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Usarmy: Desde el Caribe contra la autodeterminación de las Américas

Fuentes: Rebelión

La estrategia neoliberal impuesta desde el imperialismo actual sobre los países de América Latina y el Caribe ha conducido a una creciente ingobernabilidad de las fuerzas intermediarias (partidos políticos y clases de la dominación) rectoras de las instituciones vigentes. Eso explica las sucesivas derrotas de las derechas pro-neoliberales del continente en todos los escenarios y […]

La estrategia neoliberal impuesta desde el imperialismo actual sobre los países de América Latina y el Caribe ha conducido a una creciente ingobernabilidad de las fuerzas intermediarias (partidos políticos y clases de la dominación) rectoras de las instituciones vigentes.

Eso explica las sucesivas derrotas de las derechas pro-neoliberales del continente en todos los escenarios y el debilitamiento de las palancas políticas de la dominación, incluidos sus mecanismos electorales.

Explica también la recurrencia de un imperialismo pentagonizado, como lo es el imperialismo estadounidense, al uso de la fuerza militar, en un continente donde la voluntad de cambios contamina hasta procesos electorales diseñados para reciclar y darle continuidad al modelo impuesto.

RESISTENCIA Y AVANCES A PESAR DE LOS HALCONES

  • La Revolución Cubana, expresión integral de la rebeldía antiimperialista en el hemisferio occidental, concentrado de la antítesis política, militar e institucional del imperialismo agresor, no ha podido ser derrotada, aun después de los efectos devastadores del colapso del llamado «bloque soviético».
  • EL Ejército Zapatista de Liberación (EZLN) no ha sido vencido ni militarmente ni políticamente.
  • Tampoco las FARC y la insurgencia colombiana, que por el contrario, ha puesto en vilo el llamado Plan Colombia-Iniciativa Andina- y específicamente su versión militar sintetizada ahora en el denominado Plan Patriota-, engendro de la contrainsurgencia económica, social política y militar tutelada por los halcones de Washington.
  • A la revolución bolivariana de Venezuela no la pudieron aplastar cuando se expresó como rebeldía militar y movimiento subversivo extrainstitucional, ni tampoco cuando incursionó, para luego dinamitarla políticamente, en la vía electoral de la democracia representativa.

Menos aun han podido hacerlo una vez convertida en poder impulsor de la nueva democracia, en gobierno e instituciones no denominadas por la oligarquía y el imperialismo. No han valido las huelgas patronales, las campañas mediáticas contrarrevolucionarias, los paros cívicos oligárquicos, las conspiraciones y los golpes (o intentos) de Estado. Pende el plan magnicida en forma constante y resta emplear la acción militar directa, la intervención militar de las tropas estadounidenses.

  • En los escenarios electorales, las más de las veces, cuando logran conformarse opciones no controlada por el Departamento de Estado, la CIA y el Pentágono, las fuerzas políticas que gozan de la preferencia imperial y oligárquica son derrotadas por las que no tienen el favor de Washington. Esto independientemente de la evolución y/o involución de esas opciones alternativas triunfantes. Son los casos relativamente recientes de Brasil, Ecuador, Bolivia y Uruguay, y podría ser también el de Perú.
  • El mapa político Suramericano ha venido cambiando a contracorriente del conservadurismo estadounidense y de la voluntad de los halcones, evidenciando un cierto agotamiento de la hegemonía política de las partidocracias sumisas a Washington y de la propia gravitación política del imperialismo estadounidense.
  • Grandes luchas sociales han estremecido en los últimos años a Argentina, Bolivia, Perú y Ecuador.
  • En la propia Republica Dominicana han tenido lugar innumerables protestas nacionales, regionales y locales, aunque sin canalización política alternativa.
  • Puerto Rico entra en una fase singular de su lucha anticolonial, de su rebeldía social y patriótica. Las huelgas contra las privatizaciones, las victorias en el caso de Vieques y el impacto del asesinato de Filiberto Ojeda, marcan hitos relevantes en el proceso de conformación de un nuevo sujeto socio-político del proceso de autodeterminación de los boricuas.

Esas son señales claras de lo fallido que están resultando los mecanismos de dominación política, económica y social del imperio.

Y no son las únicas. Hay otras mas, quizás no tan expresivas, pero también significativas e importantes.

SOBREDIMENSION DE LO MILITAR

Estos es lo que determina que los EEUU pasen a darle todavía más relieve a la cuestión estrictamente militar, hasta alcanzar las características de una especie de posicionamiento, movilización y ensayo para una variante de la guerra de gran intensidad.

Previsiones en ese orden y guerras de baja intensidad han estado ejecutándose, incluidas reestructuraciones y reposicionamientos de sus fuerzas militares fijas. Y acciones operativas.

  • Lo militar en el Plan Colombia.

En Colombia la vertiente militar del Plan Colombia-Iniciativa Andina (y específicamente su derivada como Plan Patriota), tiene todas las características de una guerra de baja intensidad.

Allí se ha reforzado la inteligencia militar del Pentágono, la CIA y otras agencias estadounidenses. La DEA ha servido también de canal para esa intensa penetración.

Se ha renovado el sistema técnico de vigilancia, introduciendo radares de altura (vía satélite) que cubren todo el país.

Se han diseñado corredores internases militares, que a su vez se comunican con el exterior.

Han consolidado la Base Tres Esquinas, dirigida hacia la alta Amazonía. Y se ha construido la base de Larendia, preparada con pista para B52, con propósitos militares que van mucho más allá de las fronteras colombianas y de la lucha anti-narcótica.

El Pentágono amplió en Colombia su dotación de helicópteros y aviones, así como su intervención en los entrenamientos, la formación de batallones bajo su dirección y la conducción directa de determinados combates contra la insurgencia. El numero de oficiales gringos en Colombia se estima en mas de dos mil

RESTRUCTURACIÓN CONTINENTAL

El Comando Sur de las Fuerzas Militares de EEUU ha prevalecido sobre el Comando Atlántico, asumiendo desde el Sur de México el control y la conducción para toda América Latinoamérica y el Caribe, lo que procura superar las grietas en las operaciones «antidroga»,- y ahora «antiterroristas»-, en los adiestramientos y en los nuevos procesos de tutelaje sobre los militares de la región.

Sus funciones militares no se publicitan mucho, pero si sus iniciativas civiles (obras de ingenierías, operaciones de auxilio humanitario, búsqueda, socorro y rescate…) dirigidas a ablandar reacciones nacionales. A esas mascaradas sirven las llamadas operaciones «Nuevos Horizontes».

Llaman la atención las «posiciones de proyección avanzada» de las fuerzas estadounidenses, presentes en su cadena de bases militares y en la presencia de tropas especiales en la región, con tendencia a la proliferación de bases pequeñas en dotación humana pero altamente especializadas. (Bases Fol o Ubicación de Operaciones de Vanguardia). Las Fols amplían el espacio geográfico de la presencia militar directa. En Suramérica instalaron una en Paraguay, extendiendo más allá de la Base de Manta en Ecuador y de la base en Perú su presencia directa permanente.

EL CARIBE BAJO OCUPACION MILITAR.

Innumerables medidas preventivas y de acción directa han sido tomadas en la Cuenca del Caribe y zonas próximas a ellas, incluidos el Caribe Isleño, el Gran Caribe y Centroamérica.

No olvidemos la importancia geoestratégica y política de esta Cuenca y del propio Mar Caribe, bisagra acuática de Continentes y Hemisferios, paso de América a Europa, conexión entre el Atlántico y el Pacifico, entre Occidente y Oriente.

Pero no solo.

El Caribe es además una ideal retaguardia estratégica-militar, ubicada en el centro de este continente americano, conectado con el Norte y cara a una Suramérica que se le está yendo de la mano a los Estados Unidos.

El Caribe es una encrucijada del gran comercio, un centro de comunicaciones civiles y militares.

Es un archipiélago de islas, enmarcadas por costas y bahías, aptas para establecer cadenas de bases militares y hacer desplazamientos intimidatorios y ofensivos contra regiones continentales.

Por tanto, es claro que el Pentágono sigue empeñado en fortalecer su presencia militar en esta zona y sus proximidades, convirtiéndola en una especie de retaguardia militar.

A las bases de Rooselvelt Roads, Sabina y Allen de Puerto Rico ha sido traslado el subcomando de las Fuerzas de Operaciones Especiales. De Rooselvelt Roads no ha salido, aunque lo prometieron. De Vieques tuvieron que salir forzados por las continuas protestas, pero todavía no han cumplido el compromiso de eliminar los campos minados y contrarrestar la contaminación radioactiva.

El Ejército Sur reestructurado pasó al Fuerte Buchanan en Puerto Rico y tiene la tutela sobre 16 mil efectivos del ejército boricua, todos bilingües, listos para operar en América Latina (parte de ellos están participando en la operación «Nuevos Horizontes» en República Dominicana).

En el Campamento Santiago (Puerto Rico) entrenan fuerzas estadounidenses y de otros países aliados al imperialismo.

Mantienen la Base Guantánamo en Cuba y la de Soto Cano en Honduras e instalaron nuevas bases en Aruba, Curazao y El Salvador (Comalapa).

Haití está intervenido por las tropas conjunta de EUU, Francia, Canadá, Chile, Brasil y otros países, bajo el disfraz de las Naciones Unidas (más de mil cascos azules).

La frontera de República Dominicana con Haití esta prácticamente bajo el mando del Comando Sur del Pentágono.

Se proyecta instalar una escuela de entrenamiento para sargentos del Caribe y Centroamérica, dirigida por el Comando Sur, en las proximidades de la Base Militar de la Marina de Guerra de República Dominicana, ubicada en el centro de la costa sur. (Bahía de las Calderas).

El Gobierno dominicano firmó el acuerdo que garantiza impunidad al personal militar y civil de EEUU radicado en el país.

EU sigue aspirando a instalar pequeñas bases altamente calificadas en la isla Hispaniola (Rep. Dominicana y Haití), dentro del programa de desconcentración y extensión del sus fuerzas militares impulsado por Rumfeld. Algo similar a lo que hicieron en Aruba y Curazao, ya los que están haciendo en Paraguay y todo esto se articula a los componentes militares del Plan Colombia-Iniciativa Andina.

La isla Saona y Alto Velo, próximas a las costas dominicanas, han estado siempre dentro de sus planes militares.

En ese tenor la «Operación Nuevos Horizontes», puesta en marcha en el suroeste de la Republica Dominicana, para realizarse entre marzo y mayo del año en curso (2006), asume características diferentes a las anteriores realizadas aquí y en otros países de la región.

Ella tiene una fuerte impronta pro base militar permanente precedida de la intervención en Haití, de la intervención fronteriza tutelada por el Comando Sur, del anuncio de la instalación de la Escuela de Sargentos a unos 100 kilómetros de su escenario de operaciones y del acuerdo garantizándole inmunidad al personal militar y civil estadounidense.

El sitio escogido, ciudad de Barahona, próximo a la frontera de Haití, cerca de Cuba, cara al mar Caribe, entre un moderno aeropuerto internacional y un puerto (activo), y el despliegue de equipos, armamentos y movimientos militares, imposibilitan ocultar el propósito de establecer, sino de inmediato, a continuación, una base de entrenamiento de tropas.

En esta ocasión el despliegue de sus actividades y los ejercicios militares terrestres y aéreos no han podido silenciarse. Todo un sistema montañoso, la Sierra Martín García, con su hermosa Loma del Curro, que penetra el mar al otro lado de la bahía de Barahona, ha sido empleado para trasladar equipos, hacer mediciones y exploraciones, construcciones de helipuertos y ejercitar grupos de soldados que eventualmente participarían en nuevas invasiones imperiales.

Los vuelos de reconocimiento y las acciones de simulacros, así como el establecimiento de corredores aéreos en diferentes direcciones, incluida la frontera suroeste con Haití, se han tornado en cosas cotidianas, reveladoras de planes ulteriores que tienen que ver con una isla en la que reina una calma aparentemente presta a ser alterada y con una región sensiblemente convulsionada.

Hasta aquí prima una intensidad intervencionista de bajo perfil, a lo sumo de mediano perfil. Pero todo esto no es más que el posicionamiento de algunas partes de un todo de mucho más envergadura.

ENSAYO DEL GRUPO COMBATE #10 DEL ARMY PARA UNA GUERRA DE ALTA INTENSIDAD.

En los primeros días de abril el mar Caribe ha sido escenario de una movilización militar sin precedentes.

El Comando Sur anuncia la puesta en marcha de una maniobra militar de «gran escala», bautizada con el gentil nombre «Confraternidad con las Américas».

La maniobra la encabeza el portaviones US George Washington con base en Norfolk, Virginia. Es de propulsión nuclear con un desplazamiento de 100mil toneladas y con capacidad para acoger cazabombarderos F-15, F-16, F-18 y Harrier, aviones Awaccs helicópteros diversos y 6,500 tripulantes y marines.

Le acompañan el Destructor Scout, la fragata misílica USS Underwood, el acorazado monterrey, varias corbetas y barreminas o escampavías, dos submarinos atómicos nucleares, con misiles torpedos atómicos.

Desde el imponente portaviones se están realizando constante vuelos de reconocimiento.

La súper maniobra, llamada a recorrer todo el Caribe, durará hasta finales de mayo (dos meses) y tiene previsto aproximarse a muchos puertos del área. Los primeros países en ser visitados serian Honduras, Nicaragua, Jamaica, Trinidad y Tobago, Aruba, Curacao o San Cristóbal, Nevis, San Kith y República Dominicana. A este país arribo el pasado 17 de abril el Destructor Stout. Fue recibido en puerto Caucedo por el Embajador estadounidense Hans Hertell, hombre de negocio vinculado a la familia Bush y nativo de Puerto Rico, quien ejerce la funcion de procónsul del imperio

¿Lo harán en Barahona donde posan sus pies y sus fundillos sus colegas de la operación «Nuevos Horizontes»? ¿Llegaron cerca de allí el portaviones George Washington?

Se asegura si de la visita a la costa colombiana, con posible recibimiento del propio presidente Uribe.

Los propósitos proclamados (estrechar brazos con «países amigos» y expresar la «mejor voluntad» de combatir el «narcotráfico» y el «terrorismo», están muy distantes de los reales.

Si las «cañoneras» y los «acorazados» del pasado nunca sirvieron para confraternizar, «estrechar lazos» y expresar voluntades contra los males que azotaban entonces nuestro continente, estas enormes máquinas de destrucción y muerte, ahora con colmillos nucleares, misiles atómicos y bombarderos capaces de descargar cualquier cantidad de explosivos sobre ciudades y civilizaciones humanas, solo cuentan para destruir y asesinar en masa, para intimidar, parar aterrorizar…

Esta maniobra involucra más poder de fuego destructor que la que movilizó el Pentágono a raíz de la crisis de octubre de 1962 en relación con los cohetes soviéticos establecidos en Cuba. Y posiblemente más, dadas las armas nucleares, la dimensión del portaviones y los submarinos atómicos en movimiento, que el que implicó la intervención República Dominicana en 1965.

Y tiene todas las características de un ensayo, de preparación de para un guerra de alta intensidad, en un teatro de operaciones que podría a ser empleado de verdad en un plazo relativamente corto.

Desplazamientos. Vuelos de reconocimiento. Medición de profundidades, próxima a las costas insulares y continentales. Estudio de zonas de desembarco y forma de abastecimiento.

Algo parecido a lo que en pequeño se está haciendo en Barahona, República Dominicana, se hace en GRANDE en todo el Caribe.

En Haití hay más de 7mil soldados extranjeros y se proyecta establecer una fuerza de unos 30 o 40 mil según los propios jefes e la misión de la ONU-USA.

En República Dominicana se han llegado a denunciar la posibilidad de un aumento progresivo hasta 14 mil. Estos en continuos entrenamientos reciclados.

Y esto conecta con este gran ensayo titulado con el mayor cinismo del universo: Confraternidad o Compañerismo con las Americas.

¿CONFRATERNIDAD CON QUIENES?

¿Con la Cuba de Fidel?

Con la Venezuela de Chávez?

¿Con la Colombia de las FARC y Marulanda?

¿Con los indios «revoltosos» del Ecuador?

¿Con Ollanta Humala y sus muchachos (as) andinos?

¿Con Evo el «cocalero»?

Me permito no solo dudarlo, sino sencillamente no creerlo.

¿Confraternidad con la naturaleza caribeña a la que se le regala el riesgo de la contaminación nuclear, no objetado ni por la ONU ni por la Organización Mundial de la Energía Atómica?

El daño está en marcha al ambiente y a la libertad.

Por que de entrada esa gran maniobra militar contamina el Caribe al tiempo que procura aterrorizar a las sociedades que anhelan cambios sustanciales.

Pero eso no es todo, ni tampoco lo peor.

Lo peor es lo que anuncia esa maniobra gigante puesta en marcha por un imperialismo pentagonizado, conducido por los magnates del complejo militar industrial, por los petroleros del sur, por los fundamentalistas republicanos, por la mafia cubano-americana de Miami, por los sionistas de la peor especie.

Ellos, hasta que no se le rebele la sociedad estadounidense (o una gran parte de ella), ganan aunque pierdan las guerras que promueven. Solo hay que ver los montos de ganancias de los emporios del complejo industrial de armamentos, la cotización de sus acciones.

Ellos, hasta que no pierden aliados internacionales en mayor escala, seguirán en las suyas.

Por eso ni siquiera lo que acontece en Irak, Afganistán, Palestina… los conmueve para dar marcha atrás. No importa cuantas vidas se pierdan y cuantas riquezas se destruyan.

De ellos hay que esperar lo peor. Y por eso la maniobra puesta en marcha, precedida de todos los pasos denunciados, es más que ominosa para nuestra América.

No se debe olvidar que en octubre de 1983, cuando los navíos de la VII flota se dirigían al mar Mediterráneo a realizar una maniobra parecida a la actual, fueron desviados para invadir la pequeña isla de Granada, gobernada entonces por sectores antiimperialistas.

Previamente, en agosto de 1981, el Pentágono realizó un ensayo de invasión en la isla de Vieques (Puerto Rico), el cual sirvió de modelo a la ocupación militar de Granada.

Esta maniobra militar luce ser el preámbulo de una guerra de alta intensidad, que tiene su primeros blancos de ataques definidos: Cuba y los procesos alternativos del norte del Suramérica, especialmente Venezuela, Colombia y Ecuador.

A Cuba posiblemente la tienen recetado primero el jarabe del cerco naval.

A Venezuela y a la insurgencia Colombiana los ataques directos.

El despliegue colosal de fuerza persigue intimidar y ablandar a los más débiles en esta América nuestra, aunque ciertamente pasar a los actos de guerra les exige pensarlo mas y estar dispuestos a costos políticos mucho mas elevados.

De todas maneras están perdiendo políticamente y eso los torna más peligrosos, dada sus densas obsesiones.

¡GRACIAS A LA EXISTENCIA DE FUERZAS MILITARES ALTERNATIVAS!

En verdad fueran «en coche» si Cuba no fuera la potencia militar que es.

Si no existieran las FARC-Ejército del Pueblo capaces de librar una guerra irregular de largo aliento y gran despliegue en toda esa sub-región.

Si no existieran una conciencia bolivariana en las Fuerzas Armadas de Venezuela y una voluntad de entrenar civiles y armar las reservas militares de ese país.

Si no existieran el Ejército Zapatista de Liberación Nacional y los grupos guerrilleros de México.

Si no hubieran indígenas rebeldes y pueblos empobrecidos capaces de insurreccionarse y de convertir en armas cualquier objeto.

Si no existiera el pacto de defensa militar cubano-venezolano.

Si ninguno de estos factores fueran realidades vivas y actuante, entonces podrían predecirse resultados posiblemente favorables a los invasores, a los ejércitos «Rambo», a las unidades «Robocop».

Pero todo esto existe para bien de la resistencia popular a escala continental, como existen también los grandes movimientos sociales pacíficos, los contingentes electorales progresistas, las fuerzas civiles de los grandes cambios. Son factores reales con posibilidad de aportes excepcionales a la «hora de los hornos»

De ahí al gran valor de esa acumulación político-militar antiimperialista.

Valor disuasivo, porque en caso de obligada confrontación, lo de Vietnam e Irak habrá de quedarle corto y su impacto en la sociedad estadounidense sería previsiblemente mayor, mas cuando la gran comunidad latina en EEUU se está convirtiendo en un gran sujeto político-social de presión interna.

Y por eso vale una exhortación a los inmigrantes latinos y tercermundistas radicados en EEUU y en Europa para que incorporen a sus formidables movilizaciones de defensa e nuestras patrias agredidas y expuestas a muchas guerras de exterminios ¡los halcones deben ser derrotados en todo los escenarios, incluido en su propia sede!

Vale pues la denuncia, el alerta, la preparación, la campaña, demandando ¡Ni un soldado yanqui en nuestra América! Y, sobre todo, vale la disposición a ser como Bolívar, como Máximo Gómez, como San Martín, como Martí, como Morazán, como Toussaint y Desalinne, como el Che, como Caamaño, como Albizu, como Filiberto….

Documentos y obras consultadas:

  • Fronteras en Conflicto. Humberto García Muñiz y Jorge Rodríguez Beruf. Red Caribeña de Geopolítica, Seguridad Regional y Relaciones Internacionales, proyecto Atlantea 1999.
  • Los Halcones Atacan. Narciso Isa Conde. Editora Tropical. Santo Domingo, Rep. Dominicana 2002.
  • Estados Unidos Realiza Maniobras Militares a Gran Escala en el Caribe. Tte coronel Héctor Herrera Jiménez 8/4/2006 ARGEPRESS.
  • El Grupo de Combate Estadounidense Arribará a Puertos Caribeños (mensaje enviado por Yahoo Domainkey, 17-4-2006)