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Entrevista al periodista uruguayo Raúl Zibechi

«Lo que va a cambiar al mundo son las prácticas locales, ese es el desafío que tienen hoy los movimientos sociales»

Fuentes: Rebelión

La siguiente entrevista realizada al periodista uruguayo Raúl Zibechi, fue realizada el 28 de Diciembre del 2008 en el Lienzo Charro del Frente Popular Francisco Villa Independiente (FPFVI) durante el tercer día de actividades del Festival Internacional de la Digna Rabia. Raúl Zibechi participó en la mesa redonda llamada » Los Otros Caminos: Otra historia, […]

La siguiente entrevista realizada al periodista uruguayo Raúl Zibechi, fue realizada el 28 de Diciembre del 2008 en el Lienzo Charro del Frente Popular Francisco Villa Independiente (FPFVI) durante el tercer día de actividades del Festival Internacional de la Digna Rabia. Raúl Zibechi participó en la mesa redonda llamada » Los Otros Caminos: Otra historia, Otra política», que también contó con la participación de John Holloway, Felipe Echenique, Francisco Pineda, Raúl Zibechi Olivier Besacenot y Sergio Rodríguez Lascano.

¿Como podrías definir este Festival Mundial de la Digna Rabia, un Festival promovido por los Zapatistas y en el que han participado decenas de organizaciones tanto nacionales como internacionales?

Es un encuentro entre grupos, colectivos y movimientos. Un espacio de intercambio, de conocimiento y de aprendizaje mutuo que lamentablemente en Sudamérica tenemos pocos. Hay lugares en donde existen diferentes movimientos y los lugares para intercambiar experiencias no son muy comunes. Esto es eso, una amplia plataforma, un espacio en donde los movimientos, los grupos, aunque sean pequeños o grandes dialogan en pie de igualdad. Los grupos dialogan unos iguales a los otros, esos es muy importante, me parece que sin estos espacios no vamos a poder avanzar.

Están por cumplirse 15 años del surgimiento del EZLN, un movimiento que construye su autonomía y que se niega a negociar o tener algún vínculo con el gobierno ¿Cual es tu opinión al respecto?

Mencionaba hoy en la charla que nuestros movimientos están muy golpeados por todos estos planes sociales, como es la Bolsa Familia, etc. El Zapatismo a tomado otro camino, el de no tener vínculos con el Estado. Yo no se si nosotros podemos hacer lo mismo, me parece que es muy difícil, pero esta bueno que ellos lo hagan y que nos enseñan que no todo tiene que pasar por el acuerdo con el gobierno, por los subsidios, es un camino muy importante.

¿Haciendo un mapeo sobre los diferentes movimientos sociales que existen en nuestro continente, en tu opinión, cual es el desafío que estos deben enfrentar ante este escenario neoliberal que se muestra nada prometedor?

Un desafío es no quedarse solos, si no de tejer alianzas vínculos no electorales, relaciones solidas con otros movimientos en cada país, en cada región y lugar. Por que el hecho de que existan pequeños movimientos locales es muy importante, en nuestras ciudades hay muchos de ellos, pero cada uno va medio por su lado. Ser capaces de unirnos, sin crear una estructura jerárquica, una coordinación horizontal, es muy importante. Y lo otro, es que seamos capaces de construir realidades alternativas, no esperar a tener el gobiernos, a tener el poder, construirlas en los hechos, por que el Movimiento Sin Tierra (MST) en Brasil tiene la fuerza que tiene, es porque hay 5.000 asentamientos donde tienen la tierra, donde producen, comen, hacen las escuelas, la salud, eso es una fuerza social importante, es mentira que las fuerza social pueda surgir de los sindicatos, estos lo único que buscan es insertarse en el sistema de la mejor manera posible, esta bien, pero eso no va a cambiar el mundo, lo que va a cambiar al mundo son las practicas locales y me parece que ese es el desafío que tienen hoy los movimientos sociales.

¿Observamos que a pesar de las movilizaciones, de las marchas, los foros, las jornadas, las ocupaciones, la represión y la criminalización continua siendo una constante hacia los movimientos?

Por supuesto, alguna directamente por parte del Estado, como en Perú, Colombia, otra de forma más sutil, un gobernador un alcalde. En Brasil, el Movimiento de los Trabajadores Sin Techo (MTST) han sido reprimidos, en Argentina los Piqueteros, todos los grupos que critican, que rompen. La criminalización de la protesta es una realidad, frente a eso no hay mas que enfrentarla, buscar alianzas, apoyos, pero hay que contar que el sistema hoy va a criminalizar la protesta, eso no es algo que vamos a elegir o no, lo van a hacer nos guste o no nos guste y hay que estar preparados para eso.

¿Se conoce sobre los movimientos indígenas en Ecuador, Bolivia, Chile y México, los Piqueteros que acabas de mencionar en Argentina, las ocupaciones del MST en Brasil, pero se conoce muy poco sobre las experiencias de los movimientos en Uruguay, que pasa en tu país?

En Uruguay tenemos movimientos muy institucionalizados como la Convención Nacional de Trabajadores ( CNT) y la Central Única de Trabajadores (CUT). Uruguay es el único país de Sudamérica donde la hegemonía la sigue teniendo el movimiento sindical, no hay otros movimientos importantes y eso se ha agraviado con la llegada al gobierno del Frente Amplio, porque los sindicatos tienen mas fuerza. La característica principal de Uruguay, es que es un país con poca pobreza relativa y los movimientos como los Sin Tierra, los Sin Techo, los Piqueteros, los movimientos de los pobres en Uruguay están creciendo muy lentamente pero todavía no tienen fuerza para expresarse con vigor, no se que va a pasar pero en Uruguay todavía el Estado tiene mucha iniciativa y es muy fuerte

¿Y las elecciones del próximo año?

Si tenemos elecciones, lo mas probable es que gane el Frente Amplio, no me imagino otro escenario, la disputa dentro del Frente es saber quien gana, si José Mujica o Danilo Astori. En Uruguay, se esta discutiendo quien es el candidato a presidente, pero lo que no se esta discutiendo es que política va a tener y eso es un problema, un problema gravísimo, porque me temo que gane quien gane de los dos, va a continuar con la misma política. Este es el momento, en el cual los movimientos tienen que plantearse, exigirle a los candidatos de izquierda que definan que política van a hacer, si van a hacer un tratado de libre comercio con Estados Unidos o no, si van a continuar con el neoliberalismo como lo han hecho todos los gobiernos o si van a intentar romperlo. El neoliberalismo, tiene un eje en la forestación y en la celulosa, como Aracruz y esto lo apoyan los dos candidatos, entonces estamos en un problema muy serio.

El año pasado Fernando Lugo, un ex obispo ganó las elecciones en Paraguay. ¿Cómo vez la actuación de los movimientos campesinos en ese país?

Ahora yo estoy colaborando con los movimientos campesinos en Paraguay, en escuelas de formación. Creo que en Paraguay, Lugo gano gracias a los movimientos campesinos y creo que aunque no va a poder hacer gran cosa, porque tiene una minoría en el gobierno, me parece que tiene 3 diputados de 100 y en el gabinete el grupo de Lugo Tekojoja es minoritario, pero aun así, los movimientos campesinos están luchando y ocupando tierras muchas de los brasiguayos que son los dueños de la soya, me parece que los movimientos no se van a rendir, van a seguir luchando.

¿Qué opinas sobre la reciente experiencia en Colombia de la MINGA, esta movilización indígena nacional en uno de los países que tiene a uno de los presidentes más conservadores del continente?

En Colombia, el grupo indígena más importante son los Nasa, que están en el Cauca, una zona de guerra. Son unos 200 mil, pero tienen una gran cohesión interna, tienen poder, tiene tierra, cabildos, su propio territorio y han sido capaces de avanzar y de tejer alianzas con otros sectores sociales, con otros pueblos indígenas, con afro-colombianos. Hoy están en un proceso de construcción muy interesante, de una alianza de movimientos sociales. Hoy en día para mí, la esperanza de Colombia de frenar la guerra, de eliminar esa polarización tan negativa son los pueblos indígenas y la MINGA fue la ruptura. Llegar a las ciudades como Cali y Bogotá, al centro del poder, han roto el cerco militar, no solo el material si no ideológico y ahí creo que es un proceso muy interesante en Colombia.