El ex ministro de Finanzas griego Yanis Varoufakis y el senador demócrata estadounidense Bernie Sanders inauguraron oficialmente la Internacional Progresista para combatir el resurgimiento del fascismo a escala global y las injusticias económicas que golpean a las clases sociales que sufren los estragos del totalcapitalismo. En un acto celebrado los pasados días 1 y 2 […]
El ex ministro de Finanzas griego Yanis Varoufakis y el senador demócrata estadounidense Bernie Sanders inauguraron oficialmente la Internacional Progresista para combatir el resurgimiento del fascismo a escala global y las injusticias económicas que golpean a las clases sociales que sufren los estragos del totalcapitalismo.
En un acto celebrado los pasados días 1 y 2 de diciembre en el Instituto Sanders (Burlintong, Vermont, EEUU), Varoufakis y Sanders, ex candidato a la presidencia de Estados Unidos, señalaron que uno de los objetivos de ese movimiento, que agrupa a colectivos de todo el mundo, es pelear por un nuevo orden económico internacional con rostro humano, informó Democracy Now (Independence Global News).
La fuente agregó, en un video difundido en las redes sociales, que «la extrema derecha se expande por Europa, el caso más reciente en España, donde el Partido VOX consiguió muchos diputados (doce) en el Parlamento de Andalucía. Es el primer éxito que tiene la derecha radical en España desde que el país recuperó la democracia en los años setenta, poco después de la muerte del dictador fascista Francisco Franco».
En la ceremonia de presentación de la Internacional Progresista, a la que acudieron destacadas personalidades de todo el espectro social, tanto Varoufakis como Sanders recalcaron que es necesario «frenar el creciente peligro del fascismo» (En América ya ha penetrado en la presidencia de EEUU, Brasil, etc.,) que supone la Internacional Nacionalista, movimiento global impulsado por neonazis, religiosos fundamentalistas, ideólogos de los tiempos de la oscuridad, etc., ya que, de lo contrario, argumentan, las instituciones que rigen el mundo (ONU, Banco Mundial, FMI ) podrían caer en sus manos, lo que sería la gran tragedia del siglo XXI.
«Para combatir efectivamente el surgimiento de ese eje autoritario internacional necesitamos un movimiento progresista internacional que aborde la masiva desigualdad global que existe, no sólo en el apartado de la riqueza, sino también en el reparto del poder político», advirtió Bernie Sanders, de 77 años, en un artículo escrito en The Guardian el pasado mes de setiembre.
El detonante de la creación de la Internacional Progresista, a la que este escriba se adhirió desde un principio, fue la rendición de Syriza (el Podemos griego) a los poderes fácticos de Bruselas (desoyendo un referendo en contra) en julio de 2015, con lo que el pueblo heleno se endeudó hasta las cejas (debe ya 312.000 millones de euros) y no deja de sufrir recortes que lo hunden cada vez más en el pozo, sin fondo, de la pobreza.
Aquello produjo la dimisión, como ministro de Finanzas, de Yanis Varoufakis, de 57 años, quien calificó de «traidor» a Alexis Tsipras, el líder de Syriza.
«En 1967 fueron los tanques los que acabaron con la democracia (el golpe de los coroneles, que duró hasta 1974). En 2015 otros poderes extranjeros orquestaron otro golpe de Estado, sirviéndose de la banca», escribió en su blog Varoufakis para describir como Tsipras había vendido a Grecia por un plato de lentejas.
A finales de octubre de 2015, Varoufakis pidió perdón a Podemos al considerar («tenía más razón que un santo») que se causó mucho daño a la formación de Pablo Iglesias cuando Syriza se rindió ante la Troika y aceptó «el chantaje de un tercer rescate», estimado en unos 87.000 millones de euros, a cambio de ejecutar durísimos recortes que están llevando a la miseria a grandes capas de la población griega.
«Perjudicamos a Podemos cuando nos dimos por vencidos (…) No teníamos que haber tirado la toalla tras la victoria del «OXI» (NO) en el referendo del 5 de julio (2015) que empoderaba a Syriza a rechazar las imposiciones de Bruselas», reconoció Varoufakis el 14 de octubre de ese mismo año en declaraciones a Catalunya Ràdio.
Varoufakis intervino un día después en el Born Cultural Centre de Barcelona, donde se mostró profundamente decepcionado por el giro de Alexis Tsipras, cuyos esfuerzos -dijo- «por mantenerse artificialmente a flote han sido comparados repetidas veces con la tarea de Sisifo, condenado eternamente a empujar colina arriba la roca de la austeridad».
El autor del «Minotauro Global», (obra que explica cómo Estados Unidos recicla los capitales de todo el mundo a su favor) denunció que la Banca sólo quiere que en Europa «se mantenga el equilibrio del miedo».
En una sala abarrotada del Centre, (hubo que poner pantallas gigantes en el exterior), Varoufakis aprovechó la ocasión para anunciar la futura creación de la Internacional Progresista, a la que pertenecen, entre otros, la alcaldesa de Barcelona Ada Colau.
«Va a ser un movimiento progresista para democratizar Bruselas y ofrecer alternativas a las actuales políticas financieras que causan más sufrimiento, sin resolver los problemas fundamentales», subrayó Varoufakis en su magistral clase de economía política.
Blog del autor: http://www.nilo-homerico.es/
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