«Desde la crisis económica, los migrantes corren cada vez más riesgos frente al racismo y la xenofobia», afirmó este jueves el presidente de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Nassir Abdulaiziz Al-Nasser. Al-Nasser hizo estas declaraciones al participar en la capital finlandesa del seminario internacional «Migración y comunicación», organizado en […]
«Desde la crisis económica, los migrantes corren cada vez más riesgos frente al racismo y la xenofobia», afirmó este jueves el presidente de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Nassir Abdulaiziz Al-Nasser.
Al-Nasser hizo estas declaraciones al participar en la capital finlandesa del seminario internacional «Migración y comunicación», organizado en forma conjunta por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), la cancillería de Finlandia y la agencia de noticias Inter Press Service (IPS).
El funcionario sostuvo que, para re-enfocar el debate público sobre la migración era necesario «prestar atención a los hechos y poner fin a los mitos».
«Hoy, las migraciones Sur-Sur se han vuelto tan propagadas como las migraciones Sur-Norte. La mayor parte de las migraciones ocurren en cortas distancias a países vecinos y dentro de una misma región», indicó.
Aunque se habla más de la emigración hacia el Norte, Nasser señaló que, por ejemplo, «en los estados árabes y en el Golfo, los inmigrantes constituían más de la mitad de la población en edad laboral».
«Y estos envían remesas a sus familias en sus países de origen. En 2010, fueron enviados unos 325.000 millones de dólares. En los últimos años, el costo de las remesas ha caído, y esto ha ayudado a sacar a muchas familias de la pobreza», destacó.
Además, sostuvo que la cooperación internacional era necesaria para garantizar que las migraciones ocurrieran «en condiciones óptimas con óptimos resultados». «Las organizaciones internacionales deben asegurar que las migraciones beneficien a los países de origen de los que emigran», sostuvo.
Esas necesidades y esos hechos deben ser conocidos y entendidos bien, coincidieron participantes del seminario, hechos referidos tanto a los beneficios que las migraciones traen a las economías de los países receptores como sobre los que aportan al desarrollo de sus naciones de origen.
Esto se ha convertido en una necesidad urgente, considerando la hostilidad que pueden generar las ideas relacionadas sobre las migraciones, dijo William Lacy Swing, director general de la OIM.
«Una ola de sentimientos anti-inmigrantes ha barrido el mundo. Es necesario que comencemos a formar una visión más acertada de lo que es la migración», señaló.
Más que los hechos, son el discurso de los medios y la opinión pública lo que ha influenciado las políticas, dijo. «Y ese impacto es muy negativo. La xenofobia está reapareciendo en las sociedades. Las contribuciones abrumadoramente positivas de la abrumadora mayoría son rápidamente olvidadas», añadió.
«Necesitamos desmitologizar la migración», dijo. Un mito común es que ocurre a través de fronteras internacionales, pero «esto no es así», subrayó.
Además, indicó que el número de migrantes que se trasladan dentro de su propio país es tres veces mayor que el de los que viajan a otras naciones.
Informes recientes mostraron que 210 millones de personas migran dentro de China. «Esto es bastante cercano a los 214 millones de migrantes internacionales», señaló.
Frente a los desequilibrios económicos, la migración es inevitable, dijo. «La migración es una de las estrategias más antiguas para la reducción de la pobreza. Si no puedes hacerlo en tu lugar, te mudas», señaló.
Esas necesidades no son tomadas en consideración. «Es importante recordar que muchas personas sufren la necesidad de huir, de convertirse en refugiados, buscar una vida decente y trabajar en otra región», dijo a IPS la ministra finlandesa para Desarrollo Internacional, Heidi Hautala.
«Tenemos que ser mucho más conscientes de la necesidad de proteger a esas personas». Finlandia, dijo, tendrá a los migrantes en mente cuando elabore un nuevo programa de políticas.
«Quiero subrayar que necesitamos darle un lugar especial a los derechos de las mujeres y de los niños, y (reconocer que están en el centro de todas las fases de desplazamiento», indicó.
Todos coincidieron en que se necesitaba una mejor información sobre el fenómeno. «Todos somos afectados por él. Ocurre en nuestras sociedades», dijo Peter Schatzer, jefe de personal de la OIM.
«Ahí es donde viene el papel de los medios y de las organizaciones internacionales», indicó.
El mundo reconoce cada vez más el impacto del fenómeno en todas sus formas, señaló. En 2000 no figuraba en los Objetivos de Desarrollo de la ONU para el Milenio, «aun cuando siete de las metas están afectadas por la migración».
El debate ahora está cambiando para darle a la migración un papel más central, indicó Schatzer.
«En el futuro importará más», dijo el director general de IPS, Mario Lubetkin. «Necesitamos vincular la migración con el ambiente, con el cambio climático, con los desastres, con el agua, los empleos, los derechos humanos, las mujeres, la infancia. Necesitaremos informar más sobre lo que ocurre en el escenario de las migraciones», añadió.
Fuente original: http://www.ipsnoticias.net/nota.asp?idnews=99358