Los residentes británicos Jamil El-Banna y Omar Deghayes se sintieron cruelmente decepcionados cuando al llegar a Inglaterra con su libertad recién restaurada, justo antes de Navidad, y después de haber pasado cinco años de sufrimiento en el campo de detención de Guantánamo, les arrestaron de nuevo a petición del Gobierno español con una demanda de […]
Los residentes británicos Jamil El-Banna y Omar Deghayes se sintieron cruelmente decepcionados cuando al llegar a Inglaterra con su libertad recién restaurada, justo antes de Navidad, y después de haber pasado cinco años de sufrimiento en el campo de detención de Guantánamo, les arrestaron de nuevo a petición del Gobierno español con una demanda de extradición a España por presuntos cargos de terrorismo.
Las autoridades estadounidenses y británicas habían dejado claro con la puesta en libertad de estos dos hombres que no suponen ninguna amenaza a la seguridad; de lo contrario, su liberación hubiera sido inconcebible. La evidencia en la que España ha basado su argumento es muy dudosa (sospechosa) e inconsistente.
De acuerdo con el Convenio Europeo de Extradición, las autoridades británicas no han tenido otra opción que la de actuar en base al requerimiento de otro estado europeo, llevando a los acusados ante el juzgado. Afortunadamente, cuando éstos fueron llevados ante la Corte de Magistrados de Horseferry Road, el juez de distrito Timothy Workman, con sabiduría y compasión, decidió dejarles en libertad bajo fianza, a la espera del juicio que se celebraría el año venidero.
Por poco convincente que pueda ser este caso y sea cual sea el resultado del fallo de la justicia española, no puede haber ninguna justificación para someterles a más sufrimiento con otro proceso legal prolongado e incierto después de todo lo que han pasado hasta el momento.
Pedimos al Gobierno español que abandone su desconsiderada persecución contra estos hombres. Ya han sufrido suficiente.
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Harold Pinter CH, Baroness Helena Kennedy QC, Sir Geoffrey Bindman, Victoria Brittain forman parte del grupo de apoyo a los encausados