Arabia Saudí se está preparando para admitir la muerte del periodista saudí Jamal Khashoggi en el curso de un interrogatorio fallido, han asegurado tanto la CNN como el New York Times, poco después de que el presidente estadounidense Donald Trump especulara con «asesinos que van por libre» como los responsables del crimen. Trump ha despachado […]
Arabia Saudí se está preparando para admitir la muerte del periodista saudí Jamal Khashoggi en el curso de un interrogatorio fallido, han asegurado tanto la CNN como el New York Times, poco después de que el presidente estadounidense Donald Trump especulara con «asesinos que van por libre» como los responsables del crimen.
Trump ha despachado al secretario de estado Mike Pompeo para reunirse con el Rey Salmán y tratar el caso que está haciendo añicos las relaciones entre ambos países.
Citando dos fuentes anónimas, la CNN informó el lunes de que Arabia Saudí está preparando un informe en el que reconocería que Khashoggi murió a consecuencia de un interrogatorio que no se desarrolló según lo previsto.
El New York Times, por su parte, anunció que el príncipe heredero de Arabia Saudí habría aprobado un interrogatorio o un secuestro del disidente. Sin embargo, continuaba el periódico, las autoridades saudíes protegerían al príncipe culpando a un agente de los servicios de inteligencia del fracaso de la operación.
La desaparición del periodista ha provocado una oleada de indignación contra Arabia Saudí, el principal exportador de petróleo a nivel mundial. Varios medios de comunicación y empresarios han anunciado su retirada de una conferencia de inversores prevista para este mes.
Los organizadores garantizaron ayer que la conferencia tendrá lugar a pesar de ello; sin embargo, Riad canceló una recepción diplomática anual que iba a celebrarse esta semana en Washington.
Las autoridades turcas aseguran contar con una grabación de audio que demostraría que Khashoggi murió dentro del Consulado. Estas pruebas han sido compartidas tanto con Arabia Saudí como con EE.UU.
Arabia Saudí ha rechazado de forma vehemente cualquier conocimiento sobre el paradero de Khashoggi, y ha denunciado que todo es una «mentira». «El rey ha negado de forma firme tener cualquier conocimiento de ello,» declaró Trump tras haber telefoneado con el monarca. «Él no sabía nada, quizá -no es mi intención saber qué es lo que estaba pensando, pero es como me sonó a mí- quizá es que los asesinos iban por libre. ¿Quién sabe?» aventuró Trump.
El presidente estadounidense no proporcionó pruebas que apoyasen esta teoría, que le valió las críticas de los diputados demócratas,
«He escuchado esa ridícula teoría de los ‘asesinos por libre’, que es exactamente cómo lo presentarían los saudíes,» escribió en Twitter el senador demócrata Chris Murphy. «Lo que es increíble es que hayan sido capaces de reclutar al presidente de los EE.UU. como su relaciones públicas para defenderla,» agregó.