El 4 de octubre de 2005, el presidente George W. Bush promulgó una ley para la construcción de un muro sobre la frontera que separa a los Estados Unidos de México, con una longitud de 1,200 Kilómetros, casi cerca del 40% de los 3,200 que delimitan a ambos países. Esta empresa no es realmente una […]
El 4 de octubre de 2005, el presidente George W. Bush promulgó una ley para la construcción de un muro sobre la frontera que separa a los Estados Unidos de México, con una longitud de 1,200 Kilómetros, casi cerca del 40% de los 3,200 que delimitan a ambos países. Esta empresa no es realmente una noticia sorprendente. Es un deseo expresado desde hace años por un gran número de organizaciones que luchan contra la inmigración clandestina proveniente de los países latinoamericanos, en particular de México. Los americanos tendrán su propio muro, el «muro americano de la vergüenza» y que se trata, de hecho, de la expresión de un proceso de militarización de la frontera entre los dos países.
La construcción de un nuevo muro, o más aún, de la continuación de su edificación (una parte de 100 Kilómetros está ya construida en la región de San Diego),ilustra el aislamiento creciente de los americanos del resto del mundo, aislamiento que es no solamente ideológico sino también físico. Con un sistema de vigilancia eficaz en la frontera Canadiense, los americanos se sentirán en adelante dentro de una fortaleza como lo buscaron las poblaciones de la Edad Media, con la construcción de fuertes y cinturones fortificados.
El muro que separa San Diego de Tijuana se parece al de una prisión (Foto 1 y Figura 1). Yo he estado precisamente ahí para observarlo, en 2005 durante un recorrido en dirección de Baja California. Me parece infranqueable, sin embargo, según dice Pascal Riche, millares de personas han atravesado, en comparación de un poco más de medio millón que han intentado hacerlo en este sector. Según el mismo autor, «la primera sección que fuera construida hace algunos años, hoy oxidada, está reforzada por una segunda barda de malla de 4 m. de alto. Y mientras que esto sucede, un camino entre las dos bardas deja paso a los vehículos «4 x 4» de los guardas de la Patrulla Fronteriza…»El Muro ha matado a 4,000 personas en 11 años»… «La historia ha demostrado que los muros no han dado resultado jamás. Dentro de diez o quince años, los americanos tendrán vergüenza de lo que ellos han hecho», cita el padre Luis Kinzierski, de la Colonia Postal de Tijuana («Libération», 4 de marzo de 2006).
Foto 1. Imagen de satélite que muestra la frontera entre California y la Baja California. Se puede ver la linea de la frontera que separa San Diego de Tijuana.
Fuente: http://earthobservatory.nasa.gov/NaturalHazards/natural_hazards_v2.php3?img_id=10764
Foto 2. El muro entre San Diego y Tijuana. Vista a partir del aeropuerto de Tijuana
Fuente : http://es.wikipedia.org/wiki/Imagen:Tijuana1.jpg
Al muro americano se agrega otro inconcluso, al que se llama la «barda de seguridad», construida por el gobierno israelita alrededor de Cisjordania y de Jerusalén (Figura 1). Este es el «Muro de la separación o del Apartheid» para los Palestinos. Así, «Israel anexa unilateralmente una parte substancial de Cisjordania y refuerza los retenes militares alrededor de las ciudades palestinas, encerrando eficazmente a sus habitantes» (M. Burbacher, 2002). Según R. Faraj, «De hecho no se trata de una simple «barda», ni de un simple «muro», sino de un dispositivo extraordinario de vigilancia, de una parte y de la otra, una zona de seguridad de 30 a 100 metros de ancho», (R. Farai, 2005). Para unos es la «seguridad», para los otros es el confinamiento, el empobrecimiento y la muerte.
Figura 1. El mapa a la derecha muestra el territorio que está delimitado por la barda de «seguridad» de Israel.
Fuente : http://www.stopthewall.org/activistresources/793.shtml
Se sabe también que los americanos están contemplando construir un muro sobre la frontera entre Siria e Irak con una longitud de 600 Km. (Foto 3). Ese proyecto se concibió dentro de la locura del muro del Separatismo. Esto permitirá transformar a Irak en otra prisión a cielo abierto que los americanos podrán más tranquilamente controlar a partir de lo que se puede considerar como miradores gigantes; las cuatro bases militares de las que ellos disponen sobre la frontera de Irak con Irán, Siria, Jordania, y Arabia Saudita (Iraqamsi.org, 2006 dentro de HYPERLINK «http://www.mondialisation.ca» www.mondialisation.ca ).
Foto 3. Esta imagen de satélite nos hace ver la frontera que separa Siria con Iraq.
Fuente : http://earthobservatory.nasa.gov/NaturalHazards/natural_hazards_v2.php3?img_id=13363
Cuando el Muro de Berlín fue desmantelado, y durante su apertura el 9 de Noviembre de 1989, la humanidad se sintió saneada. El tiempo de los muros y las barreras era, desde momento, cosa del pasado. La caída de la Cortina de Hierro (Figura 2) fue, en esa época, el preludio de una era de paz y cooperación, no solamente entre el Este y el Oeste, sino también entre el Norte y el Sur. Había muchas esperanzas de sacar provecho de los dividendos de la paz. Desafortunadamente, durante los años 90, los conflictos armados, los conflictos fronterizos, y aún más, los conflictos internos, han continuado flagelando varias regiones del mundo, en particular el continente Africano, cada vez más empobrecido por la explotación de la que es objeto. La tasa de pauperización de centenares de millones de habitantes se ha acentuado en los países ya de por sí más pobres. (Chossudovsky, 2004).
Figura 2. Mapa de Europa separada por la Cortina de Hierro entre el mundo comunista y el mundo «libre»
Fuente: http://fr.wikipedia.org/wiki/Image:EiserneVorhang.png
¿Qué nos reservan entonces esas iniciativas enfocadas a edificar muros a los que se busca eliminar desde hace decenios, para deshacer las barreras entre los Estados y concluir así acuerdos económicos y convenios de cooperación para el desarrollo, dentro del conjunto mundial, y terminar con el Muro más difícil de desmantelar, aquél que separa el Norte de los «bien afortunados» del Sur de los empobrecidos? Desafortunadamente el inicio del Siglo XXI nos muestra que más que el Apartheid Norte-Sur se trata de una realidad ineludible que los países ricos no tienen ningún interés de eliminar.
Estos muros son la persecución del Norte de su hegemonía total, sobre el conjunto del Planeta. Ellos son el reflejo de una voluntad confesa de proseguir la explotación de los recursos planetarios para beneficio de los más ricos, y de aquellos y aquellas que les imitan y adulan.
Mientras la humanidad busca la seguridad por medio de la eliminación de los armamentos nucleares, creando por ejemplo; Zonas Libres de Armas Nucleares (ZLAN) y zonas de paz, áreas para la salvaguarda de la diversidad biológica, de las que se han establecido hasta hoy más de 100,000 incluidas terrestres y marinas, protegidas por las legislaciones y que cubren más de 20 millones de Kilómetros cuadrados (UICN y PNUMA, 2003), para detener el calentamiento global, así mismo para la lucha contra la desertificación y la erradicación de la pobreza, los Americanos quieren «asegurar» su seguridad construyendo muros y sistemas de vigilancia en sus fronteras y en el extranjero a partir de las 700 bases militares que tienen instaladas en todos los continentes, sin olvidar la protección del escudo espacial anti-misiles. Lo hacen así para ponerse al abrigo de aquellos a quienes explotan a escala mundial y que constituyen, a sus ojos, una amenaza potencial a sus intereses. Todos estos elementos no serán más que una ilusión, puesto que ellos continuarán sintiéndose asediados por todos lados, y este sentimiento constituirá de nuevo la justificación de sus intervenciones militares «preventivas».
Jules Dufour, Ph.D., es Presidente de la Asociación Canadiense para las Naciones Unidas (ACNU) /Sección «Saguenay-Lac-Saint-Jean», miembro del Círculo Universal de los Embajadores de la Paz, miembro del Consejo Nacional de Desarrollo y Paz.
Referencias
BRUBACHER, M. 2002. De l’antiterrorisme à la guerre. Le mur de la honte. Le Monde diplomatique, novembre 2002, pp. 20-24.
CHOSSUDOVSKY, M. 2004. Mondialisation de la pauvreté et nouvel ordre mondial. Montréal, Les Éditions Écosociété. 383 pages.
DUFOUR, J. 2004. La sécurité coopérative et les libertés à protéger. Texte d’une conférence prononcée dans les cadres du Congrès mondial de l’Institut international des Protecteurs du citoyen, Québec, le 9 septembre 2004. 23 pages.
FARAJ, R., 2005. Palestine. Le refus de disparaître. Montréal, Les Éditions de la Pleine Lune. 238 pages.
IUCN, UNEP et WCMC. 2003. 2003 United Nations List of Protected Areas. IUCN Publications Services Unit et UNEP World Conservation Monitoring Center. 44 pages.
Sitios Internet :
Les USA envisagent de construire un mur de 600 Km le long de la frontière syro-iraquienne :
HYPERLINK http://www.mondialisation.ca/index.php?context=viewArticle&code=20061005&articleId=3399
L’appel de la Haye pour la paix 1999 : HYPERLINK http://www.aieq.qc.ca/frame_publications.html http://www.aieq.qc.ca/frame_publications.html
La prévention et la résolution pacifique des conflits en Afrique : HYPERLINK http://www.aieq.qc.ca/frame_publications.html http://www.aieq.qc.ca/frame_publications.html
Zones de paix: HYPERLINK http://www.demilitarisation.org/Art.GSsA.%20VIII.version%20II.htm http://www.demilitarisation.org/Art.GSsA.%20VIII.version%20II.htm
Les murs et les lignes de démarcation dans le monde: HYPERLINK «http://www.20minutes.fr/articles/2006/10/17/20061017-actualite-internationale-Les-murs-et-lignes-de-demarcation-dans-le-monde.php
Artigo original em francês, 23 octobre 2006: http://www.mondialisation.ca/index.php?context=viewArticle&code=DUF20061023&articleId=3579
Traducido al español por el Dr Honorato Teissier Fuentes, Ph.D., profesor, Facultad de Sistemas, Universidad Autonóma de Coahuila, México.