Recomiendo:
0

La nueva crisis en Ucrania certifica el fracaso de la Revolución Naranja de noviembre de 2004

Fuentes: Gara

Las calles de Kiev, capital de Ucrania, fueron escenario ayer de sendas manifestaciones en contra y a favor de la disolución del Parlamento (Rada) con la que amenaza el presidente, Viktor Yushenko, uno de los principales artífices de la Revolución Naranja de noviembre de 2004 y que fue un intento de aupar a élites pro-occidentales […]

Las calles de Kiev, capital de Ucrania, fueron escenario ayer de sendas manifestaciones en contra y a favor de la disolución del Parlamento (Rada) con la que amenaza el presidente, Viktor Yushenko, uno de los principales artífices de la Revolución Naranja de noviembre de 2004 y que fue un intento de aupar a élites pro-occidentales a la cúpula del poder.

Yushenko lanzó ayer un ultimátum a la coalición que lidera su otrora rival en las urnas, Viktor Yanukovich, delfín del ex presidente Leonid Kuchma y primer ministro tras las últimas elecciones generales.

Yanukovich ha incorporado a su coalición a 21 diputados de la oposición pro-occidental, lo que le garantiza la mayoría constitucional para superar el veto presidencial a las leyes aprobadas por el Parlamento.

Esta nueva situación amenaza con atar de pies y manos a Yushenko, quien tras lograr el tercer puesto para su formación en las elecciones legislativas optó por firmar un acuerdo de gobierno con Yanukovich para instaurar una suerte de legislatura de cohabitación.

Esta decisión fue tildada de traición por su otrora aliada en la Revolución Naranja, Yulia Timoshenko, quien quedó al margen del reparto de poder.

No obstante, las relaciones entre el presidente Yushenko y la mayoría liderada por Yanukovich -y que en Occidente se tilda de prorrusa, en un ejercicio de simplificación-, son todo menos relajadas.

El presidente califica el refuerzo del grupo parlamentario liderado por el Partido de las Regiones de Yanukovich de inconstitucional y exige ahora la aprobación de una ley que fuerce a los diputados a cumplir con el «mandato electoral».

Asimismo, Yushenko exige ahora un refuerzo de sus prerrogativas presidenciales, cuando él mismo pactó su rebaja con el bloque de Yanukovich.

Exige, al fin, a este último que asuma las posiciones pro-occidentales de la Presidencia.

De lo contrario, amenaza con disolver el Parlamento.

Manifestaciones cara a cara

Decenas de miles de seguidores del Partido de las Regiones se manifestaron en Kiev contra este adelanto electoral.

A la misma hora, unos cuantos miles de opositores pro-occidentales exigían la disolución del Parlamento.

Todo apunta a que el hoy por hoy dividido bloque pro-occidental no lograría en ningún caso la mayoría absoluta, por lo que la convocatoria corre el riesgo de enervar los ánimos de los sectores no atlantistas.