Más de mil representantes de redes, movimientos y ONG del mundo entero se reunirán entre el jueves 17 y el domingo 20 de marzo en Ginebra. El Foro Alternativo Mundial del Agua (FAME en sus siglas en francés) es convocado por 150 redes internacionales y cuenta con el apoyo de movimientos sociales, sindicatos, ONG del […]
Más de mil representantes de redes, movimientos y ONG del mundo entero se reunirán entre el jueves 17 y el domingo 20 de marzo en Ginebra. El Foro Alternativo Mundial del Agua (FAME en sus siglas en francés) es convocado por 150 redes internacionales y cuenta con el apoyo de movimientos sociales, sindicatos, ONG del mundo entero. Representantes de legislativos de diversos países se suman para constituir una Red parlamentaria mundial por el agua.
Este Foro alternativo da continuidad a un evento anterior realizado en marzo del 2003 en Florencia, Italia, simultáneo al Foro oficial sobre el mismo tema convocado en aquel entonces por Naciones Unidas en Kyoto, Japón.
POR UN CONSENSO PRACTICO Y EFECTIVO
«Nos proponemos que de este encuentro de Ginebra salgan conclusiones bien concretas y aplicables» subraya en diálogo exclusivo Alberto Velasco, diputado cantonal ginebrino y presidente del comité de organización de FAME 2005 .
Las 2/3 partes de los habitantes del planeta no tienen acceso a instalaciones sanitarias y 1.500 millones de personas carecen de agua potable, enfatiza Velasco definiendo algunos de los grandes dilemas de la actual realidad planetaria.
«El agua es un bien no económico indispensable para la vida humana y no una mercancía más» enfatiza denunciando la carrera privatizadora del agua que se da en muchos países, alentada por las instituciones financieras internacionales tales como el Banco Mundial.
Dado este complejo entramado, sigue reflexionando, intentamos que FAME llegue a conclusiones muy concretas y realistas. «Para ello estructuramos el Foro sobre la base de cuatro principios fundadores», herederos de Florencia, que deben ser profundizados en los debates. El reconocimiento del agua como bien común planetario; la integración del derecho al agua en la legislación internacional; la implementación de una gestión democrática del agua y el financiamiento público a este vital líquido.
MODELO PUBLICO-PRIVADO: UN FRACASO
«El concepto del agua como bien no sujeto a la privatización tiene valor universal», expresa Velasco. Con respecto a la cooperación Norte-Sur «no debe promoverse el concepto de moda de contrapartes público-privado en los proyectos ligados al agua, tal como lo promueve el Banco Mundial», sostiene.
«En ningún caso se pueden aceptar beneficios sobre ese bien público» Recordando que en ninguna nación del Sur donde se quiso impulsar ese tipo de lógica «semi-privatizadora» basada en los compromisos entre sectores públicos y empresas transnacionales privadas, «se lograron buenos resultados». Los últimos conflictos vividos en Bolivia ejemplifican la inviabilidad de ese modelo, apunta.
COINCIDENCIA EN LA CRITICA
Visión con la cual concuerda Rosmarie Bär, de la Comunidad de Trabajo de las ONG helvéticas, activamente implicada en la convocatoria del Foro de Ginebra. «En la política al desarrollo, Suiza (ndr: y muchos países del norte) establece relaciones de contrapartes con grandes multinacionales que transforman ese bien común en mercancía comercial…y hacen depender el acceso al agua del poder de compra», subraya críticamente.
Apuntando, adicionalmente, «otra incoherencia». Se habla de un sistema de aprovisionamiento de agua descentralizado y controlado democráticamente por la población mientras que en la central del Banco Mundial, en Washington, Suiza (y otros países del norte) participa a la multiplicación de proyectos de grandes represas… «que violan los derechos humanos», apunta Bär.
Para Amnistía Internacional (AI), también entre los organizadores del evento ginebrino, «el acceso al agua debe ser un derecho humano de igual forma que el derecho a no ser objeto de tortura o el derecho a la libertad de expresión. Constituye una condición previa a la dignidad humana, a la salud y, finalmente, a la vida», completa Bruno Riesen, director de campañas de la sección helvética de AI.
Coincidiendo en la propuesta de promover una Convención Internacional de protección del derecho al agua, en el marco de las Naciones Unidas.
En vista de esta Convención como de un Contrato Mundial del Agua -tal como lo propone el ex – diputado europeo Riccardo Petrella, fundador del Grupo de Lisboa- un grupo de parlamentarios suizos, encabezados por Carlo Sommaruga convocan a un encuentro de parlamentarios en el marco de FAME. «Esperamos entre 70 y 100 participantes» de una veintena de países, precisa.
El objetivo es conformar «una red mundial de parlamentarios por el agua», tal como se acaba de acordar en el último Foro Social Mundial de Porto Alegre, concluye el consejero nacional.
HIJO DE PORTO ALEGRE
FAME es un «hijo legítimo» del proceso de construcción de redes temáticas que se da hoy a nivel planetario y en el cual el Foro Social Mundial de Porto Alegre viene jugando un rol clave de dinamizador.
El combate abierto contra cualquier intento de privatización del agua se encuentra entre las prioridades de FAME. En su interior se impulsan dos propuestas organizativas. El contrato mundial del agua, focalizado en la alianza de movimientos sociales, ONG, ejecutivos y legislativos locales. Y una Convención Internacional de Naciones Unidas que establezca, a nivel de Estados, el concepto del derecho al agua como un derecho humano esencial e innegociable. «Ambas iniciativas válidas y complementarias» concluye Velasco, presidente del Comité Organizador del Foro de Ginebra.
FAME: www.fame2005.org