Concluyó este domingo 29 de enero el Foro Social Mundial policéntrico de Caracas. Que había tomado la posta de Bamako (19 al 23 de enero) y que anticipa el de Karachi a realizarse en abril próximo. Mientras tanto, todo está en marcha para que Atenas, Grecia, reciba el Cuarto Foro Social europeo en la primera […]
Concluyó este domingo 29 de enero el Foro Social Mundial policéntrico de Caracas. Que había tomado la posta de Bamako (19 al 23 de enero) y que anticipa el de Karachi a realizarse en abril próximo. Mientras tanto, todo está en marcha para que Atenas, Grecia, reciba el Cuarto Foro Social europeo en la primera semana de mayo.
El » anti-Davos del Sur «, nacido en Porto Alegre y cuya primera edición se realizó en el 2001, ha vivido desde entonces en un desarrollo acelerado: cinco foros mundiales centralizados (2001,2002,2003 y 2005 en dicha ciudad brasilera y 2004 en Mumbai); un evento policéntrico en tres continentes (2006); tres foros continentales europeos (Italia, Francia y Gran Bretaña); dos continentales latinoamericanos (Ecuador y Caracas); decenas de encuentros nacionales en casi todos los continentes, centenas de encuentros temáticos o sub-regionales…
Todo parece comprobar que esta » maratón forística » responde a una enorme necesidad de la sociedad civil planetaria, que débilmente conectada antes, va tomando personalidad propia desde el 2001, sencillamente por el hecho de conocerse.
Ya son miles y miles las organizaciones, asociaciones, redes, movimientos sociales y campañas que se reconocen unas a otras. Y detrás de las mismas, hay seres humanos, de carne y hueso, que rompiendo las imposiciones más individualistas del sistema, también se reconocen, se encuentran, sueñan, debaten, programan, proponen…
Falso sería idealizar este proceso y mucho más peligroso sería contentarse con los pasos dados hasta ahora considerándolos como triunfales o suficientes. Es tan evidente la inviabilidad del actual sistema económico-social hegemónico a nivel planetario y tan profundo el desgaste que el mismo ocasiona al planeta, que cualquier esfuerzo humano, por enorme que sea, siempre será insuficiente.
Y la vulgarización de este concepto, del » tiempo político acelerado » como necesidad para evitar la auto-destrucción del planeta fue tal vez uno de los aportes esenciales del Foro de Caracas que acaba de terminar.
No se puede seguir esperando eternamente. La tierra se consume lentamente al unísono de un sistema ilógico, inviable e inhumano.
Seguramente en Davos, en el Foro Económico Mundial suizo que viene de finalizar, el debate esencial fue en torno a la mayor rentabilidad, las mejores ganancias, la más eficiente » productividad «. En Caracas, el debate esencial, giró sobre la responsabilidad ya, ahora, actual, inmediata, de la especie humana para salvar la casa comùn.
Se podrá acusar al Foro Social Mundial de falencias propositivas. Es un proceso y las alternativas no son fáciles a identificar. Sin embargo, en Caracas primó la preocupación humana sobre la tierra y la especie. Y no es poco.
Alguien dijo en Caracas que los grandes problemas mundiales podrían comenzarse a resolver con solo un «pequeño» hecho político: si los Estados Unidos » declararan la paz al mundo». Completo: ¿ y si Davos declarara el fin de la miseria en la tierra?