En el anterior artículo nos referimos a los aprestos de la derecha para derrocar al compañero Lucho, y también pusimos énfasis en las limitaciones, errores y carencias que tiene el Gobierno y su instrumento, el MAS.
Categoría: Bolivia
Los medios de comunicación de la oligarquía empresarial, conformados por redes de televisión, medios escritos y agencias de noticias, nuevamente cumplen la tarea de generar un dispositivo discursivo que pretende influir en la opinión pública exacerbando problemas.
Abril ha separado a la familia boliviana, decía Marcelo Quiroga, y se preguntaba si alguna vez los bolivianos se han unido en torno de algo, y tajantemente respondía: jamás.
A dos años de esa gesta corresponde no dejar que caiga en el olvido y no dejar que se entierre la lucha del pueblo que en ese momento asumió la determinación de salir a las calles hasta recuperar la democracia.
Mucho se ha escrito y hablado desde aquel año inflexivo, el 2014, sobre la “crisis del progresismo” y el “fin de su era”. El devenir de los acontecimientos ha confirmado parcialmente sus análisis.
“Su cuerpo y vida estaban en el movimiento obrero, pero su cabeza pertenecía sin duda a la pequeña burguesía”
Ningún acto jurídico o administrativo, sea Ley, Decreto, Declaración o Sentencia Constitucional, pueden convertir a un gobierno De Facto en un gobierno De Jure.
Hace un mes, la expresidenta de facto Jeanine Añez, junto al excomandante del ejército, general Williams Kaliman, y de la policía, general Yuri Calderón, ambos prófugos, fueron sentenciados en juicio ordinario penal a 10 años de prisión por haber violentado la Constitución cuando Añez se proclamó gobernante en noviembre de 2019.
Partamos de dos hechos incuestionables. El primero, es que los únicos gobiernos que pudieron reformar estructuralmente la policía y las fuerzas armadas, fueron los cubanos y venezolanos; y, el segundo, se remite a la reapertura democrática de los años 82, cuando la policía en abril de 1985 captura el primer narcoavión, da comienzo a su proceso de desinstitucionalización, donde los únicos afectados son el Estado y la sociedad.
La propia lógica del capitalismo en su fase neoliberal genera crisis cada vez en ciclos más cortos y más aún ahora con las consecuencias de la pandemia del coronavirus y la Guerra en Ucrania.