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A las puertas del Foro Económico en Suiza

Respuestas ciudadanas contra un Davos impopular

Fuentes: Rebelión

A menos de dos semanas del inicio del Foro Económico Mundial de Davos (del 26 al 31 de enero) se multiplican las propuestas contestatarias y de movilización ciudadana para los próximos días en este país alpino. Una manifestación, programada a realizarse el sábado 22 en Berna, ya se convierte en tema de debate político nacional […]

A menos de dos semanas del inicio del Foro Económico Mundial de Davos (del 26 al 31 de enero) se multiplican las propuestas contestatarias y de movilización ciudadana para los próximos días en este país alpino. Una manifestación, programada a realizarse el sábado 22 en Berna, ya se convierte en tema de debate político nacional sobre el derecho o no a la protesta pública. Mientras tanto, miles de efectivos policiales y del ejército helvético serán movilizados en los días del evento internacional.

El *Ojo público sobre Davos* (*Mirada Ciudadana*), iniciativa que se opone al Foro Económico del mismo nombre, concederá este año premios-sanciones a las empresas multinacionales más irresponsables. Instala así una metodología novedosa y original de condena a los que destruyen al ser humano y al planeta.

La propuesta crítica promovida por la Declaración de Berna y Pro-Natura anticipa para el 26 y 27 de enero un seminario-debate en la estación turística alpina a pocos metros del centro de conferencias donde se reunirán los más poderosos del planeta. En el marco del cual serán anunciados los cinco ganadores de ese especial *galardón*.

El Foro Económico Mundial de Davos, que se realiza en la misma ciudad del Grisón entre el 26 y el 31 de enero próximos es uno de los eventos internacionales informales de más importancia. Reúne cada año a varios miles de empresarios y personalidades políticas de primer nivel, entre ellos numerosos jefes de gobierno y Estado. La «crema» del poder mundial debate ahí las grandes líneas estratégicas del modelo hegemónico. Y, adicionalmente, arregla negocios y fortalece sus entramados e intereses.

En los últimos años, Davos, es considerado por el movimiento alter-mundialista internacional como uno de sus símbolos antagónicos. El Foro Social Mundial de Porto Alegre, cuya quinta edición se reunirá en la capital de Río Grande del Sur en el mismo momento que el Foro Económico de este año, nació en el 2001 autoproclamándose como «el anti-Davos del Sur».

PREMIO A LAS TRANSNACIONALES MAS IRRESPONSABLES

En esta ocasión la Declaración de Berna y Pro Natura -dos conocidas ONG helvéticas- decidieron conceder cinco «Premios Ojo Público». Los mismos sancionarán a las empresas multinacionales que hayan cometido significativas irregularidades en las áreas de derechos humanos, derechos sindicales, medio ambiente y fiscalidad. El quinto, el del público, será atribuido directamente por los ciudadanos que voten por Internet entre el 11 y el 24 de enero a una página especial para el caso (www.evb.ch/publicsaward.htm)

Distintas organizaciones y movimientos sociales de diferentes países presentaron una lista de firmas transnacionales de primer orden que aparecen como candidatas para recibir el «Premio a la Empresa Irresponsable».

Entre ellas: Bayer, BP, Danzer, Dow Chemical, Monsanto, Nestlé, Shell, Syngenta, Tchibo, Wal-Mart, Vodafone, KPMG, Stallion Garments etc. Directivos de algunas de las mismas estarán presentes en el Foro Económico de la ciudad alpina, aunque de hecho ninguno se desplazará al seminario alternativo para recibir el premio-sanción.

«Queremos ejemplificar con este premio cuantas empresas se comportan de forma irresponsable.Queremos despertar a la opinión pública para que abra los ojos, tome conciencia de lo que pasa y apoye una discusión de fondo» señaló a este corresponsal Sonja Ribi, responsable de las relaciones internacional del Pro Natura Suiza.

Este premio, es una especie de «cactus, a los malos alumnos.Promovemos el debate para que se mejoren las actitudes de esas empresas en cuanto al respeto de los derechos sindicales, humanos, ecológicos o el pago de una fiscalidad correcta». El fin último sería poder llegar -enfatiza Ribi- «a establecer reglas jurídicas internacionales y obligatorias que definan el comportamiento de las empresas transnacionales»

APORTE LATINOAMERICANO

De las 24 transnacionales candidatas al premio -luego de una consultación abierta a ONG del mundo entero- al menos cuatro han sido propuestas por organizaciones latinoamericanas o movimientos de solidaridad con ese continente.

Tal el caso de la «Bechtel Corporation», con sede en San Francisco (EEUU), 47 mil empleados , una facturación en 2003 de 16 billones de dólares y presencia en 25 países, entre ellos Bolivia. Según el «Centro para la Democracia» de ese país, dicha transnacional tuvo una responsabilidad directa en la propuesta privatizadora del agua a través de su subsidaria «Aguas del Tunari» lo que motivó la explosión social de abril del 2000 en Cochabamba.

Varias organizaciones helvéticas, entre ellas el «Grupo de Trabajo Suiza-Colombia», candidatearon para el premio a la multinacional de los alimentos Nestlé, con sede en Vevey, Suiza, argumentando violaciones de derechos humanos. Con 500 fábricas en 100 países, Nestlé logró en 2003 un beneficio neto de más de 5 billones de dólares sobre la base de una facturación oscilante en los 70 billones de dólares

En tanto el Programa de Aprovechamiento Integral de Recursos Naturales A.C (PAIR) de México junto con «Solidaridad directa con Chiapas» de Suiza, propusieron para el premio a «Conservation Internacional», firma norteamericana que actúa en el país azteca, argumentando violaciones al medio ambiente.

Así mismo, la «Asociación de Asistencia al Campesino» de Guatemala, anticipó la candidatura de Volcafé Holding Ltd., con sede en Winterthur, Suiza, propietaria de 21 empresas de importación-exportación y con una facturación en el 2003 en torno al billón de dólares norteamericanos. Según el organismo denunciante, Volcafé ha sistemáticamente pagado impuestos subevaluados que perjudican la economía de los países del Sur donde actúa. Como ejemplo: en Guatemala, en 2002, con 33 millones declarados de ventas pagó impuestos ridículos por 82 mil dólares estadounidenses. El año siguiente, sobre 27 millones declarados, su cotización al fisco fue de 62 mil dólares.

EL DERECHO A MANIFESTAR. Y EL MIEDO DEL PODER

Si este premio-sanción tiene un importante componente emblemático y sensibilizador, no menos significativo es el debate en Suiza, en la segunda semana de enero, en torno al derecho ciudadano de protestar contra Davos.

Militarizada Davos totalmente y como en situación de guerra en su última edición del 2004, con la experiencia de choques y tensiones, diversas organizaciones alter-mundialistas helvéticas solicitaron este año el permiso para realizar la manifestación nacional en la capital Berna, a varias decenas de kilómetros de ese centro turístico.

El gobierno de la municipalidad de Berna impuso condiciones inimaginables para la marcha del 22 de enero. Buscando fundamentalmente que la misma se realice en un parque alejado del norte capitalino (Allmend), totalmente despoblado y rodeado sólo por grandes autopistas y un estadio de fútbol en construcción.

La protesta en pocas horas de importantes sectores de la sociedad civil helvética -enviando incluso una carta pública al gobierno capitalino- obligó un cambio de rumbo de las autoridades que en las últimas horas aceptaron que la concentración se realice en la principal plaza capitalina en frente del palacio de gobierno, sede del ejecutivo y el legislativo. Pero sin derecho a la manifestación no-violenta en las calles céntricas tal como lo había solicitado el grupo organizador, quien se pronunciará en las próximas horas si accede o no a esas condiciones.

Davos es ya hoy un concepto irritante en este país europeo. Símbolo del poder absoluto, hasta hace algunos años. Paradigma de la resistencia alter-mundialista (el Foro Social Mundial y su «anti-Davos del Sur») desde el 2001; escenario de movilización y protesta juvenil .y, ahora, ejemplo de una fortaleza militarizada y de gobernantes paranoicos al borde de la «neurosis política».