El sábado será la Convención Nacional Democrática en el Zócalo de la ciudad de México, en el que la coalición izquierdista determinará los pasos a seguir en una asamblea multitudinaria. ¿Podrá asumir Calderón en diciembre? El 16 de septiembre se celebra la Independencia de México. La noche anterior, la del 15, se produjo en 181o, […]
El sábado será la Convención Nacional Democrática en el Zócalo de la ciudad de México, en el que la coalición izquierdista determinará los pasos a seguir en una asamblea multitudinaria. ¿Podrá asumir Calderón en diciembre? El 16 de septiembre se celebra la Independencia de México. La noche anterior, la del 15, se produjo en 181o, el famoso «grito de Dolores» también conocido como «grito de la Independencia». Todos los años frente al pueblo y al típico desfile militar, el presidente en ejercicio es el encargado presidir los festejos oficiales en el Palacio Nacional frente al Zócalo, pleno centro del Distrito Federal. Mientras tanto, en todo el país se brinda con tequila.
Pero esta vez, año 2006, el tradicional festejo será diferente. En el mismo lugar y en misma jornada, más de un millón de delegados de la coalición Por el bien de Todos celebrarán la Convención Nacional Democrática que discutirá el nuevo papel a desempeñar por López Obrador y por el movimiento de resistencia civil que comenzó el 3 de julio pasado, cuando la izquierda denunció «el fraude» para que gane la presidencia el candidato oficialista Felipe Calderón, del conservador partido Acción Nacional.
El nuevo papel que desempeñará López Obrador, en la vida política de México, también será acordado en la Convención. Las opciones que se manejan son declararlo Jefe de la Resistencia Civil o Presidente en Rebeldía. Es en esos términos de los que se está hablando en el Partido de la Revolución Democrática (PRD), al que pertenece el ex alcalde de la ciudad de México.
Los organizadores del encuentro democrático han expresado su optimismo por la participación ciudadana y de delegados de todas partes de México. Se espera que de la Convención surja una nueva organización política y social que desconozca la presidencia de Felipe Calderón.
«Esperamos que se despierte toda esta iniciativa popular que es derivada del fraude electoral y que se ha visto multiplicada en muchos sectores de la sociedad y que a través de este gran encuentro nacional, surjan las líneas principales de organización en los territorios, en los barrios, en las colonias en los municipios», dijo Alejandro Fernández, del PRD.
Javier Delgado, delegado de la Convención, expresó que el evento es una novedad en México y que representa el despertar del pueblo mexicano que desea un cambio integral en su país.
«La gente esta clara en este dilema: Agachar la cabeza o rebelarse en algo nuevo que nunca hemos vivido, un movimiento social pacifico», agregó Delgado.
Marti Batres del PRD dijo que habría que declarar a López obrador » Presidente de México para que gobierne el país que el es mandato que le dieron los ciudadanos. Esta opción significa iniciar efectivamente una dualidad «pero no será la primera vez en nuestra historia», añadió.
La Convención Nacional Democrática se ha convertido en la opción de los millones de mexicanos que piensan que su voto no fue respetado por las autoridades electorales que le dio la victoria a Calderón tras dos meses de tensa espera y muchas polémicas, por apenas 230 mil votos en un total de poco más de 41 millones de sufragios.
Con muchos medios de comunicación en la línea oficial, la Convención representa un espacio para la voz de quienes denunciaron fraude electoral.
«La Convención da esa oportunidad, ofrece que la gente que ha sido excluida, desplazada y nunca escuchada, se escuchada», dijo Erendira Cruzvillegas, del Colectivo por la Democracia AC.
Pero el objetivo es ir más allá, y muchos no descartan que se esté forjando un verdadero movimiento con aspiraciones de cambio social que democratice la sospechada y corrupta vida política mexicana, que ni aun el cambio producido en el año 2000 al salir del poder el jurásico Partido Revolucionario Institucional (más conocido como PRI), pudo desterrar.
En este sentido, hay analistas que afirma que el derechista PAN, en el gobierno desde hace seis años, perfeccionó el sistema pero con una mejor imagen de pulcritud hacia dentro y fuera del país.
Con gran parte de la gente asqueada de la miseria, la corrupción y los arreglos que se producen «allá arriba», acaso el momento de otra revolución mexicana, se esté forjando.