.
A.A: ¿Cuál es la situación actual de vuestra escuela?
E.L.P: En la actualidad la escuela se encuentra en un momento mejor que el de hace algunos años, ya que el número de alumnado se ha incrementado; además apoyamos su déficit con una acampada autogestionaria para gente joven en agosto y un curso de educación libertaria a primeros de septiembre. Tenemos, como veis más trabajo, pero así difundimos más nuestra ideología-pedagogía y paliamos aspectos de carácter económico. Pensamos que va bien y nos sentimos satisfech@s por ello.
A.A: ¿Qué opináis del movimiento educativo libertario en el Estado español?
E.L.P: Creemos que últimamente se está recuperando un poco el interés y trascendencia de la educación y la cultura libertaria, tan importante en otros tiempo, pero todavía el movimiento educativo español no está apoyado por el movimiento libertario en general. Antes allí donde había un sindicato cenetista, había un Ateneo cultural y una escuela racionalista; eso todavía no se ha recuperado y las iniciativas en la educación libertaria no se llevan a cabo porque no existe este apoyo y otras como la nuestra tiene y ha tenido muchas dificultades para sobrevivir por ese mismo motivo. Seguimos pensando que mientras no se cambien las cabezas no se va a poder evolucionar esta sociedad y ello necesita obligatoriamente de la educación libertaria, ya que es una alternativa válida y eficaz para avanzar en este mundo caótico e insolidario.
Presentación del nuevo libro de la Escuela Libre Paideia.