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Más pruebas del desastre de las agencias de «inteligencia» estadounidense

Fuentes: Rebelión

Asistimos a un mundo cada día más convulsionado, plagado de disputas territoriales y comerciales, crisis económica, contaminación, cambios climáticos, guerras, hambre y miseria que invita al pesimismo. La propia Meca del capitalismo global, Estados Unidos, proyecta su descomposición al mundo. Sus disputas internas se muestra cada vez más complejas, enrarecidas por las confrontaciones dentro del […]


Asistimos a un mundo cada día más convulsionado, plagado de disputas territoriales y comerciales, crisis económica, contaminación, cambios climáticos, guerras, hambre y miseria que invita al pesimismo. La propia Meca del capitalismo global, Estados Unidos, proyecta su descomposición al mundo. Sus disputas internas se muestra cada vez más complejas, enrarecidas por las confrontaciones dentro del mismo establishment estadounidense; entre la histórica élite político – económica dominante y la nueva clase política empresarial más pragmática, hoy representada por el magnate Donald Trump. Nada avizora que vaya a detenerse aquella puja interna. Todos los días se suscitan nuevos hechos bochornosos, acusaciones mutuas que dejan ver las grietas de un imperio en decadencia cuyo «liderazgo» mundial también se ve muy golpeado y disminuido. Hoy podemos entender que el liderazgo estadounidense ha sido posible gracias a una mezcla de amenazas, chantaje y miedo. Sí, el chantaje que supusieron los acuerdos de Bretton Woods en 1946 y el miedo que proyecta la arrogante dirigencia de un país extremadamente beligerante, que dispone de miles de bombas atómicas, más 800 bases militares distribuidas en todo el mundo y un indiscutible «poderoso» aparato de inteligencia que terminó no siendo tan inteligentes como se pensaban. Pero ya poco o nada hace brillar a Estados Unidos, de no ser por sus amenazas y espectáculos ante el mundo. Su ambición de pretender occidentalizar al mundo, sirviéndose como un «policía mundial», la ocultan más.

Las nuevas revelaciones de Wikileaks con más de 8.000 páginas web y cerca de 1.000 archivos adjuntos que escandalizaron a varios medios internacionales, no dejan nada para la imaginación ni se aleja mucho a las informaciones filtradas meses atrás por los valientes Julian Assange y Eduard Snowden*, y que develaron la responsabilidad de la administración Obama en un hecho que dejó en pañales al pequeño caso de espionaje ejecutado por el presidente Richard Nixon por el que fuese destituido en 1974. Ésta vez se trataba de un Watergate mundial justificado en la falsa lucha contra el terrorismo.

Lo ocurrido viene a confirmar que la Agencia Central de Inteligencia estadounidense (la CIA) y las demás agencias aliadas (NSA) siguen burlándose del mundo, recogiendo información de inteligencia de mercado, política e industrial por medio del sistema de cifrado de las aplicaciones populares, también hakeando todos los teléfonos y equipos electrónicos de muchas personas en el mundo, incluyendo los de sus «aliados», cuya información era utilizada para otros propósitos que nada tenían que ver con la «lucha contra el terrorismo», y las «amenazas a la seguridad de Estados Unidos», sino que eran vendidos en una especie de mercado paralelo de la información como arma de chantaje político y de guerra empresarial. Todo esto viene ratificar lo que muchos pensadores en el mundo (de izquierda y derecha) ya reconocen sin mucho asombro: el sistema imperial estadounidense se encuentra en profunda y acelerada descomposición.

¿Qué desenlace tendrá todas estas nuevas revelaciones que restan seriedad a los aparatos de inteligencia estadounidense? ¿Qué tan inteligente y confiable puede ser un servicio al que se le escapa toda «información secreta»? ¿Cuánta soberanía e intimidad están dispuestos a sacrificar los políticos occidentales en aras de mantener contento al manda más? Sin éstas actividades ilegales de Estados Unidos ¿Cómo podría organizarse el sistema capitalista mundial sin un policía que controle y someta al resto de los pueblos del mundo? ¿Podrá Estados Unidos prescindir de éstas técnicas del chantaje y las amenazas para imponerse en el mundo? Lo dudo.

Espero no ser pesimista. 

Fuentes: http://www.bbc.com/mundo/noticias/2013/06/130610_internacional_ee_uu_national_security_agency_perfil_nc

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.