Elon Musk exhibe la convergencia entre la geopolítica neoliberal y las corporaciones oligopólicas.
Elon Musk exhibe la convergencia entre la geopolítica neoliberal y las corporaciones oligopólicas.
Hace 40 años, en el verano del año 1982, dos estudiantes de los institutos Egara (Terrassa) y Pau Vila (Sabadell), Maite y Jordi eran sus nombres, descubrieron el fósil VM-0, que, conocido como ‘hombre de Orce’, iba a revolucionar la historia de la paleoantropología. El artífice de todo eso, de la renovación de la paleoantropología y de una forma diferente de hacer ciencia, fue el doctor José Gibert Clols, quien llevaba trabajando sobre el terreno de Orce desde el año 1976.
Antes de intentar dar respuesta a la pregunta formulada sobre cuál podría ser una posible agenda de digitalización para garantizar el Derecho Humano a la educación y entrar en la materia específica de la relación entre tecnologías digitales y educación es preciso trazar las coordenadas de la estructura que subsume a dicha relación.
El uso de la tecnología para callar opiniones contrarias al pensamiento occidental, no es nuevo. Ahora ni siquiera perdona a figuras de fama mundial cuyas actividades no están relacionadas con la política.
¿Es la tecnología destructora de la vida, preservadora de la vida o sólo un mero instrumento neutral?
Frente a la resolución británica de extraditar a EE.UU. al editor de WikiLeaks, el presidente de Ecuador dijo: “Respetamos el fallo de los tribunales del Reino Unido y como país daremos todas las facilidades que correspondan, de acuerdo con aquel fallo”.
Con las firmas del Premio Nobel de la Paz (1980), Adolfo Pérez Esquivel, y la madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Nora Cortiñas, el Servicio de Paz y Justicia hizo un llamado “a todos los medios de comunicación, a periodistas que luchan por la libertad a pronunciarse” para “reclamar la libertad de Julián Assange; quien con coraje cívico, publica documentos de los EE.UU., país que viola los derechos humanos y de los pueblos”.
El juicio contra Assange revela el enseñamiento, la inquina y la preocupación de Washington contra quien reveló al mundo los crímenes de lesa humanidad cometidos por sus fuerzas armadas en Afganistán e Irak.
El periodista tiene hasta el 18 de mayo para apelar la decisión ante al ministerio del Interior británico. La justicia estadounidense quiere juzgarlo por la filtración de documentos clasificados que revelaron violaciones a los derechos humanos en las guerras de Irak y Afganistán.