El pueblo de Canadá le dijo NO a la derecha neoliberal y el «Partido Liberal» de centro-izquierda obtuvo la primera minoría en el parlamento, que con una alianza con el progresista «Nuevo Partido Democrático», le permitirá seguir en el poder durante los próximos cuatro años. Aun con la victoria, el número de curules liberales […]
El pueblo de Canadá le dijo NO a la derecha neoliberal y el «Partido Liberal» de centro-izquierda obtuvo la primera minoría en el parlamento, que con una alianza con el progresista «Nuevo Partido Democrático», le permitirá seguir en el poder durante los próximos cuatro años.
Aun con la victoria, el número de curules liberales se vio reducido considerablemente debido al escándalo sobre actos de corrupción en el manejo de cientos de millones de dólares en contratos con empresas de Québec y las promesas rotas del recientemente electo gobierno liberal en Ontario. Por su parte, la derecha neoliberal del «Nuevo Partido Conservador», no logró dar la pelea que predecían las encuestas y aunque pudo incrementar relativamente la cantidad de representantes que ya tenía en el parlamento, sufrió un duro revés en el voto popular.
Los grandes ganadores fueron el separatista «Bloque Quebequense» y el izquierdista «Nuevo Partido Democrático», los cuales lograron aumentar considerablemente su presencia en el parlamento gracias a un incremento sustancial del voto popular.
Estos resultados electorales le permitirá a la provincia francófona de Québec defender su soberanía y manejarse con mayor independencia de las decisiones del gobierno federal, y obligaran al «Partido Liberal» a formar una alianza con la izquierda del «Nuevo Partido Democrático» que garantice un avance progresista para Canadá.
NOTA: En sintonía con su campaña de manipulación y distorsión de la información, la cadena Unión Radio de Venezuela ha querido esconder el fracaso de la derecha neoliberal en Canadá al publicar que el «Partido Liberal de Canadá pierde el parlamento en elecciones«, demostrando así que el «periodismo» en Venezuela vive el momento mas patético, mediocre y corrupto de toda su historia.
Antonio Guillermo García Danglades
Internacionalista, MA
Resultados Electorales | ||
Partido | Curules | Voto Popular |
LIBERAL (Centro-Izquierda) | 135 | 36.71% |
CONSERVADOR (Derecha neoliberal) | 99 | 29.61% |
BLOQUE QUEBEQUENSE (Separatistas) | 54 | 12.40% |
NUEVO PARTIDO DEMOCRÁTICO (Izquierda Progresista) | 19 | 15.69% |
No Alineado | 1 | .13% |
OTROS (Verde, Comunista, Marihuana, etc.) | 0 | 5.47% |
Fuente: CBC | 308 curules |
Canadienses eligieron una nación mas fuerte
Editorial del Toronto Star, 29 de Junio de 2004
Los canadienses demandaron un cambio, pero rechazaron el cambio promovido por Stephen Harper y su nuevo partido Conservador que hubiera debilitado el gobierno federal, reabierto viejas batallas sociales y tomado un camino fiscal riesgoso.
Este fue el mensaje del inesperado pero fuerte resultado en las elecciones que eligieron al Primer Ministro, Paul Martin, y que le dieron a los liberales curules en todas las regiones del país.
En lugar de girar hacia la derecha, los Canadienses optaron por una alternativa social progresista que promoviera el sistema de salud gratuito y universal, presionara para lograr mejorar la infraestructura de las ciudades, mejorara el medio ambiente y luchara por ser prudentes con el ingreso fiscal.
Al mismo tiempo, electores en toda Canadá enviaron un mensaje fuerte a Martin y a los liberales sobre el cansancio que existe con la corrupción, el malgasto y la arrogancia que marcaron al gobierno al final de sus 11 años en el poder. Para Martin, fue una victoria agridulce. Fracasó en ganar una mayoría, pero evitó un desastre que muchas empresas encuestadoras y analistas predijeron de cara al día de las elecciones.
Como líder de un gobierno minoritario, Martin ahora encara la dura tarea de hacer que funcione el próximo parlamento y evitar que se produzca otro proceso electoral. Los canadienses esperan que el partido «Nuevo Partido Democrático» (NDP) trabaje con él.
El fuerte resultado mostrado por el NDP le asegura a Martin que tendrá un partido progresista en la oposición con quien puede lograr alianzas aceptables en salud, infraestructura en ciudades, programas cuidado infantil y vivienda accesible.
A los liberales les fue extremadamente bien en el Atlántico, consiguiendo un curul mas de los que ya tenía en el pasado. También se manejaron bien para mantener muchos de sus curules en Ontario. El «Bloque Quebequense», que ganó el mayor número de curules en su historia, había soñado con conseguir el balance de poder en un gobierno minoritario. Esas esperanzas se evaporaron con el fuerte resultado mostrado por los liberales y la sólida actuación de los Nuevos Demócratas, que lograron rejuvenecerse bajo el liderazgo de Jack Layton.
Fue una noche decepcionante para el nuevo partido Conservador. Hace menos de dos semanas, Harper estaba seguro de formar un gobierno mayoritario. Sin embargo, el fracaso de los conservadores en incrementar su voto popular y lograr una significante presencia en Ontario y en las provincias del Atlántico, indica que la plataforma del partido de bajar mas los impuestos, reducir el gasto público y la americanización del sistema político es demasiado impopular.
Aun así, Harper y los conservadores lograron establecerse como un partido fuerte y verdaderamente nacional, lo cual es positivo para el proceso democrático en Canadá.
Martin tiene poco tiempo para descansar en sus laureles. El debe curar a una nación fracturada y enfocarse en resolver los problemas que encara el país. No hay razón para que un gobierno minoritario no pueda funcionar bien. Ha funcionado en el pasado. Un gobierno minoritario no es malo para el país, especialmente en este tiempo cuando Canadá parece dividida en tantos aspectos.
Martin también deberá esforzarse para ganar la confianza del pueblo canadiense. Él tendrá que conducir un gobierno limpio y transparente que gane la admiración del contralor general por el manejo de los ingresos fiscales en lugar de las acusaciones severas que fueron reflejadas en las auditorias del registro de armas, el fiasco de dos billones de dólares en Recursos Humanos y el programa de contratos que se transformó en un explosivo escándalo.
Al final, los Canadienses lograron el resultado electoral que muchos habían querido – una minoría Liberal. El electorado quiso castigar a los Liberales pro su arrogancia, malgasto y corrupción. Pero no podían aceptar que los Conservadores, cuya visión de Canadá estaba fuera del paso de los puntos de vista moderados de la vasta mayoría de electores.
Ahora, Martin debe ponerse a trabajar rápidamente y llevar a cabo el fuerte, social y progresista gobierno que los Canadienses quieren.
Traducción : A. García.